Parashá 39 Jukat. Números 19:1 – 22:1
Para ser compartida en este shabat 09 de Tammuz 5785/05 Julio 2025.
Aliyás de la
Torá.
1.
19:1-17
2.
19:18 – 20:6
3.
20:7-13
4.
20:14-21
5.
20:22 – 21:9
6.
21:10-20
7.
21:21 – 22:1
Haftará: Jueces
11:1-33
El Código Real: Juan 11:1 – 12:50
1.
Juan
11;1-16
2. Juan 11;17-44
3. Juan 11;45-12;8
4. Juan 12;9-19
5.
Juan
12;20-50
Jukat. Significa
“estatuto de”.
Hermanos
en esta sección de la Torah encontramos los siguientes temas o
asuntos:
1 instrucciones
Acerca de la Purificación: Capítulo 19.
2 el pecado de Moshé en las aguas de la rencilla: Capítulo 20:1-13.
3 el rechazo de los hijos de Edom hacia Israel: Capítulo 20:14-21.
4 la muerte de Aarón, hermano de Moshé: Capítulo 20: 22-29.
5 derrota de los cananeos: Capítulo 21:1-3.
6 la serpiente de bronce levantada por Moshé: Capítulo 21:4-9.
7 aproximación de los hijos de Israel a la tierra prometida: Cap. 21:10-20
8 Derrota de dos reyes y acercamiento a Jericó: Capítulo 21:21-22:1
Hoy compartiremos, los
siguientes temas: 1. Instrucciones Sobre la Purificación; La
Vaca Roja. 2. El pecado de Moshé en las aguas de la rencilla – 3. La Biblia que
Obedecemos. y 4. La serpiente de bronce levantada por Moshé.
1. LA VACA ROJA
- EL INGREDIENTE QUE FALTA
Qué
tiene que ver una vaca roja con todo esto de la purificación?
Quizás
para algunos sea difícil comprender que una vaca pueda ser tan importante. Pero,
de hecho, el destino del mundo entero depende de la vaca roja.
El
Eterno nuestro Eloha ordenó que sus cenizas son el único ingrediente apto para
el restablecimiento de la pureza de la Torah - y después, la reconstrucción del
Templo Sagrado. Y como veremos en esta parasha, las cenizas de la vaca roja
rectifican (hacen tikun) con el desperfecto humano más básico: la
desesperación. La desesperación que produjo la pérdida del Templo y la
Presencia Divina entre nosotros.
La purificación
a través de la vaca roja nos recuerda que el ser humano tiene el potencial para
sobrepasar su existencia física transitoria, con todo su sentido falso de
desesperanza y miseria: la "impureza" de la muerte. Este es el rol
del Tercer Templo para toda la humanidad, y esta es la visión Mesiánica del
futuro: la llamada para vivir una vida eterna, libre de la farsa y la desdicha…
que son las condiciones humanas en que se encuentran tantas personas. Esta es
La llamada o el llamamiento para vivir la verdadera alegría, vivir la vida
plenamente - con el conocimiento verdadero de El Eterno nuestro Eloha.
La orden Divina con respecto a la vaca roja, fuera del alcance del frágil
intelecto del hombre con todos los detalles de su preparación y la ceremonia,
llama a Israel y a todos los que procuran adherirse a la Torah viva del Eloha
de Israel: ¡"Purificaos! ¡Sacudíos de vuestra desesperación! ¡La muerte es
una ilusión"! Así está escrito, “Pero vosotros que estáis apegados a El Eterno, vuestro Eloha/Dios, estáis
todos vivos hoy." (Deut. 4:4)
El Misterio de
la vaca roja está por encima de la comprensión humana. Los grandes Sabios de
Israel consideran este precepto como el misterio más profundo de la Toráh, ya
que lo rodea una gran contradicción enigmática: aunque las cenizas de la vaca
roja tengan el poder inexplicable para purificar a todos los que han sido
considerados impuros, el contacto con las mismísimas cenizas para aquellos que
están puros tiene el efecto contrario... los hace impuros!
El rey Salomón, que fue el más sabio de todos los seres humanos que jamás
vivió, comprendió cada aspecto de la creación de Elohim. La tradición relata
que él incluso conocía los idiomas de todos los animales. Mas él no pudo
entender el secreto de la vaca roja, y después de contemplarlo, él declaró
"Dije, 'llegaré a ser sabio, pero está lejos de mí'" (Ecc. 7:23).”
El mandamiento
de la vaca roja es uno de esos preceptos que pertenecen a la categoría de Jok
(plural, Jukim). Estos son estatutos que Elohim decretó que no pueden ser
comprendidos por el razonamiento humano. Más bien, Él requiere que nosotros los
realicemos por motivo de nuestro amor y temor hacia Él. Aunque intentemos
indagar en las explicaciones de estas leyes, para encontrar alguna alusión o el
sentido de las ideas transmitidas, nosotros sabemos que, al fin de cuentas, su
significado verdadero está más allá de nuestro alcance intelectual.
Los mandamientos que tienen en nombre de juk o juká, están conectados de una
manera especial con el Mesías. Como aquí tenemos la juká por excelencia, hay
una conexión muy íntima en todo este rito con el Mesías. El punto principal es
este: las cenizas de la vaca roja al mezclarse con agua, será lo único que
podrán usar los sacerdotes y levitas para su purificación a fin de estar
capacitados para entrar al Templo y ministrar delante del Eterno. Así pues, sin
estas cenizas mezcladas con agua, no podrán los sacerdotes estar listos para
ofrecer los sacrificios. Consecuentemente, el nacimiento de una vaca roja que
reúna las condiciones exigidas en la Torah es un aviso de que los
sacerdotes y levitas contarán con los recursos iniciales para poder ofrecer
sacrificios. Si a esto añadimos que para ministrar los sacrificios
prescritos en la Torah no es imprescindible la totalidad del Templo,
sino que bastaría el altar del sacrificio siempre que esté colocado en el lugar
donde estuvo el original, entonces el nacimiento de una vaca roja en Israel hoy
en día anticipa la reconstrucción del Templo y consecuentemente es visto como
una señal de la proximidad de la llegada de Mashiaj.
Si
tenemos en cuenta que según la Escritura el anti-mesías profanará el
Templo, entonces será una exigencia profética el levantamiento del Tercer
Templo. Este tercer templo luego de profanado por el anti-mesías como
hiciera Antíoco Epífanes en la época de los Macabeos, dos siglos antes del
nacimiento de Yeshua, será purificado por el Adon en su Segunda Venida y
entonces dará pie a la construcción de un Nuevo Templo, un Nuevo Mihzkan o
Tabernáculo. Este Templo jamás será profanado ni gente inmunda entrará jamás
por sus puertas para escarnecerlo. Así que estamos viviendo días muy
especiales.
Hermanos, El autor de la epístola a los hebreos explica el simbolismo que
tienen este y otros rituales físicos como anticipos (tipos) del sacrificio de
Yeshua hamashiaj y su obra intercesora como Sumo Sacerdote (del orden de
melquisedec). Se declara que el propósito del ritual de la vaca alazana era la
santificación para la purificación de la carne, destacando la superioridad de
la obra del Redentor.
Hebr
9:13-14; “Porque si la sangre de los toros y de los machos cabríos, y
las cenizas de la becerra rociadas a los impuros, santifican
para la purificación de la carne, ¿cuánto más la sangre de Mashiaj, el cual
mediante el Espíritu del Eterno se ofreció a sí mismo sin mancha a
Elohim, limpiará vuestras conciencias de obras muertas para que
sirváis al Eloha vivo?
En
la actualidad reconocemos que la sangre del sacrificio de Yeshua hamashiaj
cumple de manera cabal y perfecta la santificación y purificación de la
conciencia del creyente como lo dice el versículo 14 de hebr 9.
En
relación con la aseveración de que el pueblo Israelita sigue en la búsqueda de
una vaca alazana perfecta debemos entender que el mundo Israelita ortodoxo
sigue trabajando arduamente en el restablecimiento de los sacrificios en un
futuro templo en Jerusalén. Sus esfuerzos incluyen no sólo la preparación del
cuerpo sacerdotal para tal fin, sino también, de todos los insumos para su
desarrollo, incluido por supuesto la vaca alazana necesaria para la preparación
del agua purificadora. Algunos religiosos Israelitas afirman que hubo nueve
vacas rojas que fueron utilizadas para purificar al pueblo y que la décima
aparecerá junto con el Mesías.
En Levítico 3:7
está escrito: “Si ha de presentar un cordero como su ofrenda, lo ofrecerá delante
de Elohim.”
En
Levítico 6:25 está escrito: “Habla a Aarón y a sus hijos y diles: "Esta es la Toráh de la
ofrenda por el pecado: la ofrenda por el pecado será ofrecida delante
de Elohim en el mismo lugar donde la ofrenda de ascensión es ofrecida;
es cosa santísima.”
Num.19:5
“Luego la novilla será quemada en su presencia; todo se quemará, su cuero, su
carne, su sangre y su estiércol.” – Toda la vaca es quemada lo cual habla de la entrega total del Mesías
Yeshúa.
Num.19:6
“Y el sacerdote tomará madera de cedro, e hisopo y lana carmesí, y los echará
en medio del fuego en que arde la novilla.” – Los tres objetos, madera de
cedro, hisopo y lana carmesí, tenían que ser añadidos para producir las cenizas
que luego fueron mezcladas con el agua para que sirvieran de purificación. De
esto se puede suponer que el madero horizontal sobre el cual el Maestro fue
colgado, era de cedro. Es probable que Yeshúa haya sido colgado en un
árbol, en una higuera, que crecía en el monte de los Olivos. Adam y Javá
tomaron hojas de higuera en el lugar donde se introdujo el pecado, cerca del
árbol de la ciencia que probablemente estaba en el monte de los Olivos, cf. Génesis 3:7. Yeshúa
maldijo una higuera cuando pasó por ese camino al entrar en la ciudad poco
antes de su muerte, cf. Marcos 11:21. Estas cosas indican que
él posiblemente haya sido colgado en una higuera, y los dos ladrones en el
mismo árbol, uno a la derecha y otro a la izquierda, cf. Lucas 23:33.
Es
lógico llegar a esta conclusión por el hecho de que cuando el soldado romano
iba a romper las piernas de los tres colgados, se fue primero a uno de los
ladrones y luego a otro, y finalmente llegó a Yeshúa y vio que ya estaba
muerto, cf. Juan
19:32-33. Si
los tres hubieran estado en una línea, con Yeshúa en medio, no tiene sentido
que el soldado haya saltado sobre el Maestro para ir de un ladrón a otro. Lo
más lógico es que hayan sido colgados como en un triángulo en el mismo
árbol. El
palo horizontal, sin embargo, parece haber sido de cedro, según este texto.
El hisopo se
usaba para la purificación, para rociar la sangre y el agua. Se usó en la
salida de Mitsrayim para untar sobre las puertas. Se usó en la purificación de
los “leprosos” y aquí se usa otra vez para purificar de la contaminación de la
muerte. En hebreos
9:19-22 está
escrito:
“Porque
cuando Moshé terminó de promulgar todos los mandamientos a todo el pueblo,
conforme a la Toráh, tomó la sangre de los becerros y de los machos cabríos,
con agua, lana escarlata e hisopo, y roció el libro mismo y a todo el pueblo,
diciendo: ESTA ES LA SANGRE DEL PACTO QUE ELOAH OS ORDENÓ. Y de la
misma manera roció con sangre tanto el Mizhkan/tabernáculo como todos los
utensilios del ministerio. Y según la Toráh, casi todo es purificado con
sangre, y sin derramamiento de sangre no hay perdón.”
En
el Salmo
51:7 está
escrito: “Purifícame
con hisopo, y seré limpio; lávame, y seré más blanco que la nieve.”
En Juan 19:29 Está escrito: “Había allí una
vasija llena de vinagre; colocaron, pues, una esponja empapada del vinagre en
una rama de hisopo, y se la acercaron a la boca.”
El
hisopo fue utilizado en relación con la muerte del Mesías conectándole así con
la liberación de Mitsrayim, la purificación de tsaráat (“lepra”) que simboliza
el pecado, la purificación de la impureza ritual producida por el contacto con
la muerte y la introducción de los hijos de Israel en el pacto.
La
lana carmesí nos habla de la sangre, y alude a la muerte del Mesías.
Num.19:9
“Entonces un hombre que esté limpio juntará las cenizas de la novilla y las
depositará fuera del campamento en un lugar limpio, y la congregación de los
hijos de Israel las guardará para el agua para la impureza; es una ofrenda por
el pecado.” –
Las cenizas de la vaca roja fueron divididas en tres partes: una parte fue
puesta en el monte de los Olivos, otra parte fue colocada en el “jel”, el área
que rodeaba el atrio del templo y otra parte fue dividida entre los 24 grupos
de los sacerdotes que servían en el templo. Según la Mishná, la parte de las
cenizas que estaban en el monte de los Olivos fue utilizada para consagrar los
sumos sacerdotes para poder preparar otras vacas rojas.
Las
cenizas que fueron guardadas en el jel servían para las generaciones futuras,
según ordena este versículo. Las cenizas que estaban entre los sacerdotes en la
tierra de Israel servían para que pudieran purificarse los hijos de Israel que
estaban en las demás ciudades.
En Juan 2:1-12 está escrito: “Al tercer día
se celebró una boda en Katné de Galil, y estaba allí la madre de Yeshúa; y
también Yeshúa fue invitado, con sus discípulos, a la boda. Cuando se acabó el
vino, la madre de Yeshúa le dice: No tienen vino. Y Yeshúa le dice: Mujer, ¿qué
tengo yo que ver contigo? Todavía no ha llegado mi hora. Su madre dice a los
que servían: Haced todo lo que él os diga. Y había allí seis tinajas de piedra,
puestas para ser usadas en el rito de la purificación de los Israelitas; en cada
una cabían dos o tres cántaros. Yeshúa les dice: Llenad de agua las tinajas. Y
las llenaron hasta el borde. Entonces les dice: Sacad ahora un poco y llevadlo
al maestresala. Y se lo llevaron. Cuando el maestresala probó el agua
convertida en vino, y como no sabía de dónde era (pero los que servían, que
habían sacado el agua, lo sabían), el maestresala llama al novio, y le dice:
Todo hombre sirve primero el vino bueno, y cuando ya han tomado bastante,
entonces el inferior; pero tú has guardado hasta ahora el vino bueno. Este
principio de sus señales hizo Yeshúa en Katné de Galil, y manifestó su gloria,
y sus discípulos creyeron en él. Después de esto bajó a Kefar Najum, él, con su
madre, sus hermanos y sus discípulos; pero allí no se quedaron muchos días.”
Las
seis tinajas, que fueron usadas por el Maestro para transformar agua en vino,
eran las que normalmente se usaban para la purificación de los Israelitas que
habían entrado en contacto con algún cadáver. Las cenizas de la vaca roja
fueron mezcladas con mucha agua. Cada tinaja contenía dos o tres cántaros. Un
cántaro equivale a unos 40 litros de agua.
Así que,
con las seis tinajas llenas de agua, hubo una transformación de unos 600
litros de agua en vino. Se ve que la boda se hizo en la casa de algún
sacerdote.
Num.19:16
“De igual manera, todo el que en campo abierto toque a uno que ha sido muerto a
espada, o que ha muerto de causas naturales, o que toque hueso humano, o tumba,
quedará impuro durante siete días.” – No sólo el contacto físico con un cadáver produce impureza ritual de
primer grado, sino también por tocar hueso humano, aunque sea viejo, o pisar
sobre una tumba. Esta es la razón por la que se blanqueaban los sepulcros, para
que nadie los pisara y quedara impuro innecesariamente. Ese tipo de impureza
ritual no es eliminada al menos que uno pase por una semana de purificación y
sea rociado en el tercer día y en el séptimo día con el agua purificadora. En
el séptimo día hay que sumergirse en la mikvé y así uno se vuelve puro al caer
la tarde, cf. v. 19.
Num.19:17
“Entonces para el impuro tomarán de las cenizas de lo que se quemó para
purificación del pecado, y echarán sobre ella agua viva en una vasija.” – Para que el
agua pueda ser viva tiene que venir naturalmente de una fuente natural, como la
lluvia o una fuente subterránea. Si toca algún material que puede volverse
impuro, como metal, madera o barro, ya no es agua viva. Esto nos explica la
razón por la que guardaban esta agua purificadora en tinajas de piedra y no de
barro. Hay varias similitudes entre la vaca roja y el becerro de oro.
Al
igual que el polvo del becerro de oro que había pasado por fuego fue mezclado
con agua que fue dada a los hijos de Israel, aquí las cenizas de la vaca roja
son mezcladas con agua y luego aplicadas sobre los hijos de Israel.
Como
el becerro de oro fue hecho con oro que habían aportado los hijos de Israel,
así la vaca roja es comprada del medio shekel entregado al templo por los
israelitas una vez al año.
Num.19:19
“Entonces el puro rociará sobre el impuro al tercero y al séptimo día; al
séptimo día lo purificará de la impureza, y él lavará su ropa y se bañará en
agua, y quedará limpio al llegar la tarde.” –
Sólo
un hombre ritualmente limpio podrá rociar sobre los otros para que sean
purificados.
En Ezequiel
36:24-30 está
escrito:
“Porque
os tomaré de las naciones, os recogeré de todas las tierras y os llevaré a
vuestra propia tierra. Entonces os rociaré con agua limpia y quedaréis limpios;
de todas vuestras inmundicias y de todos vuestros ídolos os limpiaré. Además,
os daré un corazón nuevo y pondré un espíritu nuevo dentro de vosotros; quitaré
de vuestra carne el corazón de piedra y os daré un corazón de carne. Pondré
dentro de vosotros mi espíritu y haré que andéis en mis estatutos, y que
cumpláis mis ordenanzas poniéndolas por obra. Habitaréis en la tierra que di a
vuestros padres; y seréis mi pueblo y yo seré vuestro Eloah. Os libraré de
todas vuestras inmundicias; llamaré al trigo y lo multiplicaré, y no traeré
hambre sobre vosotros. Y multiplicaré el fruto de los árboles y el producto del
campo, para que no recibáis más el oprobio del hambre entre las naciones.”
Se
necesita una semana para purificarse del efecto de la muerte. En el octavo día
uno ya está limpio. De la misma manera el mundo pasará por 7000 años de proceso
de purificación, y después habrá justicia, sin muerte. El tercer día
corresponde al tercer milenio desde Adam, cuando los hijos de Israel salieron
de Mitsrayim y recibieron la Toráh que purifica. Para el séptimo milenio vendrá
el Mesías para purificar, no solamente a los que han tocado los muertos, sino a
los muertos mismos que serán resucitados. Aquí se habla de dos momentos muy
importantes en la historia, la primera y la segunda redención, en el tercer
milenio y en el séptimo.
Num.19:20
“Pero el hombre que sea impuro y que no se haya purificado a sí mismo de su
impureza, esa persona será cortada de en medio de la asamblea, porque ha
contaminado el santuario de YHVH; el agua para la impureza no se ha rociado
sobre él; es impuro.” – La
pena de karet sólo cae sobre la persona que haya entrado en el santuario en el
estado de impureza.
Num.19:21
“Por tanto será estatuto perpetuo para ellos. Y el que rocíe el agua para la
impureza lavará su ropa, y el que toque el agua para impureza quedará impuro
hasta el atardecer.” –
Todos los que estaban preparando las cenizas de purificación se quedaron
impuros en el proceso de preparación, cf. vv. 7-8. Sin embargo, el versículo 19
habla del puro que tiene que rociar sobre el impuro en el tercer día y el
séptimo día. De ese versículo los sabios del Talmud interpretan que el que
rocíe el agua purificadora no queda impuro. Por esto, el versículo 21 se
entiende como hablando del que porte el agua y del que toque el agua. El que
porta el agua obtendrá una impureza más severa de manera que incluso su ropa se
queda impura y por lo tanto necesita ser sumergida en una mikvé. El que sólo
toque el agua no necesita pasar su ropa por la mikvé. El que toque el agua
purificadora se vuelve impuro. Es una aparente contradicción que no tiene una
explicación inmediata. Sin embargo, esto nos habla de Yeshúa que tomó nuestro
pecado y nuestra muerte de manera que quedó impuro por causa nuestra para que
nosotros pudiéramos ser purificados por medio de él, como está escrito en:
1
Pedro 1:2: “según el previo conocimiento de Eloah Padre, por la obra
santificadora del Espíritu, para obedecer a Yeshúa el Mesías y ser rociados con
su sangre: Que la gracia y la paz os sean multiplicadas.”
En 2 Corintios 5:21
está
escrito: “Al
que no conoció pecado, le hizo pecado por nosotros, para que fuéramos hechos
justicia de Eloah en él.” Después de la resurrección, Yeshúa el Mesías tenía que pasar los siete
cielos para así ser purificado de la impureza que había obtenido en la muerte y
poder entrar en el lugar santísimo en el Mishkan/tabernáculo celestial, cf. Hebreos 4:14;
Efesios 4:10.
Los siete cielos representan los siete días de purificación después de haber
estado en contacto con la muerte. De esa manera el Padre purificó a Yeshúa en
el momento de la ascensión, cf. Zacarías 3:3-4.
2.-
El pecado de Moisés en las aguas de la rencilla: Capítulo 20:1-13.
La segunda
enseñanza de la Torah está relacionada con el pecado de Moshe.
¿En qué
consistió realmente el pecado de Moshe y Aarón?
Miremos
cuidadosamente la Escritura.
Moshe y Aarón entran al
Mizhkan para interceder por el pueblo que se ha rebelado otra vez contra Adonai
en el desierto. Están aproximándose a la tierra prometida y vuelven a
rebelarse contra el Eterno por falta de agua en el desierto. Entonces Moshe, en
el mizhkan, recibe las siguientes instrucciones: Num.20:8:"Toma la
vara, y reúne la congregación, tú y Aarón tu hermano, y hablad a la peña a
vista de ellos; y ella dará su agua, y les sacarás aguas de la peña, y darás de
beber a la congregación y a sus bestias."
Observe las instrucciones
precisas que el Eterno le da:
Primero: Toma la
vara
Segundo: Reúne la Congregación.
Tercero: Habla a la peña a la vista de la congregación.
Cuando tú hagas estas tres
cosas, saldrá agua de la roca y entonces darás a beber a la congregación y a
sus bestias.
Moshe debía hablar a la peña
como si fuera una persona. Moshe tenía que creer que saldría agua de la peña.
¿Qué pasó con Moshe?
Miremos lo que pasó:
Primero: Tomó la vara (Vr.9). Esto está bien.
Segundo: Reunió la kehilá. Esto está bien.
Tercero: Ahora debería “hablar” a la
peña en presencia de la congregación.
¿Qué hizo Moshe? Dos cosas
incorrectas:
Primero: no habló a la
Peña, sino a la congregación.
Segundo: en vez de hablar a la peña, la golpeó con la vara dos veces.
Algunos han tratado de
explicar esta acción de Moshe diciendo que se equivocó de roca; pero esto es
forzar y confundir el texto.
Moshe
nunca fue comisionado para “golpear” sino para “hablar” a la roca y como
veremos luego, esto tenía un propósito. Cuando usted revisa bien el texto verá
que el Eterno no le había dicho que golpeará la peña, sino que le hablará. Si
él le hubiera hablado a la roca y le hubiera dicho estas simples palabras:
“Roca, deja salir el agua de tu seno”, el agua habría salido. El Eterno había
dicho que así sucedería. Pero Moshe, llevado por la indignación producida por
la rebelión del pueblo, no habló a la roca, sino que la golpeó dos veces con su
vara.
¿Cuál fue realmente el pecado
de Moshe?
Primero:
desobediencia a la voz del Eterno. Segundo: establecimiento de su propio orden;
en vez de hablar, golpear. Tercero: incredulidad; Moshe no creyó que
simplemente hablando a la roca se vería el milagro prometido. Cuarto: privó al
pueblo de una gran oportunidad de ver la gloria del Eterno nuestro Adon en la
santificación del Nombre Sagrado.
Miremos:
Vr. 12. “Por
cuando no creísteis en mí para santificarme delante de los hijos de
Israel".
Pensemos
en esto: ¿Por qué golpear la peña fue algo tan grave a los ojos de Elohim que
le prohibió luego a Moshe entrar en la tierra prometida?
Hay
dos razones: Una nos la ofrece el propio texto y nos viene por el significado
simple del texto.
Observa
qué dijo Adonai: “No creísteis en mí PARA SANTIFICARME delante de los hijos de
Israel”.
¿Qué
significa “santificarme delante de los hijos de Israel”?
En
otras palabras: ¿Por qué golpear la roca y no hablarle a la roca privó a El
Eterno de ser santificado entre los hijos de Israel?
La
palabra “santificar” que usa el texto sagrado aquí es la clave para encontrar
la respuesta a esta pregunta.
Esta
palabra viene del hebreo KADASH que entre otras cosas significa “HACER O CAUSAR
que el nombre del Eterno nuestro Adon sea tenido en reverencia y temor” por
parte Su pueblo.
¿Cuál
es la diferencia entonces? De todos modos, brotó agua de la peña. ¿No era esto
suficiente para que el pueblo temiera a Elohim?
De
ninguna manera.
El
milagro en sí no era la gran lección que el Eterno quería dar a Su pueblo.
Era
el MODO DEL MILAGRO.
En
otras palabras, si el Eterno podía hacer que algo sin vida, sin voluntad, sin
espíritu produjera agua, ¿cuánto más podría hacer con Su pueblo dotado de vida,
de voluntad y de espíritu?
Hermano:
Si el Eterno puede hacer que una roca sea útil, ¿cuánto más no podrá hacer con
tu vida?
Si
dejamos que la Torah viva penetre en nuestras vidas, los resultados serán
extraordinarios.
Esto
es lo que Elohim quería enseñarle al pueblo. Pero Moshe no se percató de esta
gran oportunidad.
Así
que en vez de hablarle a la roca para mostrar a los hijos de Israel el efecto
de la palabra en algo que no tiene vida en sí mismo a fin de que pudieran tener
fe para creer el tremendo poder que saldría de ellos si permitían que la
palabra de Adonai penetrara en sus corazones.
Si
de una roca salió agua, ¿qué no saldrá del corazón de un pueblo que recibe la
Torah de Adonai y guarda sus mandamientos?
¿Cuántos
entienden lo que está en juego aquí?
Bien
dije esto: ¿Por qué golpear la peña fue algo tan grave a los ojos del Eterno
que le prohibió luego a Moshe entrar en la tierra prometida?
Mencioné
que hay dos razones:
-
Una que nos la ofrece la ofrece el propio texto y nos viene por el significado
simple del texto.
- La
otra nos la ofrece el rabí Shaul y nos viene por el significado escondido en el
texto:
Miremos lo que dice el rabí
Shaul: 1 Corintios 10:4. “Y todos bebieron la misma bebida espiritual; porque bebían de la roca
espiritual que los seguía y la roca era el Mesías”.
Aquella peña en lo natural
estaba hablando de otra peña en el celestial. La roca natural representaba la
roca sobrenatural, que es el Mesías.
Golpear la peña fue algo muy
grave para Moshe, porque estaba levantando su mano contra lo que estaba allí
del mundo celestial. Sin saberlo, Moshe estaba golpeando algo sagrado.
¿Cuántos entienden lo que
digo?
Esto le costó la entrada a la
tierra de promisión.
Esto nos provee
enseñanzas sumamente importantes:
Primero: Cuidado
con la ira. La
indignación frente a la rebelión no debe llevarnos a la ira.
¿Por qué? Porque la ira casi
siempre nos lleva al pecado.
El rabí Shaul dice: “Airaos, pero no
pequéis, no se ponga el sol sobre vuestro enojo”.
Usted nunca verá que diga en
algún lugar: “Amad, pero no pequéis…”
Tampoco dice: “Orad, pero no pequéis…”
Cuando el amor y la oración
son auténticos nunca nos llevarán al pecado…
Pero la ira sí tiene el
potencial de hacerlo. Cuidado con la ira.
¿Cuál es el peligro mayor de
la ira?
El peligro mayor es que te
roba la fe.
¿Qué dijo Moshé al pueblo?
“¿Haremos salir agua de esta roca para vosotros?”
Cuando usted lee esto, recibe
un toque de incredulidad detrás de las palabras de Moshé.
Moshé mismo no creyó que el
milagro tendría lugar.
Y el Eterno se lo reprochó,
por cierto: Vr. 12 dice: “Por cuanto
no creísteis en mí…”
No en la existencia de Él,
sino en su promesa de sacar agua de la roca cuando se le hablase.
Así que la ira
roba la fe. Cuidado con la ira.
Segundo: Cuidado con la Desobediencia. Cuando Adonai
dice una cosa, no hagamos otra.
Cuando Adonai dice una cosa,
no la sustituyamos por otra.
Cuando Adonai dice: habla, no
golpees. Y Cuando Adonai dice: golpea, no hables.
La diferencia
entre un creyente que el Eterno usa y otro creyente que pierde el privilegio de
servir al Eloha de Israel viene dado por la obediencia de uno y la
desobediencia del otro.
Tercero: Cuanto
más alta es la responsabilidad que el Eterno te da, más alta será la demanda
que el Eterno hará de ti.
Si este acto de Moshé
hubiera sido realizado por cualquier israelita común, habría pasado inadvertido
quizá… pero no en Moshé y Aarón.
Yeshua dijo que
al que mucho se le da, mucho se le demandará.
Cada uno de
nosotros tendrá que dar cuenta algún día de lo que hemos hecho en nuestras
vidas y con nuestras vidas.
Cada uno de
nosotros tendrá que presentarse un día ante Yeshúa para rendir informes
detallados de toda nuestra vida y lo que hemos hecho con ella.
Cuanto más alta
es la responsabilidad que usted ha recibido, tanto más alta será la medida con
que usted será medido.
¿Por qué?
Porque las consecuencias del
pecado y de los errores cometidos por los que hemos recibido mayor
responsabilidad en el reino serán mucho más grandes; consecuentemente, más
exigencia se hará del que tiene mucho que del que tiene poco.
Mire lo que dice
el rabí Yaakov en su carta a las doce tribus de la dispersión: (Santiago)
3:1.
“Hermanos
míos, no os hagáis maestros muchos de vosotros, sabiendo que recibiremos mayor
condenación”.
Observe: mayor condenación en
el evento de que cometamos un error.
La incredulidad
y la desobediencia le costaron a Aarón y a Moisés entrar en la tierra de
promisión.
Muchas cosas, por cierto. Las siguientes son las que destaco:
Primero: Cuando no
somos sanados de resentimientos antiguos, corremos el peligro de trasmitir a
nuestros hijos esos resentimientos que se convertirán luego en una maldición
que afectará las generaciones venideras.
Así pues, el
odio irracional que en sentido general tienen los países árabes, descendientes
de Esav, el hermano de Yaakov contra Israel tiene su origen en una maldición
generacional que se viene trasmitiendo de padres a hijos y de generación en
generación.
Esto roba y
destruye no solamente las buenas relaciones entre hermanos, sino también entre
los pueblos. Porque allí es donde se genera la raíz de amargura. La cual no va
con nosotros. Amen.
3.- La
Serpiente de Bronce. - Números 21: 4-9.
La tercera
lección que deseo compartir en este Shabat está relacionada con la serpiente de
bronce levantada por Moshé.
Miremos
lo que dice la Escritura: Números 21: 4-9. "Después partieron del
monte de Hor, camino del Mar Rojo, para rodear la tierra de Edom; y se desanimó
el pueblo por el camino. Y habló el pueblo contra Eloha y contra Moshé: ¿Por
qué nos hiciste subir de Egipto para que muramos en este desierto? Pues no hay
pan ni agua, y nuestra alma tiene fastidio de este pan tan liviano. Y YHVH
envió entre el pueblo serpientes ardientes, que mordían al pueblo; y murió
mucho pueblo de Israel. Entonces el pueblo vino a Moshé y dijo: Hemos pecado
por haber hablado contra YHVH, y contra ti; ruega a YHVH que quite de nosotros
estas serpientes.
Y Moshé
oró por el pueblo. Y YHVH dijo a Moshé: Hazte una serpiente ardiente, y ponla
sobre una asta; y cualquiera que fuere mordido y mirare a ella, vivirá. Y Moshé
hizo una serpiente de bronce, y la puso sobre una asta; y cuando alguna
serpiente mordía a alguno, miraba a la serpiente de bronce, y vivía."
21:6
“Y El Eterno envió serpientes abrasadoras entre el pueblo, y mordieron al
pueblo, y mucha gente de Israel murió.” – El resultado de la queja contra la comida fue mortal. La protección
que antes tenían con la presencia de la nube ya no estaba, y las serpientes
pudieron entrar en el campamento, por mandato del Eterno y muchos murieron por
causa de ellas.
21:7
“Entonces el pueblo vino a Moshé y dijo: Hemos pecado, porque hemos hablado
contra Elohim y contra ti; intercede con El Eterno para que quite las
serpientes de entre nosotros. Y Moshé intercedió por el pueblo.” – Otra vez Moshé
obró como un intermediario entre el pueblo y Elohim. El pueblo no oró al
Eterno, sino pidieron que Moshé orara por ellos. Esto nos muestra que el pueblo
Israelita necesita un intermediario entre ellos y Eloha. Moshé es una figura de
Yeshúa HaMashíaj, que constituye el único camino al Padre para Israelitas y no Israelitas.
21:8
“Y El Eterno dijo a Moshé: Hazte una (serpiente) abrasadora y
ponla sobre una asta; y acontecerá que cuando todo el que sea mordido la mire,
vivirá.” – La
solución para ser libre del veneno de las mordeduras fue mirar con fe en la
ilustración de una serpiente de bronce sobre un palo, para que todo aquel que
había sido mordido pudiera ser liberado de la muerte y el veneno mortal que
corría en sus venas.
21:9
“Y Moshé hizo una serpiente de bronce y la puso sobre la asta; y sucedía que
cuando una serpiente mordía a alguno, y éste miraba a la serpiente de bronce,
vivía.” –
Según Rashí, el texto hebreo usa una palabra que significa que tenían que mirar
fijamente con concentración.
Así que había
serpientes que los mordían y morían. ¿Por qué permitió Adonai aquellas
serpientes?
La respuesta es:
para mostrarles lo que sus palabras producían en el corazón del pueblo.
Mire 21:4 “comenzó a
hablar contra Elohim y contra Moshe”.
Cuando usted
murmura del Eterno y de los siervos del Eterno, lo que sale de su boca es
veneno.
Así que,
en cierto sentido, las palabras de ellos se convirtieron en víboras que venían
ahora y les mordían mortalmente.
Lo
que usted habla contra su hermano es veneno que sale de su boca.
Cada
vez que alguien hablaba algo malo del Eterno o de Moshe, venía una serpiente y
lo mordía.
Así
que todo el que salía mordido, ahí mismo se sabía que había murmurado contra el
Eterno y contra Moshe.
¿Entienden
lo que digo?
Bien,
¿Cuál es la solución de Adonai? La Respuesta es: Sanidad
por La Fe.
La
fe traería sanidad. Así que la enseñanza que afirma que la fe es asunto
desconocido en el Primer Pacto contradice el testimonio de la Escritura.
Este
es un buen ejemplo de cómo el Eterno siempre ha demandado fe/Emuna para recibir
sanidad y salvación.
Piense
en esto: ¿Cómo operaría la fe para sanarles del veneno de las víboras del
desierto?
Por
medio del levantamiento de una serpiente de bronce colocada sobre una asta. Así
que había un palo grande y en el extremo una serpiente de metal. Cuando alguien
era mordido por una serpiente, inmediatamente debía levantar sus ojos a la
serpiente de bronce y al hacerlo recibía sanidad.
Quiero
que vea esto: la sanidad no era producida por la serpiente de bronce.
¡En
ninguna manera!
Pero
el que era mordido por una serpiente y salía para levantar sus ojos a la
serpiente, se estaba delatando a sí mismo. Estaba confesando que había pecado
contra el Eterno.
Así
que el acto de mirar la serpiente de bronce indicaba la confesión del pecado y
la confianza en el Elohim de Israel para que les sanara.
Tristemente
algunos siglos después de este evento, los hijos de Israel tomaron esta
serpiente como un símbolo de adoración hasta que el rey Ezequías la rompió en
pedazos para expresar así su rechazo de toda forma de idolatría y de perversión
pagana que confunde lo terrenal con lo celestial, el símbolo con lo simbolizado
(2 Reyes 18:4).
La
enseñanza aquí es muy hermosa. Los símbolos sagrados, los ritos, las
ceremonias, los memoriales son importantes y tienen su lugar, pero nunca
deberán ser objeto de adoración. Amen.
Sólo
El Eterno nuestro Adon es digno de recibir honra y gloria y adoración.
Yeshúa
usó este hecho histórico de mirar la serpiente de bronce indicando confesión
del pecado y la sanidad por medio de la fe para explicar su sacrificio
expiatorio sobre el madero del Gólgota.
Yeshua
dijo: “Como
Moisés levantó la serpiente en el desierto, así es necesario que el Hijo del
hombre sea levantado, para que todo aquél que en El cree no se pierda, más
tenga vida eterna”.
La
fe en Adonai para creer que al mirar la serpiente Adonai les sanaría, era la
preparación apropiada para que Israel pudiera levantar sus ojos al Mesías,
colgado en un madero, confiando que el Eterno les perdonaría en virtud de los
méritos del Mesías.
No
en virtud de los méritos de Avraham; aquéllos sirven solamente para bendiciones
temporales.
No
en virtud de los méritos del resto de los patriarcas; aquéllos sirven solamente
para bendiciones terrenales.
Pero
en virtud de los méritos de Yeshúa Ha-Mashiaj cuyas bendiciones son presentes y
eternas, terrenales y celestiales.
El primer acto
de fe trajo sanidad temporal, el segundo, sanidad ETERNA.
En Juan
3:14-16 está
escrito: “Y
como Moshé levantó la serpiente en el desierto, así es necesario que sea
levantado el Hijo del Hombre, para que todo aquel que cree, tenga en él vida
eterna. Porque de tal manera amó Eloah al mundo, que dio a su Hijo unigénito,
para que todo aquel que cree en él, no se pierda, más tenga vida eterna.”
El
hombre ha sido dañado por el veneno del pecado y está en el camino a la muerte
y la destrucción. La única solución para su supervivencia es que se fije en un
milagro y ponga su fe en El Eterno por medio de ese milagro. La palabra hebrea
que ha sido traducida como “asta”, “poste”, es “nes” que significa tanto
“poste” como “milagro” o “señal”. La muerte de Yeshúa fue un milagro y una
señal. El hijo del Hombre tenía que ser levantado de la misma manera que la
serpiente de bronce. El Eterno, Moshé y Yeshúa dieron a conocer de qué manera
el Mesías tenía que morir para salvar al pueblo de Israel y al mundo del pecado
y de la muerte eterna.
Yeshúa
se identifica con la serpiente de bronce. Una serpiente simboliza el carácter
del hasatán. El yetser hará, la mala inclinación, el pecado, de todos los
hombres, que hemos recibido desde el huerto de Edén al ser “mordidos” por la
serpiente antigua, fue introducido en Yeshúa para que pudiera ser condenado en
él por el Juez Supremo y los hombres ser liberados de la ira y el castigo
eterno que vino como una consecuencia de esa inclinación al mal, como está
escrito en Romanos 8:3:
“Pues
lo que la ley no pudo hacer, ya que era débil por causa de la carne, Eloah lo
hizo: enviando a su propio Hijo en semejanza de carne de pecado y como ofrenda
por el pecado, condenó al pecado en la carne.”
En Isaías 53:6,
11-12 está
escrito: “Todos
nosotros nos descarriamos como ovejas, nos apartamos cada cual por su camino;
pero Elohim hizo que cayera sobre él la iniquidad de todos nosotros...
11-12
Debido a la angustia de su alma, él lo verá y quedará satisfecho. Por su
conocimiento, el Justo, mi Siervo, justificará a muchos, y cargará las
iniquidades de ellos. Por tanto, yo le daré parte con los grandes y con los
fuertes repartirá despojos, porque derramó su alma hasta la muerte y con los
transgresores fue contado, llevando él el pecado de muchos, e
intercediendo por los transgresores.”
Cuando
las Escrituras hablan de EL pecado, en singular, se refiere a lo que el judaísmo
llama “yetser hará”, la inclinación al mal, que es sinónimo a la carne, que es
el carácter de hasatán. Cuando hablan de LOS pecados, en plural, se
refiere a los resultados de esa inclinación, los pensamientos, las palabras y
las obras que manan de esa naturaleza.
Yeshúa
llevó tanto el pecado como los pecados para liberar a todos los que por fe
ponen su mirada y su concentración fija en lo que él hizo cuando murió en el
madero.
En 1 Pedro 2:24 está escrito: “y él
mismo llevó nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero, a fin de
que muramos al pecado y vivamos a la justicia, porque por sus heridas fuisteis
sanados.”
En hebreos 9:28 está escrito: “así también el
Mesías, habiendo sido ofrecido una vez para llevar los pecados de
muchos, aparecerá por segunda vez, sin relación con el pecado, para salvación
de los que ansiosamente le esperan.” Yeshúa es la única solución final para el hombre, tanto Israelita como
no Israelita. Sin él nadie se escapa de la muerte eterna.
El
Eterno no dijo que Moshé hiciera una serpiente de bronce, sino “abrasadora”.
Las palabras hebreas para serpiente, “najash”, y
cobre, “nejoshet”, se parecen. Esto nos enseña que Moshé usó un juego de
palabras para cumplir la orden divina.
En 2 Reyes 18:4 está escrito: “Quitó los
lugares altos, derribó los pilares y cortó la Asherá. También hizo
pedazos la serpiente de bronce que Moshé había hecho, porque hasta aquellos
días los hijos de Israel le quemaban incienso; y la llamaban Nejushtán(cosa
de bronce).”
Los hijos
de Israel habían guardado la serpiente de bronce unos 700 años hasta el tiempo
del rey Jizkiyahu que finalmente la destruyó por el mal uso que se le había
dado. Este texto nos enseña que algo positivo, que fue dado por el Eterno para
la bendición del pueblo, puede convertirse en un culto idolátrico y una
maldición. De la misma manera se ha convertido la imagen de la muerte del
Mesías, e incluso la misma cruz, en un objeto de culto, que se adora, se canta
y se quema incienso y velas etc. Ese culto idolátrico a los crucifijos y a la
cruz es una abominación para el Eterno y serán hechos pedazos cuando venga el
Mesías Yeshúa de nuevo a la tierra.
4. La
Biblia que no entendemos
Miremos
bien: 2 "Esta es la ordenanza (Jukàt) de la Toráh.
En otras palabras,
El Eterno nos estaba profetizando:
“Esta es la
Toráh, que casi nadie podrá entender”
Cuando
hacemos un paneo sobre las religiones actuales, entenderemos que El Eterno
tenía toda la razón.
El mundo no
ha entendido la Toráh. El
mundo no ha entendido lo que la Biblia dice.
Y para
muestra, 4.500 “botones”.
4.500 religiones existentes en la actualidad.
Cada una de
ellas se proclama como los auténticos voceros del “Dios verdadero”.
De esas
4.500, algo más de 2.500 se proclaman cristianas, y estudiosas de la Biblia.
Cada una
tiene sus doctrinas que las diferencian de las demás.
Y la razón
de todo ese “maremágnum” y sancocho de religiones es una: “Nadie
entiende la Toráh, nadie entiende la Biblia”
Se me
vienen a la mente recuerdos de cuando recomiendan o recomendamos a alguien leer
y estudiar la Biblia.
La
respuesta más común que encontrábamos era y es:
“Leer y
estudiar la Biblia??????????yo no sé quién puede hacer eso.........un libro
bien gordo......más de 2.000 páginas ..........de letras pequeñitas..........y
para colmo si uno lo lee NO LO ENTIENDE!!!!!!!!!.”
Una prima
mia dijo; leer ese libro negro; me da miedo….
¿Y por qué
no se entiende la Biblia?
Porque
nadie sabe que es la Biblia, nadie sabe para qué sirve.
Y que
conste, que es el libro más leído en el mundo.
Pero la
inmensa mayoría de personas no entiende la Biblia.
La inmensa
mayoría de personas la ve como un libro religioso.
Y que pena
con los que piensan así, el Libro de Libros no tiene nada de religioso.
La Biblia
es un libro de historia.
Nos cuenta
la historia de la humanidad.
Lo que ha
pasado desde la fundación del mundo, lo que está pasando, y lo que pasará.
Y también
nos cuenta la historia de un pueblo: Israel
Desde
Bereshít / Génesis hasta Revelación / Apocalipsis, se narra la historia de la
humanidad, y la historia de Israel.
¿Qué
relación pueden tener las dos historias?
Sencilla y
llanamente, El Eterno le enseña a la humanidad acerca de Israel.
Para que
toda la humanidad se entere, conozca al pueblo de Israel.
Para que
conozca ese pueblo, al cual El Eterno quiere que toda la humanidad pertenezca.
Si es que
la humanidad quiere salvarse.
Mirando las
cosas desde ese punto de vista, entonces entenderemos pasukím / versículos como:
Romaním / Rom. 11: 26 “y todo Israel será salvo”
Yojanán / Jn. 4: 22 “la salvación viene de los
judíos”
Es
impresionante la ignorancia que se tiene de la Biblia.
Cuando
compramos un automóvil o un electrodoméstico, leemos con mucho cuidado el
manual de instrucciones.
¿Por qué lo
hacemos?
Porque le
encontramos sentido.
Porque
sabemos que de acuerdo a lo que aprendamos en el manual, así será el provecho
que le saquemos al aparato que acabamos de adquirir.
Como no le
encontramos sentido a estudiar la Biblia, entonces nos la pasamos leyendo o
estudiando pasajes sin ningún orden.
Hoy nos dio
la gana de estudiar Mishlé / Proverbios.
Mañana
estudiamos Yshayahu / Isaías.
Pasado
mañana los Tehilím / Salmos.
Y en la
comunidad donde asistimos vamos a comenzar un estudio acerca de Revelaciones /
Apocalipsis.
¿Como vamos
a entender la Biblia así?
Y que decir
cuando nos enseñan que debemos estudiar solamente el Brit Hadashá / Pacto
Renovado, mal llamado Nuevo Testamento?
Cuando
vamos a entender que es un solo libro desde Bereshít / Génesis hasta Revelación
/ Apocalipsis?
Y pensar
que El Eterno nos dejó pistas, para que nunca se nos ocurriera pensar que son
dos libros diferentes.
Pero no
vemos esas pistas, y por eso no entendemos la Biblia.
¿De qué
pistas estamos hablando?
Hay varias:
¿Si el mal llamado Antiguo Testamento fue escrito por judíos y el mal llamado
Nuevo Testamento también, eso no nos debe poner a pensar que todo hace parte de
un mismo libro?
Miremos
otra.......
Matitiahu
/ Mat. 1:1 1 Esta es la genealogía de Yeshúa Ha Mashíaj, hijo de David, hijo de
Avraham: 2 Avraham fue el padre de Yitzjak, Yitzjak fue el padre de Yaakov, Yaakov
fue el padre de Yehudáh y sus hermanos, 3 Yehudáh fue el padre de Peretz y
Zeraj (su madre fue Tamar), Peretz fue el padre de Hetzron, Hetzron fue el
padre de Ram, 4 Ram fue el padre de Amminadav, Amminadav fue el padre de
Najshon, Najshon fue el padre de Salmon, 5 Salmon fue el padre de Boaz (su
madre fue Rajav), Boaz fue el padre de Oved (su madre fue Rut), Oved fue el
padre de Yishai, 6 Yishai fue el padre del rey David, David fue el padre de
Shlomó (su madre fue la mujer de Uriyah), 7 Shlomó fue el padre de Rejaveam, Rejaveam
fue el padre de Aviyah, Aviyah fue el padre de Asa, 8 Asa fue el padre de
Yehoshafat, Yehoshafat fue el padre de Yoram, Yoram fue el padre de Uziyah, 9
Uziyah fue el padre de Yotam, Yotam fue el padre de Ajaz, Ajaz fue el padre de
Hizkiyah, 10 Hizkiyah fue el padre de Menasheh, Menasheh fue el padre de Amón, Amón
fue el padre de Yoshiyah,11 Yoshiyah fue el padre de Yejanyah y sus hermanos en
el tiempo del exilio a Bavel. 12 Después del exilio Babilónico, Yejanyah fue el
padre de Shealtiel, Shealtiel fue el padre de Zerubavel, 13 Zerubavel fue el
padre de Avihud, Avihud fue el padre Avner, Avner fue el padre de Elyakim, Elyakim
fue el padre de Azur, 14 Azur fue el padre de Tzadok, Tzadok fue el padre de
Yajin, Yajin fue el padre de Elijud, 15 Elijud fue el padre de Eleazar, Eleazar
fue el padre de Mattan, Mattan fue el padre de Yaakov. 16 Yaakov fue el padre
de Yosef, el esposo de Miryam, de quien nació Yeshúa, quien fue llamado el
Mashíaj.
¿¿¿¿No nos
dice nada????
El Brit
Hadashá / Pacto Renovado comienza con la genealogía de Yeshúa, nombrando sus
antepasados hebreos, judíos, israelitas.
El Brit
Hadashá comienza así, para hacernos saber que es CONTINUACIÓN de la Tanák –mal
llamado Antiguo Testamento-.
El
enemigo –ha-satán-, ha querido que la humanidad desvincule a Israel de los
planes del Eterno. Para que la humanidad no tenga ningún referente donde buscar
salvación. Con ese propósito, se les cambiaron los nombres a los personajes
bíblicos. Se quitaron los nombres hebreos, y se pusieron nombres al antojo de
cada idioma.
En
otras palabras, se des judaizaron las Sagradas Escrituras.
Hasta
al nombre del Libro Sagrado se le metió la mano, para desdibujar su razón de
ser.
Se
le llamó Biblia, tomado del griego Biblos, que únicamente significa: Libros.
.
Pero Torah; significa: Instrucción, enseñanza.
¿Instrucciones
para qué?
Instrucciones
para la vida, para saber cómo debemos vivir en esta tierra.
Yehoshúa
/ Jos. 1: 7 Solamente sé fuerte y muy valiente en tener cuidado de seguir toda
la Toráh que Moshe mi siervo te ordenó a seguir; no te vuelvas de ella ni a la
derecha ni a la izquierda; entonces tendrás éxito donde quiera que vayas. 8 Sí,
guarda este libro de la Toráh en tus labios, y medita en él día y noche, para
que tengas cuidado de actuar conforme a todo lo escrito en él. Entonces tus
empresas prosperarán, y tú tendrás éxito.
Pero no, no
entendemos, y cada uno saca su doctrina.
“El Antiguo
Testamento ya no” “La ley ya no”
Conceptos
que salen de una mente que desconoce el plan makro del Eterno, para Israel y
para la humanidad.
Porque
leemos y estudiamos a pedazos.
Sin ningún
orden.
No tenemos
en cuenta ni siquiera la enseñanza del Brit Hadashá al respecto:
Matitiahu
/ Mat. 5 :17 "No piensen que he venido a abolir la Toráh o los Profetas.
He venido, no a abolir, sino a completar. 18 ¡Sí, en verdad! Les digo que hasta
que pasen el cielo y la tierra, ni una iod, ni una virgulilla pasarán de la
Toráh; no hasta que lo que tenga que suceder, suceda. 19 De manera que
cualquiera que desobedezca el menor de estos mitzvot, y enseñe así a otros,
será llamado el menor en el Reino del YHVH. Pero cualquiera que los obedezca y
así enseñe será llamado grande en el Reino de YHVH. 20 ¡Porque les digo que si
su justicia no es mucho mayor que la de los maestros de la Toráh y los
Perushim, de ningún modo entrarán en el Reino del YHVH!
Encontrémosle
el sentido a la Torá, no es tan difícil.
Comencemos
con estudiarla en orden, y con entendimiento.
Así
saldremos de tanta mentira.
Y al
hacerlo así, lo mejor será conocer al Eterno como Él es.
Entender cuál
es Su plan, y que parte nos toca hacer a nosotros.
Miremos
como se estudiaba la Toráh en tiempos antiguos:
Nehemyáh
/ Neh. 8:9 Ezra el Kohen trajo la Toráh ante la asamblea, la cual consistía en
hombres, mujeres y todos los niños suficientemente grandes
para entender. Era
el primer día del séptimo mes. 8 Ellos leyeron claramente del rollo, en la
Toráh de Elohim, lo traducían, y los habilitaban para entender el sentido de lo
que se estaba leyendo.
Los dejo con un pasaje que resume todo lo que
estamos estudiando:
Yrmiyáh / Jer. 9 : 22(23) Aquí está lo que YHVH
dice: "El sabio no debe jactarse de su sabiduría, el poderoso no debe
jactarse de su poder, el rico no debe jactarse de sus riquezas; 23(24) más
bien, el ostentador que se jacte en esto: que él me entiende y me conoce – que
Yo soy YHVH, practicando la misericordia, justicia y rectitud en La Tierra; porque
en estas cosas me complazco," dice YHVH.
ABBA KADOSH.
Te
damos gracias por permitirnos compartir una vez más tu bendita Torah y
colocamos bajo tu cuidado a todos los miembros de esta tu kehila; pidiéndote
seas propicio a cada uno y cubras toda necesidad. Te pedimos que nuestros
labios destilen miel y nunca veneno; para que el dulce de tu Torah, lo podamos
compartir no solo entre nosotros mismos, sino con todos los que lo necesitan. Bendícenos
con amor y justicia. En el nombre de yeshua.
Amen.
bet Amen.
¡Shabat
Shalom!
Recopilado por. Orlando
Unda Ramirez.