viernes, 30 de diciembre de 2022

Parashá 11 VaYigash

 Parashá 11 VaYigash

Génesis 44:18 – 47:27

Para ser leída y analizado en el Shabat del 7 de Tevet de 5.783

Diciembre 31 de 2.022

Aliyás de la Torá:

1.      44:18-30

2.      44:31 – 45:7

3.      45:8-18

4.      45:19-27

5.      45:28 – 46:27

6.      46:28 – 47:10

7.      47:11-27

8.      Maftir: 47:25-27

Haftará: Ezequiel 37:15-28

Código Real (HaTsofen HaMaljutí): Marcos 14:32 – 15:5

Aliyás del CR:

1.      14:32-42

2.      14:43-52

3.      14:53-65

4.      14:66-72

5.      15:1-5

VaYigash

Significa “y se acercó”.

Primera aliyá, 44:18-30

Yehudá se acerca a Yosef y le pide la palabra. Hace un recuento de la conversación que habían tenido anteriormente en cuanto a la situación familiar de ellos. Yosef había ordenado que trajeran a Binyamín como condición para que pudieran volver a ver su rostro. Al subir a su padre le cuentan todo esto y por la necesidad de alimentos el padre acepta que el segundo hijo, que le queda de su mujer, se vaya con ellos. Pero si algo malo le sucede al hijo él morirá con dolor. Yehudá promete no volver a su padre sin el hermano.

Segunda aliyá, 44:31 – 45:7

Si Yehudá, que se hizo responsable, si no devuelve el muchacho a su padre, morirá con pena. Yehudá se ofrece como esclavo en lugar del joven para que él pueda subir con los hermanos. Yehudá no podría ver el mal que sobrevendría al padre si el muchacho no está con él.

Se establece una lucha entre Yosef y Yehuda  por Benyamin

En ese momento Yosef no puede contenerse y manda salir a todos menos sus hermanos. Entonces se da a conocer a ellos con lloros tan fuertes que lo oyen los  mitsries. “Yo soy Yosef”, les dice. Pero ellos no le pueden contestar por el choque emocional. Yosef les dice que no se entristezcan por haberle vendido porque todo era plan de Eloha para salvar vidas. Ahora han habido dos años de hambre. Todavía quedan cinco años sin poder sembrar y cosechar. “Eloha me envió delante de vosotros para preservaros un remanente en la tierra, y para guardaros con vida mediante una gran liberación”.

Tercera aliyá, 45:8-18

Yosef sigue hablando ánimo a sus hermanos diciendo que Eloha fue el que le envió allí. Eloha le ha puesto por padre de Paró, señor de toda su casa y gobernador sobre toda la tierra de Mitsrayim. Ahora tendrán que subir rápidamente a su padre y decirle que Yosef es señor de todo Mitsrayim y que baje allí sin demorar. Habrá lugar en la tierra de Goshen para todos, incluso el ganado. Yosef proveerá para ellos porque todavía quedan cinco años de hambre. Después se echa sobre el cuello de su hermano Binyamín y los dos lloran. También besa a todos sus hermanos y llora sobre ellos. Luego hablan.

Cuando la noticia de la llegada de los hermanos de Yosef llega a la casa de Paró, le agrada al Paró y a sus siervos. El dice a Yosef que los hermanos carguen las bestias para ir a la tierra de Kenáan para buscar al padre y a sus familias y volver. Así recibirán lo mejor de Mitsrayim.

Cuarta aliyá, 45:19-27

Paró ordena que lleven carretas para traer a sus niños, sus mujeres y al padre. Lo mejor de Mitsrayim será de ellos. Así los hijos de Israel lo hacen y Yosef les da provisiones para el camino y mudas de ropa. Binyamín recibe trescientas piezas de plata y cinco mudas de ropa. Envían diez asnos cargados de bienes y diez asnas cargadas de grano y alimentos para el padre en el camino. Yosef despide a sus hermanos diciendo: “No riñáis en el camino”. Así suben de Mitsrayim y llegan a su padre Yaakov. Cuando le informan que Yosef todavía vive y que es gobernante en toda la tierra de Mitsrayim, no los puede creer. Pero cuando cuentan todas las cosas que Yosef les ha dicho y cuando ve las carretas que Yosef ha enviado, su espíritu revive.

Quinta aliyá, 45:28 – 46:27

Israel decide ir a ver a Yosef antes de su muerte. Así parte con todo lo que tiene y llega a Beer-Sheva. Allí ofrece sacrificios al Eloha de su padre Yitsjak. En una visión nocturna Eloha le visita y le dice que no tenga temor para bajar a Mitsrayim porque allí le hará una gran nación. Además promete descender con él y luego hacerle subir otra vez. Yosef cerrará sus ojos.

Yaakov parte de Beer-Sheva. Sus hijos le llevan junto con sus niños y mujeres en las carretas. También llevan consigo todo su ganado y sus bienes y llegan a Mitsrayim. Reuvén tiene cuatro hijos. Shimón tiene seis hijos. Leví tiene tres hijos. A Yehudá le quedan tres hijos de los cinco. Tiene también dos nietos. Yisajar tiene cuatro hijos. Zvulún tiene tres hijos. También está Diná. Los hijos e hijas de Leá son 33 en total.

Gad tiene siete hijos. Asher tiene cuatro hijos, una hija y dos nietos. Los hijos e hijas de Zilpá son 16 en total.

Yosef tiene dos hijos con Osnat. Binyamín tiene diez hijos. Los hijos de Rajel son 14 en total.

Dan tiene dos hijos. Naftalí tiene cuatro hijos. Los hijos de Bilhá son siete en total.

Sin incluir las esposas de los hijos de Yaakov, en total bajan 66 personas de Yaakov a Mitsrayim.

Yosef tiene dos hijos que nacieron en Mitsrayim. Todas las almas de la casa de Yaakov que han bajado a Mitsrayim son 70. 

Sexta aliyá, 46:28 – 47:10

Yaakov envía a Yehudá delante de sí para indicar el camino a Goshen. Yosef sale con su carro para ir al encuentro con su padre en Goshen. Cuando le ve se echa sobre su cuello y llora largamente. Israel dice que ahora puede morir, después de haber visto su rostro. Yosef dice que tiene que avisar a Paró que han venido sus hermanos y la familia de su padre y que son pastores de ovejas y vaqueros. Los hermanos de Yosef deben informar al Paró que su profesión es de ganado desde hace generaciones. Así podrán vivir en la tierra de Goshen, porque los pastores de ovejas son abominación para los mitsries.

Yosef le informa al Paró sobre todo esto y le presenta cinco de sus hermanos. El les pregunta sobre su ocupación y le contestan que son pastores de ovejas y que han venido para residir en la tierra porque no hay pastos en la tierra de Kenáan. Piden permiso para habitar en la tierra de Goshen. Paró habla con Yosef y le dice que la tierra está a su disposición y que pueden habitar en la mejor parte, la tierra de Goshen. Si hay algunos capaces de los hermanos podrán estar a cargo del ganado del Paró. Yosef trae a su padre para presentarle ante Paró y Yaakov lo bendice. Paró le pregunta cuántos años tiene y él contesta que sus años de peregrinación han sido 130 años malos. No han llegado a los años de sus padres. Yaakov vuelve a bendecir a Paró y sale de su presencia.

Séptima aliyá, 47:11-27

Yosef instala a su padre y sus hermanos en la tierra de Ramsés, como el Paró ha mandado. Los sustenta a todos con alimento según la cantidad de sus hijos. El hambre es muy severa en Mitsrayim y en Kenáan. A cambio de grano, Yosef recoge para la casa de Paró todo el dinero que hay en Mitsrayim y en la tierra de Kenáan. Cuando ya no tienen dinero Yosef les da pan a cambio de todo su ganado. El siguiente año el pueblo ofrece sus cuerpos y sus tierras a cambio de pan. Entonces Yosef compra toda la tierra de Mitsrayim para Paró y toda la gente es trasladada a las ciudades. Pero la tierra de los sacerdotes no es comprada porque tienen ración de parte del Paró. Yosef luego da semilla al pueblo, que ya ha sido comprado para Paró, para que siembren la tierra. La quinta parte de la cosecha será para Paró y el resto será para sembrar y comer. El pueblo agradece que Yosef los haya salvado la vida y acepta la orden. A partir de ese momento rige la ley en Mitsrayim que dice que la quinta parte de la producción de la tierra será para el Paró. Sólo la tierra de los sacerdotes no llega a ser posesión del Paró.

Israel se establece en la tierra de Goshen y obtienen propiedades y se multiplican en gran manera.

Comentarios  y analicis

La segunda Aliya nos permite una ves  mas  pensar en lo que realmente pudo pasar en momento tan tenso.

Yehuda debe  regresar con su hermano menor  a casa. Yosef dice que Benyamin se queda como esclavo  y que los demás pueden regresar a su lugar de origen.

El midrash dice:

LA DISCUSIÓN ENTRE YEHUDAH Y YOSEF

Yosef tomó a su hermano Biniamin y dijo - Déjalo aquí como esclavo mío y tú puedes regresar a la casa de tu padre en paz.

Sin embargo, Yehudah respondió - ¿Crees tú que habrá paz en la casa de nuestro padre si regresamos sin Biniamin?  Se acercó a Yosef, preparado para recuperar a Biniamin por tres métodos diferentes. Rezaría a El ETERNO para pedir ayuda, apaciguaría a Yosef si este método resultara más efectivo y hasta recurriría a una guerra abierta .

A esta altura Yehudah estaba dispuesto a renunciar a su propia vida por Biníamin y pensó: “Quizás mi abnegación nos redimirá por haber engañado a mi padre cuando vendimos a Yosef” .

Yehudah profirió un grito de enojo aterrorizante que repercutió y fue escuchado a una distancia de cuatrocientas parsa (1.600 Km. aprox.) Jushim, el hijo de Dan, sintió en Eretz Canaan que su tío estaba angustiado. Corrió a Egipto para ayudar a Yehudah. La tierra se contrajo milagrosamente y llegó a Egipto de inmediato. Ahora, Yehudah y Jushim aullaron juntos como un león y una hiena.

Cuando los hermanos vieron la furia que tenía Yehuda, también estallaron y patearon el piso con sus pies, levantando montículos de tierra.

En cuanto Yosef vio que había despertado la furia de Yehudah, se asustó. - ¡Ay!- pensó - me matará.

¿Cuáles eran los signos de la furia de Yehudah?

Algunos dicen que de sus ojos caían gotas de sangre. Otros dicen que el pelo sobre su corazón se endureció y perforó cinco capas de vestimentas. Se ponía barras de hierro en su boca y las trituraba hasta convertirlas en polvo con sus dientes.

Yehudah tomó una piedra que pesaba cuatrocientos shekel. Con toda su fuerza, la arrojó al cielo con su mano derecha y la atrapó con la izquierda. Luego la desintegró con sus pies.

Yosef, temeroso de ser asesinado, procedió a demostrar a Yehudah su fortaleza. Pateó la columna de marmol que formaba la base de su trono, convirtiéndola en escombros desechos.

Yehudah quiso desenvainar la espada pero no podía sacarla de su vaina. - Este hombre debe ser un tzadik-observó. - Por eso El ETERNO está de su parte.

Cambió sus tácticas y comenzó a pronunciar palabras conciliadoras, implorandole a Yosef para que libere a Biniamin. - Por favor, amo mío- comenzó a decir - quiero formularte una pregunta. Te ofrecí que todos nosotros seamos tus esclavos. ¿Por qué renunciaste a ello y únicamente pediste por Biniamin? Si necesitas un esclavo mayor, es preferible Reuben porque es mayor que Biníamin. Si necesitas un hombre fúerte, yo soy más fuerte que Biníamin.  ¿Por qué estás más interesado en Bíníamin que en los demás hermanos? Sospecho que tus motivaciones son deshonrosas.

Quiero que sepas que Biniamín es inocente. Nos acusaste en falso. La primera vez volviste a colocar nuestro dinero en nuestras bolsas y ahora escondiste tu copa de plata en la bolsa de Biniamini” No creas que tu maldad quedará sin castigo. Deja que las palabras de tu sirviente entren en tus oídos y escucha atentamente. ¿Sabes que la abuela de Biniamín  fue detenida una noche por el Faraón y como consecuencia, el rey y su corte fueron

asolados por una plaga? Cuidate si no quieres que te ocurra lo mismo a ti. ¿Sabes que la madre de Biniamin murió porque su padre pronunció una maldición? Una sola maldiciónde su padre y tú también morirás. ¿Sabes que dos de nosotros destruimos la gran ciudad de Sh’jem? Lo hicimos por una joven. Sin lugar a dudas haríamos lo mismo por Biniamin, quien es llamado ‘el amado de Eloha.

Acaso no alegaste que eras temeroso de Eloh? No eres temeroso de Eloha  e eres como el Faraón. Así como él Faraón promulga leyes perversas, así tú inventas reglamentaciones injustas.  Si Biníamin robó tu copa de plata, ¿con qué derecho puedes retenerlo como esclavo? Si te ajustas a nuestra ley que es la ley de la Torá, entonces deberá pagarte el doble, pues la Torá nos enseña que un ladrón debe reembolsar el doble del valor de la mercadería robada. Por la ley egipcia, puedes quitarle al ladrón cualquier cosa que posea. Sin embargo, tu reclamo que Biniamin sea tu esclavo no se ajusta a ninguna de estas leyes.

Mientras Yehuda presentaba a Yosef sus argumentos lógicos y bien fundamentados,1 los hermanos permanecieron parados en silencio. No interferieron para nada. Se enfrentaron dos pares, Yosef, el rey egipcio y Yehudah, el rey entre los hermanos  Los hermanos decidieron - Dejemos que los dos reyes combatan. No nos metamos en sus asuntos. Por lo tanto, ninguno de los hermanos, ni siquiera el mayor, Reuben, interrumpió las palabras de Yehudah.

 

Yehudah es comparado con un león y Yosef con un buey. Solo el león es capaz de atacar el buey.

Dirigiéndose a sus hermanos, Yehudah amenazó - Si yo desenvaino mi espada, comenzaré con el virrey y terminaré con el Faraón. Pensó que Yosef no comprendió estas palabras porque el intérprete no estaba cerca.

A Yosef le dijo - Mi amo preguntó a sus sirvientes: ‘¿Tienen padre o hermano?’ ¿Qué asuntos te llevan a preguntar acerca de nuestro hermano? Miles de personas han venido para comprar cereales y tú no interrogaste a ninguno. ¿Acaso vinimos aquí a casarnos con tu hija, que preguntas sobre nuestra familia? ¿O quieres casarte con nuestra hermana? Sin embargo, nosotros fuimos corteses y no ocultamos nada de ti. Te respondimos que tenemos un padre anciano y un hermano joven, el último de los varones, cuyo hermano murió y él quedo solo, privado de su madre y que su padre lo ama.

 

¿Por qué dijo Yehudah que Yosef había muerto?

Yehudah temía que si mencionaba la existencia de otro hermano perdido, el mandatario diría - Tráiganlo también.

Yehudah continuó diciendo - Y tú dijiste a tus sirvientes: ‘Tráiganlo para que lo vea’. Nosotros pensamos que eras un rey que cumple con su palabra, pero ahora dices: ‘Será mi esclavo’. ¿Así es cómo lo quieres ver?

Luego le dijimos a mi amo - El joven no puede abandonar a su padre, no está acostumbrado a viajar  quizás muera en el camino así como su madre murió durante un viaje.  Pero tú dijiste a tus sirvientes - Si vuestro hermano menor no viene con ustedes, no vuelvan a aparecer ante mi. Regresamos a tu sirviente, nuestro padre y le transmitimos tus palabras, Yosef escuchó en silencio que Iaakov era considerado su sirviente y no protestó por el honor de su padre. Como castigo, murió antes que sus hermanos.

- Tu sirviente, nuestro padre, no quiso enviar al menor y dijo: Ustedes saben que mi esposa dio a luz a dos varones. Uno partió y seguramente fue muerto y no lo he vuelto a ver. Si me quitan a éste también, una desgracia sobrevendrá y a mi edad la tristeza me llevará a la tumba. Mientras que Bíniamin está cerca mío, me consuelo por la muerte de su madre y hermano, pero si él muere, me parecerá como silos tres murieran el mismo día.

 

Si regreso con tu sirviente, mi padre, sin el joven, seguramente morirá y tus sirvientes llevarán la vejez de tu sirviente, nuestro padre, a la tumba por las penas.

Mientras Yosef escuchaba a Yehudah hablar de la pena de su padre, apenas se pudo contener y tuvo que sentarse.

- No dejas de hablar- le dijo a Yehudah. - ¿Por que actúas como el vocero único de tus hermanos mientras ninguno de ellos pronuncia una palabra.

- Tu sirviente se ha comprometido por el joven- contestó Yehuda. Le dije a mi padre - Si no regreso con él, perderé mí parte en ambos mundos. ¿Cómo puedo regresar con mí padre sin mi hermano?

Yosef respondió - Tu otro hermano no era un ladrón, ni te hizo daño, sin embargo, le dijiste a tu padre: ‘Fue despedazado por un animal’. En este caso, con certeza puedes informar a tu padre acerca de tu hermano que es un ladrón y actuó mal. ‘Fue devorado’. Dile: ‘La soga va con el balde ¿Por qué no consideraste la pena de tu padre cuando vendiste tu otro hermano por veinte piezas de plata?

Cuando Yehudah escuchó esto comenzó a gritar y llorar, exclamando - ¿Cómo puedo regresar con mi padre cuando el chico no me acompaña? Inventaste una acusación tras otra contra nosotros, primero nos acusastes de espías, luego dijiste que vinimos a descubrir los puntos débiles del país, mas tarde que robamos tu copa de plata. Cada vez que alegamos ser inocentes, hacemos una promesa por la vida de mi padre, el hombre justo, y cada vez que tú retribuyes la promesa y nos acusas de culpables, lo haces por la vida del malvado Faraón. ¿Cual de las promesas es superior?

Yo solo tengo que desenvainar mi espada para llenar Egipto con cuerpos muertos.

Yosef respondió - Si desenvainas tu espada, te la ataré a tu propio cuello.

- Abriré mi boca tanto que te tragaré.

- Taparé tu boca con una piedra.

- ¿Pero, qué diremos a nuestro padre?

- Díganle, ‘La soga sigue al balde- Pero tu acusación es falsa. ¿Y la vuestra cuandovendieron a su hermano  no lo era?

- El fuego de Sh’jem arde en mi corazón. Por Biniamin haremos lo mismo que hicimos por Dina.

- Extinguiré el fuego en tu corazón recordándote la historia de Tamar.

 

- Teñiré de sangre los mercados de Egipto.

- Ustedes son tintoreros de profesión. ¿Acaso no tiñeron una prenda con sangre y se la presentaron a su padre?

La furia de Yehudah llegó a su clímax y estaba dispuesto a matar o ser muerto. Le dijo a Naftalí, quien era tan rápido como un cervatillo - Corre y cuenta el número de distritos que tiene Egipto.

Naftali regresó e informó - Conté doce secciones.

- Bien- dijo Yehudah. - Aniquilaré tres de ellas y cada uno de ustedes se hará responsable por una. Así nos aseguraremos que ninguna persona quedará con vida en todo Egipto.

Yosef de inmediato despachó un mensaje al Faraón solicitándole que envíe a trescientos soldados para prevenir que los hermanos destruyeran el país. Cuando los soldados llegaron, Yehudah gritó tan fuertemente que los príncipes en el palacio del Faraón se desplomaron, los animales en los alrededores abortaron, Yosef se cayó de su trono y el Faraón también. Los trescientos soldados perdieron su dentadura y escaparon atolondrados para nunca regresar.

Yosef sabía que no podría esperar más para revelarse ante sus hermanos o destruirían todo Egipto.

 

YOSEF REVELA SU IDENTIDAD A SUS HERMANOS

Yosef pidió a todos los egipcios que se retiraran del recinto y así puso su vida en manos de sus hermanos. No quiso avergonzarlos en público al revelar delante de los egipcios que el era Yosef, el hermano perdido que habían vendido.

Les dijo - Este hermano que ustedes dicen que murió, ¿realmente murió?

- Sí, seguro- contestaron.

- Son mentirosos. Lo vendieron. Yo lo compré como esclavo y lo llamaré.

Yosef llamó - Yosef ben Iaakov, Yosef ben laakov.

Los hermanos miraron en todas direcciones, pero nadie apareció.

¿Dónde miran?- preguntó Yosef. - Yo soy Yosef, vuestro hermano. Susurró (sabiendo que los egipcios estaban escuchando afuera), a quien vendieron a Egipto. ¿Vive aún mi padre?

Avergonzados, los hermanos no pudieron responder.

¡Pobre de nosotros en el día del juicio y pobre de nosotros en el día de la condena! Yosef era el más joven de las tribus, pero cuando dijo, ‘YO SOY YOSEF’ los hermanos se sintieron muy humillados por haber actuado equivocadamente. Cuando El ETERNO Se revele a cada uno de nosotros y anuncie ‘YO SOY EL ETERNO’ seguramente no podremos  responder y estaremos profundamente avergonzados de nuestros actos.

 

Una persona siempre piensa que no importa como actúa, siempre está en lo correcto porque el Ietzer hara le hace racionalizar su curso de acción. El dia del juicio, El ETERNO probará fehacientemente a cada persona la gravedad de su pecado.

 

Los hermanos no pudieron responder a Yosef, si bien encontraron muchos ‘heterim’ por haberlo vendido y hasta lo consideraron una mitzva. Pero ahora la verdad era evidente*

Yosef notó que los hermanos se retiraban. Por ello los llamó con  palabras tiernas - Acérquense y cerciórense que yo soy Yosef. Dijo -

 

Actuaré en forma fraternal con ustedes a pesar que me vendieron a Egipto. Y ahora, no se apenen de haberme vendido y no se enojen que soy un mandatario,  porque fue El ETERNO quien me puso aquí y no ustedes. La razón por la cual El ETERNO me hizo rey no es porque soy más importante que ustedes, sino para cumplir con mi sueño y conducirnos a todos  eventualmente a Egipto. Este es el segundo año de hambre y por otros cinco años no habrá ni siembra ni cosecha. Ni siquiera florecerá la vegetación salvaje y por ello El ETERNO me envió aquí para alimentarlos a ustedes y mantenerlos con vida. ¡Apúrense! Avisen a mi padre ‘Así dice tu hijo Yosef’ El ETERNO me hizo gobernador de todo Egipto. Regresen sin demorar. Vivirán cerca mio en la tierra de Goshen con sus familias y ganado, no en la capital. Los alimentaré aquí porque todavia faltan cinco años de hambruna.

Yosef se dio cuenta que sus hermanos no salían del asombro, por eso los apaciguó con palabras más convincentes. - Ven que soy realmente Yosef porque les hablo en lashon hakodesh9 dijo. - No siento rencor por ustedes al igual que no abrigo ninguna hostilidad contra Biniamin quien no participó de mi venta. Cuenten a mi padre de mi gloria en Egipto y apúrense para traerlo.

Yosef se arrojó al cuello de Biniamin. El ruaj hakodesh se apostó sobre ellos y lloraron. Yosef presagió profeticamente que los dos Batei Mikdash, construidos en la porción de Biniamin serían devastados y Biniamin lloró al presagiar que el Mishkan de Shilo, a ser construido en la de Yosef, sería destruido.

Yosef notó que aun después de pronunciar sus últimas palabras, los hermanos seguían avergonzados. Besó a sus hermanos y lloró con ellos para reconfortarlos. Cuando los hermanos se dieron cuenta que estaba llorando y que era amigable con ellos, comenzaron a hablar con Yosef.

El Faraón se enteró que los hermanos de Yosef habían llegado y que Yosef descendía de la familia de Abraham quien fue un famoso príncipe de Eloha . Estaba feliz de saber que el virrey egipcio no era un esclavo de nacimiento sino de ascendencia noble. Algunos de los ministros del Faraón estaban satisfechos de las noticias, pero otros no eran muy felices al razonar: ‘Fuimos degradados de nuestros altos cargos porque un miembro de esta familia  fue designado para que nos dirija, ahora que arribaron diez, todos se convertirán en jerarcas por encima nuestro.

El Faraón temió que Yosef quisiera partir de Egipto para regresar con su padre. Por ello decidió que era mejor invitar a Iaakov a Egipto.

Le ordenó a Yosef - Dile a tus hermanos que carguen sus mulas con cereal  y regresen a casa. Permíteles traer a tu padre y sus familias a Egipto y se asentarán en la tierra de Goshen. La mejor tierra de Egipto será vuestra.

 

Este trágico momento llego a convertirse en un regocijo en amor para continuar en los planes Divinos.

 

Reflección mesiánica

44:32 “Porque yo, tu siervo, me hice responsable del muchacho con mi padre, diciendo: "Si no te lo traigo, que lleve yo la culpa delante de mi padre para siempre."” – Yehudá se puso como fiador, en hebreo Esto significa que estaba dispuesto a sufrir en lugar del hermano. Otra vez vemos como Yehudá, como ancestro del Mesías, de una manera profética expresa con su actitud lo que el Mesías iba a hacer en su primera venida. Estaba dispuesto a llevar la culpa para siempre para salvar a su hermano.

44:33 “Ahora pues, te ruego que quede este tu siervo como esclavo de mi señor, en lugar del muchacho, y que el muchacho suba con sus hermanos.” – Ser fiador implica llevar la responsabilidad hasta la última consecuencia. Yehudá fue fiel a su promesa a su padre. Ahora ha mostrado, no solamente arrepentimiento, sino que está dispuesto a hacer tikún, rectificación, por lo que hizo con su hermano Yosef. En lugar de entregar al hijo de Rajel, que su padre amaba, se puso en su lugar. Así Yosef supo que se había arrepentido. Si no hay una disposición de rectificar los errores cometidos y, en el caso de ser posible, restituir el daño, no ha habido arrepentimiento en la persona. Si hay arrepentimiento verdadero también hay un deseo de rectificación, como está escrito en Lucas 19:8-9:

“Y Zakai, puesto en pie, dijo al Señor: He aquí, Señor, la mitad de mis bienes daré a los pobres, y si en algo he defraudado a alguno, se lo restituiré cuadruplicado. Y Yeshúa le dijo: Hoy ha venido la salvación a esta casa, ya que él también es hijo de Avraham”

La salvación había venido a la casa de Zakai. Hubo evidencias claras del arrepentimiento de sus pecados. Lo mismo vemos en la vida de Yehudá. Ya no volverá a defraudar a su padre. Ya no dejará que su hermano sea esclavo en Mitsrayim. Lo hizo una vez, pero esta vez no, porque hay arrepentimiento en su corazón.

 

Cuando Yehudá muestra arrepentimiento por haber vendido a su hermano el hermano se da a conocer.

45:1  “Yosef no pudo ya contenerse delante de todos los que estaban junto a él, y exclamó: Haced salir a todos de mi lado. Y no había nadie con él cuando Yosef se dio a conocer a sus hermanos.” – Ya se había visto el arrepentimiento en Yehudá. Ya se había logrado el propósito del trato duro contra él. En ese momento Yosef ya no necesita tratarle más con dureza.

Ahora se da a conocer, pero no a los mitsries, sino a sus hermanos. De la misma manera el Mesías no fue manifestado al mundo después de su resurrección, sino a los que antes habían caminado con él, como está escrito en Hechos 10:40-41:

 “A éste Eloha le resucitó al tercer día e hizo que se manifestara, no a todo el pueblo, sino a los testigos que fueron escogidos de antemano por Eloha, es decir, a nosotros que comimos y bebimos con El después que resucitó de los muertos.”

La palabra hebrea traducida como “conocer” es “hitvadá”, y viene de la raíz “yadá” Esta palabra se usa en las Escrituras también como una referencia a tener relaciones íntimas, cf. Génesis 4:1, 17; 1 Reyes 1:4. En Génesis 45:4 Yosef les pide que se acerquen a él. Podría haber dicho solamente que se acercaran, pero la palabra “elai”, “hasta mí”, que ha sido añadida, implica un acercamiento casi palpable. La conclusión que hace Rashí de esto es que Yosef les enseñó su circuncisión.

Yosef no se dio a conocer hasta que los doce hermanos estuvieran juntos. Como hemos dicho antes, esto alude a que el Mesías no se va a dar a conocer en los últimos tiempos hasta que las doce tribus estén involucradas.

 

También aprendemos de esto que tiene que haber unidad entre hermanos para poder tener la revelación plena del Hijo de Yosef, como está escrito en Efesios 3:17b-19:

“que arraigados y cimentados en amor, seáis capaces de comprender con todos los santos cuál es la anchura, la longitud, la altura y la profundidad, y de conocer el amor del Mesías que sobrepasa el conocimiento, para que seáis llenos hasta la medida de toda la plenitud de Eloha.”

Como los hermanos de Yosef no le reconocieron en su primer encuentro, sino en el segundo, así el Mesías no fue reconocido por la mayoría de los judíos en su primera venida, pero lo será en relación con su segunda venida. Con otras palabras, ahora es el tiempo cuando la mayoría de los judíos conocerán a Yeshúa. Ahora él se está dando a conocer como el que verdaderamente es, aquél Mesías del cual hablan todas las Escrituras.

“Y no había nadie con él cuando Yosef se dio a conocer a sus hermanos.” – Había una intimidad con los hermanos. De la misma manera ahora el Mesías se está dando a conocer de una manera muy íntima a los que son descendientes de las doce tribus de Israel. Se va revelando de una manera hebrea, llamándolos de vuelta a sus raíces hebreas y dándoles a entender su relación con él no sólo de manera espiritual, sino también física. Son del mismo pueblo y ahora es el tiempo de ser restaurado como judío; o mejor como Israelita del pacto renovado. Las personas que reciben este tipo de revelación ya no son las mismas. Su concepto de sí mismos cambia radicalmente y el concepto de quién es Yeshúa cambia radicalmente. Ya no le ven en el contorno gentil, sino en el contorno hebreo. Ya no le ven como el salvador de los gentiles, sino como el salvador de Israel, en primer lugar.

Fue Yehudá quien provocó la revelación de Yosef. De la misma manera los judíos son los que finalmente harán que Yeshúa se manifieste en gloria, cf. Mateo 23:39; Hechos 3:19-21.

 

45:2  “Y lloró tan fuerte que lo oyeron los mitsries, y la casa de Paró se enteró de ello.” – En el momento de revelación de quién era Yosef hubo lloro, cf. verso 14-15. De la misma manera hay muchas emociones y lágrimas en aquellas personas que ahora están recibiendo la revelación de quién es realmente Yeshúa y quiénes son ellos en relación con él.

Yeshúa lloró sobre la ciudad de Yerushalayim, ver Lucas 19:41-44. Los habitantes de Yerushalayim llorarán cuando él se dé a conocer mostrando sus heridas, las señales del pacto renovado, como está escrito en Zacarías 12:10-14:

“Y derramaré sobre la casa de David y sobre los habitantes de Yerushalayim, el Espíritu de gracia y de súplica, y me mirarán a mí, a quien han traspasado. Y se lamentarán por El, como quien se lamenta por un hijo único, y llorarán por El, como se llora por un primogénito. Aquel día habrá gran lamentación en Yerushalayim, como la lamentación de Hadad-Rimón en la llanura de Meguido.

Y se lamentará la tierra, cada familia por su lado: la familia de la casa de David por su lado, y sus mujeres por su lado; la familia de la casa de Natán por su lado, y sus mujeres por su lado; la familia de la casa de Leví por su lado, y sus mujeres por su lado; la familia de los shimeítas por su lado, y sus mujeres por su lado; todas las demás familias, cada familia por su lado, y sus mujeres por su lado.”

 “lo oyeron los mitsries, y la casa de Paró se enteró de ello.” – Los mitsries, que simbolizan todos los gentiles, se darán cuenta de la revelación del Mesías de Israel y su gran lloro por sus hermanos judíos.

La casa de Paró hace referencia a los gobiernos de la tierra en los últimos tiempos que serán informados cuando el Hijo de Yosef se haya dado a conocer a sus hermanos israelitas.

45:3  “Yosef dijo a sus hermanos: Yo soy Yosef. ¿Vive todavía mi padre? Pero sus hermanos no podían contestarle porque estaban atónitos delante de él.” – Ahora Yosef habló en hebreo presentándose con su nombre hebreo. No dijo: “Yo soy Tsafnat-Paneaj”. De la misma manera, cuando el Hijo de Yosef se presentó al rabino Shaúl ben Gamliel en Hechos 9:5 no dijo: “Yo soy JS el cristo”, sino: “Yo soy Yeshúa”. Su nombre no es JS, sino Yeshúa. Cuando él habla con sus hermanos judíos les habla en hebreo, como está escrito en Hechos 26:14:

“Y después de que todos caímos al suelo, oí una voz que me decía en el idioma hebreo: "Shaúl, Shaúl, ¿por qué me persigues? Dura cosa te es dar coces contra el aguijón."”

45:4 “Y Yosef dijo a sus hermanos: Acercaos ahora a mí. Y ellos se acercaron, y él dijo: Yo soy vuestro hermano Yosef, a quien vosotros vendiste a Mitsrayim.” – De esto aprendemos que en los últimos tiempos el pueblo de Israel se acercará cada vez más a Yeshúa. Amen.

45:5  “Ahora pues, no os entristezcáis ni os pese el haberme vendido aquí; para preservar vidas me envió Eloha delante de vosotros.” – El Mesías fue enviado a los gentiles para salvar vidas, según está escrito en Hechos 28:28:

“Sabed, por tanto, que esta salvación de Eloha ha sido enviada a los gentiles. Ellos sí oirán.”

En Romanos 11:11 está escrito: “Digo entonces: ¿Acaso tropezaron (los judíos) para caer? ¡De ningún modo! Pero por su transgresión ha venido la salvación a los gentiles, para causarles celos.”

Ese era el plan del Eterno: por causa del rechazo de los judíos, de la misma manera como Yosef fue rechazado por sus hermanos, los gentiles podrán recibir al Hijo de Yosef y ser salvos.

Vale la pena aquí que hagamos una reflexión adicional; que hizo aquí Yosef con sus hermanos? Los perdono de verdad; aunque ellos no lo hubieran creído por completo. Pero vamos hacernos 5 preguntas y las contestamos a la par. Amen.

EL PERDÓN

1. Mateo 6:12 - ¿Cuál es la base para pedir el perdón de el Eterno nuestro Dios?

2. Mateo 6:14 - ¿Qué sucede cuando perdonamos a otros sus ofensas?

3. Mateo 18:21-22 - ¿Cuántas veces debemos perdonar a la persona que sigue ofendiéndonos?

4. Efesios 4:32 - ¿Por qué hemos de perdonar a otras personas aun cuando no merecen nuestro perdón?

5. Colosenses 3:13 - ¿Cuál es el mejor tiempo para practicar el perdón con otro?

Hermanos el Perdón no es un sentimiento; eso de yo no perdono sin sentirlo, o perdono pero no olvido, eso es una mentira mas. El perdón es un acto de obediencia al Eterno. Y aquí recordamos los temas que hemos venido hablando estos días, los cuales hacen y son un solo carácter moral y espiritual que el Judío Mesiánico; es decir el Israelita del pacto renovado manifiesta. 

En Galatas 5;22-23.

Hablábamos sobre La agrupación del fruto:

 

Fruto para con El Eterno/Dios.

Amor - amor es de Eloha/Dios.
Gozo
- regocijamos en el Señor
Paz/Shalom
- paz viene de aceptar la voluntad de Elohim.

 

Fruto para con nuestro prójimo

Paciencia - es de esperar a mi prójimo.
Benignidad
– es de ser bueno moralmente.
Bondad
- es de buscar el bien para mi prójimo.

 

Fruto para con uno mismo

Fe/Emuna - De ser constante y siempre bien
Mansedumbre - De no exaltarme
Templanza - De controlarme

 

Entonces hoy entendemos después de tanto que hablamos y disfrutamos compartiendo el fruto del Ruah Santo  Que todas las personas en la kehila son amadas y ya no hay caras largas, ni mucho menos inconformes consigo mismas, o disgustadas

sanidad de las naciones.

46:28 “Y envió a Yehudá delante de sí a Yosef, para indicar delante de él el camino a Goshen; y llegaron a la tierra de Goshen.” – La palabra hebrea que ha sido traducida como “camino a Goshen” es “goshna”. También se encuentra en el próximo versículo. Comprende cuatro letras hebreas, guimel (G), shin (Sh), nun (N) y hey (H). Es la única palabra en toda la Escritura que contiene estas cuatro letras. Son las mismas cuatro letras que se encuentran en el sevivon (perinola) que se usa en la diáspora para jugar durante Januká. Las cuatro letras que son usadas para Januká anuncian el gran milagro que ocurrió allí, en hebreo: “Nes Gadol Hayá Sham”, “Un milagro grande sucedió allí”. La suma del número de las cuatro letras es 358. Nun = 50, Guimel = 3, Hey = 5, Shin = 300. 50 + 3 + 5 + 300 = 358.

Es la misma suma que de las cuatro letras hebreas de Mashiaj, Mem (40) + Shin (300) + Yud (10) + Jet (8) = 358.

De esto aprendemos que el gran milagro que ocurrió en Januká, no solamente fue la victoria del judaísmo del Eterno sobre el paganismo, o el posible milagro del aceite, sino también el momento de la concepción sobrenatural de Miryam, la madre de Yeshúa, que ocurrió durante la luna nueva en Januká. Según algunos  cálculos, fue en la luna nueva del décimo mes de Tevet, para luego nacer 38 semanas más tarde, el día 15 del séptimo mes de Tishrí, aprox entre septiembre y octubre (en  Sukot).

47:14 “Y Yosef recogió todo el dinero que había en la tierra de Mitsrayim y en la tierra de Kenáan a cambio del grano que le compraban, y Yosef trajo el dinero a la casa de Paró.” – El propósito de recoger todo ese dinero fue que pasara a los hijos de Israel en el futuro, porque necesitaban mucho oro, plata, bronce y piedras preciosas para poder hacer el mishkán, tabernáculo, en el desierto, como está escrito en Éxodo 12:36:

“Y el Eterno hizo que el pueblo se ganara el favor de los mitsries, que les concedieron lo que pedían. Así despojaron a los mitsries.”

47:20 “Así compró Yosef toda la tierra de Mitsrayim para Paró, pues los mitsries vendieron cada uno su campo, porque el hambre era severa sobre ellos; y la tierra vino a ser de Paró.” – De la misma manera Mashiaj compró toda la tierra para el Padre celestial cuando se entregó a sí mismo para que el mundo pudiera vivir.

47:25 “Y ellos dijeron: Nos has salvado la vida. Hallemos gracia ante los ojos de Paró mi señor, y seremos siervos de Paró.” – Yosef salvó la vida de los mitsries. De la misma manera Yeshúa ha preparado una salvación para todas las personas de la tierra durante todas las épocas de la historia, como está escrito en 1 Juan 2:2:

“El mismo es la propiciación por nuestros pecados, y no sólo por los nuestros, sino también por los del mundo entero.”

En 2 Corintios 5:19- 21 está escrito:

“A saber, que Eloha estaba en el Mesías reconciliando al mundo consigo mismo, no tomando en cuenta a los hombres sus transgresiones, y nos ha encomendado a nosotros la palabra de la reconciliación. Por tanto, somos embajadores del Mesías, como si Eloha rogara por medio de nosotros; en nombre del Mesías os rogamos: ¡Reconciliaos con Eloha! Al que no conoció pecado, le hizo pecado por nosotros, para que fuéramos hechos justicia de Eloha en El.”

La gratitud de los mitsries por haber sido salvados les llegó a entregarse voluntariamente como siervos al rey. De la misma manera el Eterno espera que nosotros le entreguemos toda nuestra vida en gratitud por lo que el Mesías ha hecho por nosotros al salvar nuestras almas de la muerte eterna.

En Juan 17:9-10 está escrito:

 “Yo ruego por ellos; no ruego por el mundo, sino por los que me has dado; porque son tuyos; y todo lo mío es tuyo, y lo tuyo, mío; y he sido glorificado en ellos.”

Pidamos al Eterno nuestro padre que Seamos como Yosef, en su actitud perdonadora y sigamos a Yeshua como la Torah viva del Amor, que abarca el Fruto del Espiritu que es uno solo y el verdadero Ejad que tu y yo como Israelitas del Pacto renovado debemos reflejar 

viernes, 23 de diciembre de 2022

Parashá 10 MiKets

 

Parashá 10 MiKets/Génesis 41:1 – 44:17

           Para ser compartida en el Shabat del 30 de Keslev del 5.783 (Dic 24 de 2020) terminando este Shabat                         

                                   tendremos oración de Rosh Kodesh mes de Tevet

 

Aliyás de la Torá:

1.             41:1-14

2.             41:15-38

3.             41:39-52

4.             41:53 – 42:18

5.             42:19 – 43:15

6.             43:16-29

7.             43:30 – 44:17

Haftará: 1 Reyes 3:15 – 4:1

 

Brit Hadasha: Marcos 13:1 – 14:31

 

MiKets Significa “al final”, “al cabo”. (Al fin y al cabo)

 

Comentarios

 

Primera aliyá, 41:1-14

41:1a “Y aconteció que al final de dos años” – Yosef tuvo que estar en la cárcel durante 12 años en total. Esto alude a que el Mesías ben Yosef tenía que sufrir y morir por las 12 tribus de Israel.

Los dos años también hacen alusión a la resurrección del Mesías después de dos días, como está escrito en

 Oseas 6:2: “Nos dará vida después de dos días, al tercer día nos levantará y viviremos delante de Él

Los dos días hablan incluso del resurgimiento, no solamente del estado de Israel, después de casi dos mil años de no existir, sino del resurgimiento de las diez tribus perdidas de la casa de Yosef. Como Yosef fue sacado de la cárcel al final de dos años, así sus descendientes serán sacados de entre las naciones al final de dos mil años para volver a tomar su lugar dentro de Israel. ¿Cuantos lo creemos y decimos amen?

La palabra hebrea traducida como “al cabo de” es “mi-kets” y significa “al final”, “al cabo”. Esto nos enseña que los sueños de Paró están hablando no solamente de lo que pasó al final de los dos años más de cárcel que Yosef tuvo que sufrir, sino también de lo que va a pasar al final de los dos mil años de la era mesiánica.

La muerte del panadero y la restauración o resurrección del copero antes de los dos años hablan de la muerte y resurrección del Mesías antes de los dos mil años. Y como el copero se olvidó de Yosef durante dos años, así Yeshúa ha sido ignorado por gran parte del pueblo judío, y el resto del mundo, durante dos mil años.

Al final de los dos años Yosef es levantado para ser virrey, gobernante de toda la nación después del Paró. Esto nos enseña que Yeshúa ben Yosef será puesto como gobernante sobre todas las naciones de la tierra al final de dos mil años después de su muerte y resurrección.

La repetición de la palabra “despertó”, en hebreo “yakats”, en los versículos 4, 7 y 21, que se parece a “kets”, “final”, que está en el versículo 1, también nos muestra que los sueños del Paró traen un mensaje para los últimos tiempos. La repetición del relato de los sueños es también una indicación de que no se refiere solamente al tiempo de Yosef sino también al final de este siglo, en relación con la segunda venida y reinado del Mesías.

41:14 “Entonces Paró mandó llamar a Yosef, y lo sacaron aprisa del calabozo; y después de afeitarse y cambiarse sus vestidos, vino a Paró”

– La palabra hebrea que fue traducida como “calabozo” es “bor” y significa “hoyo”, “pozo”. Es la misma palabra que se encuentra en 37:24. Como ya hemos dicho antes, esto habla de la muerte del Mesías tanto por el pueblo de Israel como por el mundo gentil.

 

 

 

“lo sacaron” – Habla de la resurrección. El Mesías no salió de la muerte mediante su propia fuerza, fue resucitado por el Padre, como está escrito en Hechos 2:24:

“a quien Eloha resucitó, poniendo fin a la agonía de la muerte, puesto que no era posible que El quedara bajo el dominio de ella.

En Hechos 2:32 está escrito: “A este Yeshúa resucitó Eloha, de lo cual todos nosotros somos testigos.”

En Romanos 10:9 está escrito: “que si confiesas con tu boca a Yeshúa por Señor, y crees en tu corazón que Eloha le resucitó de entre los muertos, serás salvo.

Las traducciones Reina-Valera y La Biblia de Las Américas lamentablemente no han traducido el texto griego correctamente. En prácticamente todos los lugares donde habla de la resurrección se ha traducido como “resucitó” y no “fue resucitado” como realmente dice el texto griego en la mayoría de las veces. No es que Yeshúa se haya resucitado en sí mismo. No tenía poder para ello, sino el Padre fue el que le levantó de entre los muertos.

“a prisa” – La resurrección fue algo que pasó sumamente rápido, según Zacarías 3:2b donde está escrito:

“¿No es este un tizón arrebatado del fuego?”

“afeitarse” – Esto alude al yetser hará, la inclinación al mal, que fue eliminado por la resurrección del Mesías. El pecado entró en el mundo por medio de un acto físico, cuando el primer hombre tomó el fruto del árbol de la ciencia del bien y del mal. Por medio de la boca entró la semilla del mal en el cuerpo del hombre. Por esto, la sede del pecado está en el cuerpo humano.

Aunque el pecado haya afectado tanto al alma como al espíritu del hombre, el lugar donde el pecado habita en el hombre es el cuerpo.

 

Como está escrito en Romanos 7:17-23:

“Así que ya no soy yo el que lo hace, sino el pecado que habita en mí. Porque yo sé que en mí, es decir, en mi carne, no habita nada bueno; porque el querer está presente en mí, pero el hacer el bien, no. Pues no hago el bien que deseo, sino que el mal que no quiero, eso practico. Y si lo que no quiero hacer, eso hago, ya no soy yo el que lo hace, sino el pecado que habita en mí. Así que, queriendo yo hacer el bien, hallo la ley de que el mal está presente en mí. Porque en el hombre interior me deleito con la ley de Eloha, pero veo otra ley en los miembros de mi cuerpo que hace guerra contra la ley de mi mente, y me hace prisionero de la ley del pecado que está en mis miembros”. 

Romanos 6:6 dice: sabiendo esto, que nuestro viejo hombre fue colgado al madero con El, para que nuestro cuerpo de pecado fuera destruido, a fin de que ya no seamos esclavos del pecado

Y en Romanos 8:10 está escrito: “Y si el Mesías está en vosotros, aunque el cuerpo esté muerto a causa del pecado, sin embargo, el espíritu está vivo a causa de la justicia.”

Yeshúa tomó nuestros pecados, no en su alma ni en su espíritu, sino en su cuerpo, como está escrito en

1 Pedro 2:24: “y El mismo llevó nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero, a fin de que muramos a los pecados y vivamos a la justicia, porque por sus heridas fuisteis sanados.”

Así que el pecado estaba en la parte más externa del Mesías Yeshúa cuando murió. Hay varios ejemplos en las Escrituras que hablan de rasurarse el pelo para purificarse, los cuales aluden al momento de la purificación del Mesías del pecado nuestro que estaba en su cuerpo.

En Levítico 14:8 está escrito: “Luego el que ha de ser purificado lavará su ropa, se rasurará todo el cabello, se bañará en agua y quedará limpio. Después podrá entrar al campamento, pero por siete días permanecerá fuera de su tienda.”

En Números 8:7 está escrito: “Así harás con ellos para su purificación: rociarás sobre ellos agua purificadora, y que ellos hagan pasar una navaja sobre todo su cuerpo, laven sus ropas y quedarán purificados.”

 

“cambiar los vestidos” – Esto habla del momento cuando el viejo hombre fue eliminado, simbolizado en las ropas viejas sucias, y el nuevo hombre fue creado, mediante la muerte y resurrección del Mesías, como está escrito en Zacarías 3:3-4:

“Y Yehoshúa estaba vestido de ropas sucias, en pie delante del ángel. Y éste habló, y dijo a los que estaban delante de él: Quitadle las ropas sucias. Y a él le dijo: Mira, he quitado de ti tu iniquidad y te vestiré de ropas de gala.”

En Lucas 15:22 está escrito: “Pero el padre dijo a sus siervos: "Pronto; traed la mejor ropa y vestidlo, y poned un anillo en su mano y sandalias en los pies”

 

 

 

 

 

 

En 1 Corintios 15:42-54 está escrito: “Así es también la resurrección de los muertos. Se siembra un cuerpo corruptible (la vieja ropa), se resucita un cuerpo incorruptible (la nueva ropa); se siembra en deshonra, se resucita en gloria; se siembra en debilidad, se resucita en poder; se siembra un cuerpo natural, se resucita un cuerpo espiritual. Si hay un cuerpo natural, hay también un cuerpo espiritual. Así también está escrito: El primer HOMBRE, Adán, FUE HECHO ALMA VIVIENTE. El último Adán, espíritu que da vida. Sin embargo, el espiritual no es primero, sino el natural; luego el espiritual. El primer hombre es de la tierra, terrenal; el segundo hombre es del cielo. Como es el terrenal, así son también los que son terrenales; y como es el celestial, así son también los que son celestiales. Y tal como hemos traído la imagen del terrenal (la vieja ropa), traeremos también la imagen del celestial (la nueva ropa). Y esto digo, hermanos: que la carne y la sangre no pueden heredar el reino de Eloha; ni lo que se corrompe hereda lo incorruptible. He aquí, os digo un misterio: no todos dormiremos, pero todos seremos transformados en un momento, en un abrir y cerrar de ojos, a la trompeta final; pues la trompeta sonará y los muertos resucitarán incorruptibles, y nosotros seremos transformados. Porque es necesario que esto corruptible se vista de incorrupción, y esto mortal se vista de inmortalidad. Pero cuando esto corruptible se haya vestido de incorrupción, y esto mortal se haya vestido de inmortalidad, entonces se cumplirá la palabra que está escrita: DEVORADA HA SIDO LA MUERTE en victoria.”

 

En 2 Corintios 5:2-3 está escrito: “Pues, en verdad, en esta morada gemimos, anhelando ser vestidos con nuestra habitación celestial; y una vez vestidos, no seremos hallados desnudos. Porque asimismo, los que estamos en esta tienda, gemimos agobiados, pues no queremos ser desvestidos, sino vestidos, para que lo mortal sea absorbido por la vida.”

En Filipenses 3:20-21 está escrito: “Porque nuestra ciudadanía está en los cielos, de donde también ansiosamente esperamos a un Salvador, el Señor Yeshúa el Mesías, el cual transformará el cuerpo de nuestro estado de humillación en conformidad al cuerpo de su gloria, por el ejercicio del poder que tiene aun para sujetar todas las cosas a sí mismo.”

En Romanos 6:5-6 está escrito: “Porque si hemos sido unidos a El en la semejanza de su muerte, ciertamente lo seremos también en la semejanza de su resurrección, sabiendo esto, que nuestro viejo hombre fue crucificado con El , para que nuestro cuerpo de pecado fuera destruido, a fin de que ya no seamos esclavos del pecado

 

“vino al Paró” – De la misma manera el Mesías, después de haber sido resucitado, fue elevado hasta lo sumo y presentado ante el Padre celestial para servirle como sumo sacerdote según el orden de Malki-Tsedek, como está escrito en el Salmo 110:1 y 4:“Salmo de David. Dice el Eterno a mi Señor: Siéntate a mi diestra, hasta que ponga a tus enemigos por estrado de tus pies... El Eterno ha jurado y no se retractará: Tú eres sacerdote para siempre según el orden de Malki-Tsedek.

En 1 Pedro 3:22 está escrito: “quien está a la diestra de Eloha, habiendo subido al cielo después de que le habían sido sometidos ángeles, autoridades y potestades.”

En Filipenses 2:9 está escrito: “Por lo cual Eloha también le exaltó hasta lo sumo, y le confirió el Nombre que es sobre todo nombre”

 

Segunda aliyá, 41:15-38

41:25 “Entonces Yosef dijo a Paró: Los dos sueños de Paró son uno; Eloha ha anunciado a Paró lo que El va a hacer” – Durante la vida de Paró.

41:28 “Esto es lo que he dicho a Paró: Eloha ha mostrado a Paró lo que va a hacer” – en los últimos tiempos.

41:29-30 “He aquí, vienen siete años de gran abundancia en toda la tierra de Mitsrayim; y después de ellos vendrán siete años de hambre, y será olvidada toda la abundancia en la tierra de Mitsrayim; y el hambre asolará la tierra.” – Como los dos últimos años del cautiverio de Yosef fueron contados desde la muerte y reinstalación de los dos siervos del rey de Mitsrayim, los dos mil años finales de esta edad son contados a partir de la muerte y resurrección del Mesías. Al final de los dos mil años parece que habrá siete años de abundancia económica, posiblemente en todo el mundo, y luego vendrá siete años de tribulación. Los últimos siete años corresponden a la última de las 70 semanas de la profecía de Daniel 9:24-27.

 

 

 

 

 

 

 

Durante ese tiempo habrá persecución contra los que guardan los mandamientos de Eloha y tienen el testimonio de Yeshúa, como está escrito en Revelación 12:17:“Entonces el dragón se enfureció contra la mujer (Israel), y salió para hacer guerra contra el resto de la descendencia de ella, los que guardan los mandamientos de Eloha y tienen el testimonio de Yeshúa.”

Durante este tiempo habrá una gran hambre de la palabra del Eterno en la tierra de Israel, como está escrito en Amós 8:11-14:“He aquí, vienen días -declara Adonai - en que enviaré hambre sobre la tierra, no hambre de pan, ni sed de agua, sino de oír las palabras de El Eterno. Y vagarán de mar a mar, y del norte hasta el oriente; andarán de aquí para allá en busca de la palabra de Elohim, pero no la encontrarán. En aquel día las doncellas hermosas y los jóvenes desfallecerán de sed. Los que juran por el pecado de Shomron, y dicen: "Viva tu Dios, oh Dan", y "Viva el camino de Beer-Sheva", caerán y nunca más se levantarán.”

Vemos que los idólatras no van a encontrar la Palabra del Eterno porque no la buscan donde está, en Yerushalayim, sino en las religiones falsas del mundo. Pero sí, habrá un grupo inmensamente grande que sabrá dónde encontrar la Palabra del Eterno en ese tiempo, como está escrito en Zacarías 8:20-23:

“Así dice el Eterno de los ejércitos: "Y será que aun vendrán pueblos y habitantes de muchas ciudades; y los habitantes de una irán a otra, diciendo: 'Vamos sin demora a implorar el favor de Adonai, y a buscar a Elohim de los ejércitos. Yo también iré.' "Y vendrán muchos pueblos y naciones poderosas a buscar a El Eterno de los ejércitos en Yerushalayim y a implorar el favor de Adoani." Así dice El Elterno de los ejércitos: "En aquellos días diez hombres de todas las lenguas de las naciones asirán el vestido de un judío, diciendo: 'Iremos con vosotros, porque hemos oído que Eloha está con vosotros.'"”

- Aquí hay algunas cosas sumamente interesantes. Vemos que muchos pueblos y naciones poderosas van a buscar al Eterno en Yerushalayim “en aquellos días”, que es una referencia a los últimos tiempos. Luego habla de diez hombres de todas las lenguas de las naciones que van a asir del “vestido” de un judío y pedir ayuda espiritual.

Los diez hombres aluden a las diez tribus perdidas entre las naciones gentiles, que van a reaparecer en este tiempo. Ellos van a ir a aquellos judíos (MESIANICOS) que caminan con el Eterno, es decir a los judíos que siguen a Yeshúa, que es el camino.

 

Yoséf fue un hombre sensible a la voluntad del Eterno, demostrándolo al esperar a que el Eterno le diera su interpretación relativa a los sueños, y en esta parashá, la interpretación del sueño de faraón, le permite salir de la prisión y encumbrarse hasta llegar a ser un gran ministro en Egipto.

Vacas Flacas y Vacas Gordas


41:1 Y sucedió que al cabo de dos años cumplidos, aconteció que el Faraón tuvo un sueño; y he aquí que estaba junto al río.

Miketz............al cabo de........

Si solo supiéramos, como trabaja El Eterno........
Solamente, vemos el presente..........
Nunca nos dedicamos, a averiguar acerca del futuro........
Para muchos “creyentes”, El Eterno ya se murió.
Les parece, que Él se olvidó de nosotros.
Parece, que no leyeran pasajes como:

Tehilim / Sal. 121: 4 “No se adormecerá ni dormirá, el que guarda a Israel”

Nos amargamos, por los supuestos éxitos de otras religiones, sin tener en cuenta lo que pasará Miketz / al cabo de......


 

 

 

 

 

Retomemos los sueños del Paro/Faraon:


41:2 Y he aquí que subían del río (Nilo) siete vacas de hermoso aspecto y gruesas de carnes, y pastaban en el prado. 41:3 Mas he aquí otras siete vacas que subían de los ríos tras ellas, feas de aspecto y flacos de carne, y se pusieron junto a las primeras vacas a la orilla del río. 41:4 Y las vacas feas de aspecto y flacas de carne devoraron a las siete vacas de hermoso aspecto y gordas; y despertó el Faraón.

Todos conocemos, acerca de la historia que estamos estudiando esta semana.
Todos conocemos, acerca de los sueños de Faraón, y como se cumplieron, al pie de la letra.
Todo se cumplió, conforme a la interpretación de Yosef.
Hubo siete años de abundancia, que fueron simbolizados en el sueño por las vacas gordas.
Y hubo los siete años de escasez, simbolizados por las vacas flacas.
Pero, tenemos que tener en cuenta, algo muy importante:

En ese orden, ocurrió en Egipto.
Egipto, es símbolo del mundo que nos rodea.
Y El Eterno, trabaja con Israel, de una manera muy distinta, a cómo trabaja con el mundo.
Él quiere, que nosotros seamos distintos en todo:

Devarim / Deut. 14:2 “para que le seas un pueblo único sobre la faz de la tierra”.

El mundo en el cual vivimos, se está acercando a su época de vacas flacas. (A su propia autodestrucción)
Diariamente, son millones, las personas que mueren de hambre.
Estos años cuantos han fallecido por causa de ese virus invisible. Pero Hermanos sabemos que aunque existe un virus invisible creado por los hombres; que puede matar y asesinar. Tambien existe un Eloha Todopoderoso El Shadday, que cura y da sanidad. Amen.


Ahora Se preveé una escasez de agua.
La degradación moral, es cada vez mayor.
Cuando ese tiempo de vacas flacas llegue, el mundo buscará al Eterno.

Y donde lo buscará? ¿Y En donde Lo Buscara?   “En Israel.

Yojanán / Jn. 4:22 “La salvación viene de los judíos”

Porque Israel es un país, que al contrario del mundo entero, primero ha visto pasar sus épocas de vacas flacas, y ve aproximarse sus épocas de vacas gordas.
Recordemos un poco, nuestras épocas de vacas flacas:
- Año 70 e.c. – El imperio romano destruye el templo de Yerushalaim (Jerusalém).
- Nos expulsan de nuestra tierra. - Hasta le cambian el nombre a Israel, por Palestina.
- Desde ese momento, nos convertimos en “judíos errantes”. - Durante 1.878 años, estuvimos sin tierra.
- Fuimos perseguidos, por medio de las Cruzadas. - Fuimos perseguidos, por medio de la “santa” Inquisición.
- Fuimos expulsados, de todas partes donde íbamos.
- En la segunda guerra mundial, son asesinados seis millones de judíos, a mano de los nazis.

Si eso no son épocas de vacas flacas........entonces cuales serán?


 

 

 

 

 

Pero, en 1.948 comenzaron las épocas de las vacas gordas, para nosotros los judíos, para Israel.

- Después de 1.878 años, recuperamos nuestra tierra.
- Volvimos a ser nación, reconocidos por la Liga de las Naciones (antigua ONU).
- Renace Medinát Israel (Estado de Israel).
- En 1.948, el mismo día que renacemos como nación, nos atacan nuestros enemigos árabes, con sus ejércitos bien armados y organizados. No teníamos armamento, nuestros soldados no hablaban un mismo idioma, ya que todos venían de países distintos, además la mayoría venían enfermos, famélicos, recién escapados de los campos de concentración nazis. Sobre todos los pronósticos, salimos victoriosos, en la llamada “Guerra de la Independencia”:

Yrimyahu / Jer. 1: 19 “Y pelearán contra ti, pero no te vencerán; porque Yo estoy contigo, dice Yhvh, para librarte”

- En 1.967, nos vuelven a atacar, en proporción de 100 árabes por cada judío.

Y ante los ojos del mundo, en seis días, logramos derrotar a nuestros poderosos enemigos.
En esa fecha, Yerushalaim es controlada completamente por Israel, y vuelve a ser nuestra capital.

- En 1.973, de nuevo nos atacan, en nuestro día más sagrado, en Yom Kippúr, y luego de una feroz lucha, de nuevo salimos victoriosos.

- En un abrir y cerrar de ojos, el mundo ha visto, como un país desértico como el nuestro, se vuelve exportador de frutas. De todas partes del mundo nos visitan, para ver cómo es que cultivamos nuestros productos.

- En poco más de 70 años, Israel se ha convertido en una potencia mundial económicamente hablando, en tecnología y ciencias.

Si estas no son épocas de vacas gordas.....entonces que serán?

Y lo mejor, está por venir.

Eso lo aprendimos en esta semana, cuando estabamos celebrando la fiesta de Januka.

Todos sabemos, que la Menoráh – lámpara de siete brazos- nos representa a nosotros como pueblo.

Cuando en esta semana encendimos la Janukiya...........una luz el primer día.........dos en el segundo día.......y así sucesivamente, hasta tener mañana el ultimo día la lámpara completamente encendida.

A través de esto, El Eterno nos enseña, que Israel es un pueblo, que va de menos a más.
Que, primero pasa la época de las vacas flacas, y después la de las vacas gordas.

Miremos, el futuro que le espera a este mundo:

Yshayahu / Isa. 13:9 He aquí que el Día de Yhvh viene implacable, el arrebato, el ardor de su ira, a convertir la tierra en yermo y exterminar de ella a los pecadores. 10 Cuando las estrellas del cielo y la constelación de Orión no alumbren ya, esté oscurecido el sol en su salida y no brille la luz de la luna, 11 pasaré revista al orbe por su malicia y a los malvados por su culpa. Haré cesar la arrogancia de los insolentes, y la soberbia de los desmandados humillaré. 12 Haré que el hombre sea más escaso que el oro fino, y la humanidad más que metal de Ofir. 13 Por eso haré temblar los cielos, y se removerá la tierra de su sitio, en el arrebato de Yhvh Tzevaot, en el día de su ira hirviente.


 

 

En cambio, miremos el futuro de Israel:

Yshayahu / Isa. 43:1 Ahora, así dice Yhvh tu creador, Ya’akov, tu plasmador, Israel. «No temas, que yo te he rescatado, te he llamado por tu nombre. Tú eres mío. 2 Si pasas por las aguas, yo estoy contigo, si por los ríos, no te anegarán. Si andas por el fuego, no te quemarás, ni la llama prenderá en ti. 3 Porque yo soy Yhvh tu Elohim, el Santo de Israel, tu salvador. He puesto por expiación tuya a Egipto, a Kus y Seba en tu lugar 4 dado que eres precioso a mis ojos, eres estimado, y yo te amo. Pondré la humanidad en tu lugar, y los pueblos en pago de tu vida. 5 No temas, que yo estoy contigo; desde Oriente haré volver tu raza, y desde Poniente te reuniré. 6 Diré al Norte: “Dámelos”; y al Sur: “No los retengas”, Traeré a mis hijos de lejos, y a mis hijas de los confines de la tierra; 7 a todos los que se llamen por mi nombre, a los que para mí gloria creé, plasmé e hice.»

Pero, tenemos un trabajo por hacer, para que las épocas de las vacas flacas que se le avecinan a este mundo, no sean tan duras para ellos:

8 Haced salir al pueblo ciego, aunque tiene ojos, y sordo, aunque tiene orejas. (Los gentiles) 9 Congréguense todas las gentes (los gentiles) y reúnanse los pueblos. ¿Quién de entre ellos anuncia eso, y desde antiguo nos lo hace oír? Aduzcan sus testigos, y que se justifiquen; que se oiga para que se pueda decir: «Es verdad.» (Que al fin sepan los pueblos del mundo que El Elohim de Israel es Verdad).

Ese es el trabajo, que El Eterno nos dejó:

10 Vosotros sois mis testigos - oráculo de Yhvh - y mi siervo a quien elegí, para que me conozcáis y me creáis a mí mismo, y entendáis que yo soy: Antes de mí no fue formado otro Elohim, ni después de mí lo habrá. 11 Yo, yo soy Yhvh, y fuera de mí no hay salvador. 12 Yo lo he anunciado, he salvado y lo he hecho saber, y no hay entre vosotros ningún extraño. Vosotros sois mis testigos - oráculo de Yhvh - y yo soy Elohim; 13 yo lo soy desde siempre, y no hay quien libre de mi mano. Yo lo tracé, y ¿quién lo revocará?

Por eso, cuando todo se cumpla:

Yshayahu / Isa. 12:1 Y dirás aquel día: «Yo te alabo, Yhvh, pues aunque te airaste contra mí, se ha calmado tu ira y me has compadecido. 2 He aquí a Yhvh mi Salvador: estoy seguro y sin miedo, pues Yhvh es mi fuerza y mi canción, Él es mi salvación,» 3 Sacaréis agua con gozo de los hontanares de salvación.» 4 y diréis aquel día: «Dad gracias a Yhvh, aclamad su nombre, divulgad entre los pueblos sus hazañas, pregonad que es sublime Su nombre. 5 Cantad a Yhvh, porque ha hecho algo sublime, que es digno de saberse en toda la tierra. 6 Dad gritos de gozo y de júbilo, moradores de Sión, que grande es en medio de ti el Santo de Israel.»

Quedó claro?

El Eterno, todo lo tiene bajo Su control.
Sus planes, son perfectos.
Él, prepara a Israel.

Ese país, que ha pasado por las épocas de las vacas flacas, pero que por la misericordia de El Eterno, ya está en la época de las vacas gordas.

Ese país, del cual hace parte Yerushalaim.
Donde está el Monte de los Olivos, donde la Torah Viva vendrá nuevamente, en la persona de Yeshúa HaMashíaj.

Por eso, les decímos:  “Lo mejor está por venir.”


 

 

 

Miremos, lo que nos espera en la Nueva Yerushalaim:

Revelación / Apo. 21:
21 Y las doce puertas son doce perlas, cada una de las puertas hecha de una sola perla; y la plaza de la ciudad es de oro puro, trasparente como el cristal. 22 Pero no vi Santuario alguno en ella; porque Yhvh, el Elohim Todopoderoso, y el Cordero, es su Santuario. 23 La ciudad no necesita ni de sol ni de luna que la alumbren, porque la ilumina la gloria de Yhvh, y su lámpara es el Cordero. 24 = Las naciones caminarán a su luz, = y los reyes de la tierra irán a llevarle su esplendor. 25 = Sus puertas no se cerrarán con el día = - porque allí no habrá noche - 26 = y traerán a ella el esplendor y los = tesoros = de las naciones. = 27 Nada profano entrará en ella, ni los que cometen abominación y mentira, sino solamente los inscritos en el libro de la vida del Cordero.

Queremos más?

Tercera aliyá, 41:39-52

 41:40 “Tú estarás sobre mi casa, y todo mi pueblo obedecerá tus órdenes; solamente en el trono yo seré mayor que tú.” – Esta es una ilustración clara en cuanto a la relación entre el Hijo y el Padre celestial. El Padre le ha dado autoridad para gobernar su casa, pero es una autoridad delegada, no suplantada. El Padre sigue siendo el mayor, como está escrito en Juan 14:28b: “el Padre es mayor que yo”

En 1 Corintios 15:27-28 está escrito: “Porque ELOHA HA PUESTO TODO EN SUJECION BAJO SUS PIES. Pero cuando dice que todas las cosas le están sujetas, es evidente que se exceptúa a aquel que ha sometido a El todas las cosas. Y cuando todo haya sido sometido a El, entonces también el Hijo mismo se sujetará a aquel que sujetó a El todas las cosas, para que Eloha sea todo en todos.”

“todo mi pueblo obedecerá tus órdenes” – El que no obedece a Mashiaj Yeshúa tampoco le hace caso al Padre, como está escrito en Juan 3:35-36:

“El Padre ama al Hijo y ha entregado todas las cosas en su mano. El que cree en el Hijo tiene vida eterna; pero el que no obedece al Hijo no verá la vida, sino que la ira de Eloha permanece sobre él.”

41:41 “Paró dijo también a Yosef: Mira, te he puesto sobre toda la tierra de Mitsrayim.” – Como Mitsrayim simboliza el mundo entero, el Mesías gobernará sobre todo el mundo, como está escrito en Hebreos 2:8:

“TODO LO HAS SUJETADO BAJO SUS PIES. Porque al sujetarlo todo a él, no dejó nada que no le sea sujeto. Pero ahora no vemos aún todas las cosas sujetas a él.”

No solamente el mundo material está sujeto al Mesías, sino todo lo invisible también, como está escrito en

Mateo 28:18: “Y acercándose Yeshúa, les habló, diciendo: Toda autoridad me ha sido dada en el cielo y en la tierra.”

En 1 Pedro 3:22 está escrito: “quien está a la diestra de Eloha, habiendo subido al cielo después de que le habían sido sometidos ángeles, autoridades y potestades.”

 

En Efesios 1:19b-23 está escrito: “la eficacia de la fuerza de su poder, el cual obró en el Mesías cuando le resucitó de entre los muertos y le sentó a su diestra en los lugares celestiales, muy por encima de todo principado, autoridad, poder, dominio y de todo nombre que se nombra, no sólo en este siglo sino también en el venidero. Y todo sometió bajo sus pies, y a El lo dio por cabeza sobre todas las cosas a la congregación, la cual es su cuerpo, la plenitud de aquel que lo llena todo en todo.”

 41:42 “Y Paró se quitó el anillo de sellar de su mano y lo puso en la mano de Yosef; y lo vistió con vestiduras de lino fino y puso un collar de oro en su cuello” – El anillo implica autoridad para actuar en el nombre del rey. Ahora Yosef podía sellar documentos usando el nombre del Paró. Recibió el nombre que estaba sobre todo nombre de ese mundo. Lo mismo pasó con Yeshúa, que recibió el Nombre que es sobre todo nombre. Como Yosef no se llamaba Paró, pero podía actuar en ese nombre y sellar en ese nombre, así Yeshúa no tiene el nombre de YHVH en si mismo, sino lo ha recibido del Padre para gobernar por medio de él, como está escrito en Filipenses 2:9:

“Por lo cual Eloha también le exaltó hasta lo sumo, y le confirió el Nombre que es sobre todo nombre”

 

 

 

 

 

 

 “lino” – El lino es usado de una manera especial en el culto al Eterno en el tabernáculo y el templo. Todos los sacerdotes del Eterno vestían de lino. Los ángeles del Eterno se visten de lino, cf. Ezequiel 9:2, 11; Daniel 10:5; Revelación 15:6.

El sumo sacerdote tenía que vestirse de ropas de lino especialmente preparadas para el día de la expiación, Yom Kipur, cf. Levítico 16. Cuando Yeshúa fue sepultado fue envuelto en un lienzo de lino, cf. Mateo 27:59. El lino está relacionado con la resurrección del Mesías, según Juan 20:5-7. Al ser resucitado fue vestido con el nuevo cuerpo y también recibió un manto de lino, que llega hasta los pies, como está escrito en Revelación 1:13:

“En medio de los candelabros, vi a uno semejante al Hijo del Hombre, vestido con una túnica que le llegaba hasta los pies y ceñido por el pecho con un cinto de oro.”

La novia del Mesías será vestida de lino fino, que representa las obras de justicia en obediencia a los mandamientos que ha practicado, como está escrito en Revelación 19:8:

“Y a ella le fue concedido vestirse de lino fino, resplandeciente y limpio, porque las acciones justas de los santos son el lino fino.”

41:43 “Lo hizo montar en su segundo carro, y proclamaron delante de él: ¡Avrej! Y lo puso sobre toda la tierra de Mitsrayim.” – Según Rashí, “avrej” viene de dos palabras, “av”, “padre”, y “rej”, “rey”. Aunque la palabra “av” significa padre, en ciertos contextos su sentido es “consejero” o “amigo principal”.

 

En 45:8 Yosef dice de sí mismo que Eloha lo ha hecho “av”, “padre” del Paró.

Según el Rabí Yosi ben Durmaskit, citado por Rashí, “avrej” está relacionado con “birkayim”, “roddillas”, y por lo tanto debe entenderse como una orden de doblar rodilla delante de él.

Cuando el pueblo reconocía la nueva posición de Yosef y doblaba la rodilla ante él, estaba aceptando la autoridad del que le puso en ese puesto, el rey de Mitsrayim. Fue Paró que ordenó al pueblo doblarse ante Yosef. De la misma manera el Padre ha ordenado al mundo que se incline ante Yeshúa para así reconocer que Su autoridad ha sido delegada. Pero si hay adoración al Hijo como si fuera el Padre, hay confusión. El Hijo no es el Padre y el Padre no es el Hijo.

En Revelación 5:8a está escrito: “Cuando tomó el libro, los cuatro seres vivientes y los veinticuatro ancianos se postraron delante del Cordero”

En Isaías 45:23 está escrito: “Por mí mismo he jurado, ha salido de mi boca en justicia una palabra que no será revocada: Que ante mí (el Padre) se doblará toda rodilla, y toda lengua jurará lealtad. 

En Romanos 14:11 está escrito: “Porque está escrito: VIVO YO -DICE EL ETERNO- QUE ANTE MI SE DOBLARA TODA RODILLA, Y TODA LENGUA ALABARA A ELOHA.”

 

En Filipenses 2:10-11 está escrito: “para que en el nombre de Yeshúa SE DOBLE TODA RODILLA de los que están en el cielo, y en la tierra, y debajo de la tierra, y toda lengua confiese que Yeshua HaMashiaj es Señor, para gloria de Eloha Padre.”

El que no se inclinaba ante Yosef, no estaba sujeto a Paró que lo había ordenado. De la misma manera el que no se inclina ante Yeshúa y le reconoce como Señor, no está obedeciendo al Padre que lo ha ordenado, como está escrito en Juan 5:23: “para que todos honren al Hijo así como honran al Padre. El que no honra al Hijo, no honra al Padre que le envió.”

En 1 Juan 5:9-12 está escrito: “Si recibimos el testimonio de los hombres, mayor es el testimonio de Eloha; porque este es el testimonio de Eloha: que El ha dado testimonio acerca de su Hijo. El que cree en el Hijo de Eloha tiene el testimonio en sí mismo; el que no cree a Eloha, ha hecho a Eloha mentiroso, porque no ha creído en el testimonio que Eloha ha dado respecto a su Hijo. Y el testimonio es éste: que Eloha nos ha dado vida eterna, y esta vida está en su Hijo. El que tiene al Hijo tiene la vida, y el que no tiene al Hijo de Eloha, no tiene la vida.”

 

41:45 “Y Paró llamó a Yosef por el nombre de Tsafnat- Paneaj, y le dio por mujer a Osnat, hija de Poti-Fera, sacerdote de On. Y salió Yosef por toda la tierra de Mitsrayim.” – Cuando Yosef fue reconocido como Señor en el mundo gentil, le cambiaron su nombre hebreo en un nombre gentil. De la misma manera el mundo gentil cambió el nombre de Yeshúa HaMashiaj por un nombre griego – “Jesucristo”. JS.

Según Rashí y Flavio Josefo, el nombre Tsafnat Paneaj significa “revelador de misterios”. “Tsafnat” podría derivar de la raíz “tsafán”, que significa “esconder”, “ocultar”. La (70) LXX y la versión Copta tradujo este nombre como “salvador del mundo”.

 

 

 

 

Según Rashí, Poti-Fera es el mismo que Potifar. La palabra hebrea traducida como “sacerdote”, “kohén”, también puede ser entendida como “príncipe”, como en el caso de los hijos del rey David, cf. 2 Samuel 8:18; 1 Crónicas 18:17.

 

41:46a “Yosef  tenía treinta años cuando se presentó ante Paró, rey de Mitsrayim.” – De la misma manera el Hijo de Yosef tenía 30 años cuando empezó su ministerio público, según Lucas 3:23a donde está escrito:

“Y cuando comenzó su ministerio, Yeshúa mismo tenía unos treinta años”

41:49 “Así Yosef almacenó grano en gran abundancia, como la arena del mar, hasta que dejó de medirlo  porque no se podía medir.” – Esto simboliza la gran cosecha de almas que van a ser cosechadas por el Mesías Yeshúa en el mundo gentil, como está escrito en Revelación 7:9-10:

“Después de esto miré, y vi una gran multitud, que nadie podía contar, de todas las naciones, tribus, pueblos y lenguas, de pie delante del trono y delante del Cordero, vestidos con vestiduras blancas y con palmas en las manos. Y clamaban a gran voz, diciendo: La salvación pertenece a nuestro Eloha que está sentado en el trono, y al Cordero.”

En Revelación 14:14-16 está escrito: “Y miré, y he aquí una nube blanca, y sentado en la nube estaba uno semejante a hijo de hombre, que tenía en la cabeza una corona de oro, y en la mano una hoz afilada. Entonces salió del templo otro ángel clamando a gran voz al que estaba sentado en la nube: Mete tu hoz y siega, porque la hora de segar ha llegado, pues la mies de la tierra está madura. Y el que estaba sentado en la nube blandió su hoz sobre la tierra, y la tierra fue segada.”

“como la arena del mar” – Hace referencia a los hijos de Yaakov, cf. 32:12, que se mezclaron entre todas las naciones de la tierra. Ellos serán cosechados por el Hijo de Yosef en los últimos tiempos y reunidos en congregaciones mesiánicas en las ciudades de los gentiles por todo el mundo. AMEN.

 

Así como el Paró ordenó al pueblo obedecer a Yosef, el Padre ordenó con una voz audible que obedeciéramos a Yeshúa, según está escrito en Mateo 17:5: “Mientras estaba aún hablando, he aquí, una nube luminosa los cubrió; y una voz salió de la nube, diciendo: Este es mi Hijo amado en quien me he complacido; a El oíd.”

La pregunta surge: ¿Es posible ir directamente al Padre sin pasar por Yeshúa? Este texto nos muestra que cuando hay una delegación de autoridad no se puede saltar por encima. De la misma manera el Padre ha delegado todo a su Hijo y no se puede saltar por encima de él para llegar al Padre, como está escrito en Juan 14:6:

“Yeshúa le dice: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre sino por mí.”

Este mensaje no fue dado delante de gentiles, sino delante de judíos. Ningún judío llega al Padre, sino por el Mesías, cuyo nombre es Yeshúa.  

 

42:6  “Y Yosef era el que mandaba en aquella tierra; él era quien vendía a todo el pueblo de la tierra. Y llegaron los hermanos de Yosef y se postraron ante él rostro en tierra.” – Aquí vemos un cumplimiento parcial del sueño de Yosef. Todavía falta un hermano para que se cumpla del todo.

De esto aprendemos que llegará un momento en la historia cuando los judíos, que no han sido asimilados entre las naciones, tendrán que ir al hijo de Yosef para buscar pan de vida para no morir. Será un momento glorioso cuando los judíos reconozcan que aquel que el mundo gentil llamaba JS es decir YESHUA también tiene pan para ellos.

 

En Oseas 5:15 – 6:3 está escrito: “Me iré y volveré a mi lugar hasta que reconozcan su culpa y busquen mi rostro; en su angustia me buscarán con diligencia. Venid, volvamos al Eterno. Pues El nos ha desgarrado, y nos sanará; nos ha herido, y nos vendará. Nos dará vida después de dos días, al tercer día nos levantará y viviremos delante de El. Conozcamos, pues, esforcémonos por conocer al Eterno.

 

Su salida es tan cierta como la aurora, y El vendrá a nosotros como la lluvia, como la lluvia de primavera que riega la tierra.”

Este texto concuerda con Mateo 23:39 donde dice: “Porque os digo que desde ahora en adelante no me veréis más hasta que digáis: "BENDITO EL QUE VIENE EN EL NOMBRE DEL SEÑOR."”

 

 

 

 

 

 

 

42:8 “Yosef había reconocido a sus hermanos, aunque ellos no lo habían reconocido.” – De la misma manera Yeshúa ha reconocido al pueblo judío aunque la mayoría de ellos no le han reconocido. El nunca desechará a su pueblo.

42:13 “Mas ellos dijeron: Tus siervos son doce hermanos, hijos del mismo padre en la tierra de Kenáan; y he aquí, el menor está hoy con nuestro padre, y el otro ya no existe.”

 – La expresión “el otro no existe” aparece dos veces en este relato, cf. verso 32. En el versículo 38 Yaakov dice que Yosef ha muerto, cf. 44:20. Este es el mensaje que el pueblo judío ha estado repitiendo durante casi dos mil años acerca de Yeshúa que murió pero fue resucitado por el Eloha de Israel. Como Yosef seguía existiendo e incluso gobernando, así Yeshúa sigue existiendo y gobernando a la diestra del Eloha de Israel en los cielos, y en el segundo encuentro se dará a conocer a sus hermanos.

42:15 “En esto seréis probados; por vida de Paró que no saldréis de este lugar a menos que vuestro hermano menor venga aquí.” – Para que el pueblo pueda experimentar la redención final de las naciones y salir de Mitsrayim en su segundo éxodo, es necesario que estén las doce tribus presentes.

 

42:17-18 “Y los puso a todos juntos bajo custodia por tres días. Y Yosef les dijo al tercer día: Haced esto y viviréis, pues yo temo a Eloha” – Esto alude a la muerte y resurrección del Mesías, que representa al resto de los hijos de Israel.

“al tercer día...viviréis”, cf. Oseas 6:2.

Yosef no tenía venganza en su corazón, como un buen israelita, según Levítico 19:18, donde está escrito:

“No te vengarás, ni guardarás rencor a los hijos de tu pueblo, sino que amarás a tu prójimo como a ti mismo; yo soy el Eterno.” 

 

Una de las misiones del Mesías Yeshúa es restaurar y reunir las doce tribus de Israel, como está escrito en Isaías 49:5-6: “Y ahora dice el Eterno (el que me formó desde el seno materno para ser su siervo, para hacer que Yaakov vuelva a El y que Israel se reúna con El, porque honrado soy a los ojos del Eterno y mi Eloha ha sido mi fortaleza),dice El: Poca cosa es que tú seas mi siervo, para levantar las tribus de Yaakov y para restaurar a los que quedaron de Israel; también te haré luz de las naciones, para que mi salvación alcance hasta los confines de la tierra.”

 

Como la gran mayoría de los descendientes de las doce tribus están entre los gentiles, esta restauración y reunificación implica que los que de ellos son del Mesías entre los gentiles experimenten una fuerza increíble que los llevará a unirse con sus hermanos judíos para ser un solo pueblo. ISRAEL.

El movimiento llamado mesiánico o raíces hebreas es el inicio de esta reunificación entre gentiles, donde están las tribus pérdidas, y judíos en el Mesías Yeshúa. Cada vez más personas se integran en este movimiento de la redención final de Israel de las naciones y la reunificación de las doce tribus. ¿Cuántos sienten ya algo de esta borrachera? ¡Habrá mucho más! ¡¡Esto es sólo el inicio!!

 

44:14 “Yehudá llegó con sus hermanos a casa de Yosef, él estaba aún allí, y ellos cayeron a tierra delante de él.” – En este tiempo hay esfuerzos tanto de los judíos ortodoxos como de los judíos mesiánicos de ir a buscar “la casa de Yosef”, las diez tribus perdidas entre las naciones. HaShem El Eterno, nuestro Eloha está impulsándonos a hacer esto porque se está acercando el momento cuando el Hijo de Yosef se va a dar a conocer a sus hermanos.

Aquí vemos que los once hijos de Israel se inclinan otra vez ante Yosef. Por segunda vez se cumplió el sueño.

Este texto nos induce a pensar que los judíos reconocerán a Yeshúa en la casa de Yosef. La casa de Yosef son las diez tribus perdidas que están volviendo a casa en este tiempo, y principalmente de entre los cristianos. Y si dice volviendo a casa, quiere decir haciendo Teshuva/Arrepentimiento, para regresar a casa. Amen? Toda Raba A mi Padre Celestial.

 

¡Shabat shalom!

 

Recopilado por. ORLANDO UNDA RAMIREZ.