Parashá 19 Terumá
Éxodo 25:1 – 27:19
Para
compartir en el Shabat del 2 de Adar del
5778 (Feb 17 de 2.018)
Aliyás de la Torá:
1.
25:1-16
2.
25:17-30
(Sefardíes); 25:17-40 (Ashkenazíes)
3.
25:31 –
26:14 (S); 26:1-14 (A)
4.
26:15-30
5.
26:31-37
6.
27:1-8
7.
27:9-19
Haftará: 1 Reyes 5:12 (26 heb.) – 6:13
Código
Real (HaTsofen HaMaljutí): Lucas
15:1 – 18:14
TERUMÁ
Significa
“ofrenda alzada”, “porción separada”. DE LA RAIZ RUM: ALTURA, ELEVACION,
ORGULLO. Y LA PALABRA RAM: ELEVADO.
Primera
aliyá, 25:1-16
El Eterno pide que los hijos
de Israel hagan una ofrenda para él, todos los que tienen un corazón motivado
podrá dar oro, plata, cobre, lana, lino, pieles, madera, aceite, especias y
piedras preciosas para poder construir una morada para el Eterno. Tendrán que
hacer un santuario según el modelo que el Eterno muestre a Moshé. El arca será
hecha de madera cubierta de oro, de dos codos y medio de longitud, un codo y
medio de ancho y un codo y medio de altura. Tendrá una diadema de oro alrededor
y cuatro anillos de oro en las cuatro esquinas. Dos varas de madera cubiertas
de oro se pondrán en los anillos para poder transportarla. Dentro del arca se
pondrá el Testimonio.
Segunda aliyá, 25:17-30
Hay que hacer una cubierta de oro con dos querubines de oro colocados
en los dos extremos encima con sus dos alas extendidas hacia arriba y sus
rostros de frente el uno del otro y hacia la cubierta. La cubierta tendrá que
colocarse encima del arca. Allí el Eterno fijará cita con Moshé para hablarle
de encima de la cubierta.
También hay que hacer una mesa de acacia recubierta de oro, de dos
codos de longitud, un codo de ancho y un codo y medio de altura. Tendrá un
bastidor de oro alrededor con una diadema de oro y cuatro anillos de oro en las
esquinas donde se pondrán dos varas de madera cubiertas de oro. La mesa tendrá
platillos, cucharones tubos y soportes, todos de oro. Encima de la mesa habrá
que colocar el pan de semblantes.
Tercera aliyá, 25:31 – 26:14
El candelabro se hará de oro
puro, todo batido, con base, caño, cálices botones y flores. Tendrá seis brazos
que saldrán de sus lados, tres en cada lado, con tres cálices, un botón y una
flor en cada uno. Todo será de una pieza. Tendrá siete lámparas que serán
encendidas por el kohén hacia delante. Sus tenazas y paletas serán de oro puro.
Todo será hecho de un talento de oro, según el modelo que le es mostrado a
Moshé en la montaña.
El techo del tabernáculo se hará de diez cortinas de lino trenzado,
lana azul, lana púrpura y lana carmesí, con querubines de labor de diseñador.
Cada cortina tendrá 28 codos de longitud y cuatro codos de anchura. Cinco
cortinas serán unidas entre ellas y las otras cinco entre ellas. En cada uno de
los bordes de los dos ensamblajes habrá que poner 50 lazadas de lana azul
contrapuestas entre ellas. Se harán 50 ganchillos de oro para unir las cortinas
entre ellas.
Hay que hacer 11 cortinas de vellocino de cabra a modo de tienda sobre
el tabernáculo. Cada cortina será de 30 codos de longitud y cuatro codos de
ancho. Cinco cortinas serán unidas entre ellas y seis entre ellas. La sexta
cortina será doblada hacia el frente de la tienda. Cincuenta lazadas serán
puestas en el borde de cada primera cortina de los dos ensamblajes. Se harán 50
ganchillos de cobre que serán insertados en las lazadas para unir la tienda.
Los sobrantes colgarán por los costados del tabernáculo para cubrirlo.
Se hará una cobertura de pieles de carnero teñidas de rojo y una
cobertura de tejashim por encima.
Cuarta aliyá, 26:15-30
Se harán maderos para el
tabernáculo de acacia, de diez por un codo y medio. Cada madero tendrá dos
espigas paralelas una con otra. En el lado sur habrá 20 maderos con 40 basas de
plata. Lo mismo se hará para el lado norte. Para la parte posterior del
tabernáculo, al oeste, habrá seis maderos y dos maderos en las esquinas, cada
madero con sus dos basas. En las puntas serán acoplados entre ellos con
anillos. Habrá cinco barras de madera para cada lado para unir los maderos, una
de ellas pasará por en medio de los maderos de un extremo a otro. Los maderos y
las barras tendrán que ser recubiertos de oro. El tabernáculo será levantado
según al diseño que Moshé reciba en la montaña.
Quinta aliyá, 26:31-37
Hay que hacer un velo de lana
azul, lana púrpura, lana carmesí y lino trenzado con querubines de labor de diseñador.
Cuatro pilares de acacia cubiertos de oro puestos sobre cuatro basas de plata
sujetarán el velo con cuatro ganchillos de oro. Dentro del velo, que separará
entre el lugar santo y el lugar santísimo estará el arca. La cubierta se
colocará sobre el arca. La mesa será colocada fuera del telón en el lado norte
y el candelabro frente a la mesa, en el lugar sur.
Se hará una pantalla para la
entrada de la tienda, de lana azul, lana púrpura, lana carmesí y lino trenzado,
de labor de recamador. La pantalla colgará sobre cinco ganchillos en cinco
pilares de madera de acacia recubiertas de oro y con cinco basas de cobre.
Sexta aliyá, 27:1-8
Hay que hacer un altar de
madera, hueco y recubierto de cobre, de cinco por cinco codos con una altura de
tres codos. Cada esquina tendrá un cuerno. Se harán vasijas para deshollinarlo,
badiles, escudillas, garfios y braseros, todos de cobre. Debajo de la cornisa,
a la mitad del altar, hay que hacer un enrejado de cobre con cuatro anillos de
cobre en las cuatro esquinas donde se colocarán las varas para transportarlo.
Se hará conforme a lo que se le mostró a Moshé en la montaña.
Séptima aliyá, 27:9-19
El atrio tendrá cortinas de lino trenzado de 100 codos en los lados
sur y norte sujetadas con 20 pilares de cobre con veinte basas de cobre. Los
ganchillos y cinturillas de los pilares serán de plata. El lado oeste del atrio
tendrá cortinas de 50 codos, sujetadas con diez pilares sobre diez basas. El
lado este será de 50 codos, con 15 codos de cortinas por uno y otro lado, sujetadas
con tres pilares sobre tres basas. El portal del atrio tendrá una pantalla de
20 codos de lana azul, lana púrpura, lana carmesí y lino trenzado, de labor de
recamador y sujetada por cuatro pilares sobre cuatro basas. Todos los pilares
tendrán cinturillas de plata, ganchillos de plata y basas de cobre. La
altura del atrio será de cinco codos y todos sus utensilios serán de cobre.
“UNA SOLA BARRA DE ORO.”
Un Rabino en una comunidad pequeña,
a menudo le llama gente de la congregación, que tiene que recitar el Kadish,
para que los ayude a juntar gente para el Minian. Antes de aceptar esto,
siempre les pide que primero reúnan a sus amigos. Dice el Rabino: A menudo
reclutan uno o dos amigos, y el resto me lo dejan a mi, lo cual me hace pensar
¿para qué me molesto en pedir ayuda?
La misma pregunta se podría
formular sobre Di-s durante un episodio curioso que se produjo en la
construcción del miskan-Tabernáculo y su candelabro de oro. Di-s describe el
intrincado diseño Moisés, pero éste no lo entiende. Di-s lo explica nuevamente,
hace un dibujo e incluso se ofrece para ayudar a construirlo, pero todo era en
vano. Al final, Moisés echa el oro en el fuego y el candelabro surge
milagrosamente.
Di-s debió haber sabido que lo iba a construir Él mismo, entonces ¿por
qué le pidió a Moshé que lo construya?
Entendiendo el diseño
Una simple pregunta es: ¿qué
era tan complicado en el diseño, que Di-s, el más grande maestro, no pudo hacer
que Moshé entendiera? La verdad es que Moshé entendió perfectamente. Había
siete brazos y cuarenta y nueve adornos. Lo que él no comprendía era por qué
estos componentes separados debían ser armados a partir de un solo bloque de oro. La
idea de que la pluralidad y singularidad pueden unirse y desafía la lógica
humana. La
mística enseñó que estos siete brazos y cuarenta y nueve adornos corresponden a
los siete días de la semana y los cuarenta y nueve días que hay entre Pesaj,
cuando nuestros antepasados fueron redimidos de Egipto, y Shavuot, día que
recibimos la Torá en Sinai. La Torá
nos ordenó que contemos los días de estas siete semanas. Siete semanas son
cuarenta y nueve días, pero en otro versículo aparece la instrucción de contar
cincuenta días. ¿Cómo podemos contar cincuenta días en un período de cuarenta y
nueve días? La mística nos dice que el día cincuenta fue contado por Di-s
cuando nos dio la Torá.
Mas allá del entendimiento humano
Para recibir la Torá se requieren cuarenta y nueve pasos de preparación. Sólo al completar estos cuarenta y nueve pasos somos dignos de recibir el paso número cincuenta, la Torá, que Di-s nos concede desde arriba.
Cada ley en la Torá es de gran complejidad y es por esto que puede ser entendida desde cuarenta y nueve perspectivas diferentes. Requiere tremenda diligencia para comprender e internalizar dicha profundidad. Es necesario el crecimiento día a día para llegar a la más alta sabiduría accesible para la mente humana. El día cuarenta y nueve representa esta petición.
Hay otro elemento en la Torá que está más allá de nuestro entendimiento intelectual: Di-s, su autor. La información de la Torá puede ser comprendida intelectualmente, pero para conectarse con su autor es necesaria la humildad.
Para recibir la Torá se requieren cuarenta y nueve pasos de preparación. Sólo al completar estos cuarenta y nueve pasos somos dignos de recibir el paso número cincuenta, la Torá, que Di-s nos concede desde arriba.
Cada ley en la Torá es de gran complejidad y es por esto que puede ser entendida desde cuarenta y nueve perspectivas diferentes. Requiere tremenda diligencia para comprender e internalizar dicha profundidad. Es necesario el crecimiento día a día para llegar a la más alta sabiduría accesible para la mente humana. El día cuarenta y nueve representa esta petición.
Hay otro elemento en la Torá que está más allá de nuestro entendimiento intelectual: Di-s, su autor. La información de la Torá puede ser comprendida intelectualmente, pero para conectarse con su autor es necesaria la humildad.
El día cincuenta, aquel que
sólo Di-s puede contar, representa el aura Divina del autor de la Torá. Este es
un elemento que no puede ser contado por nosotros mismos, nunca lo vamos a
entender. Pero si
contamos por cuarenta y nueve días, aplicando las cuarenta y nueve perspectivas
de la Torá, entonces Di-s nos concederá la perspectiva número
cincuenta desde arriba.
Cuando llegamos a ese día, adquirimos una perspectiva totalmente nueva. Luego nos damos cuenta de que las cuarenta y nueve perspectivas no son exclusivas entre sí, de hecho, todas fluyen de una base común, un solo núcleo de sabiduría Divina que brilla a través de un prisma de cuarenta y nueve colores. No podemos llegar a esta sabiduría por nuestra cuenta, la recibimos de Di-s, que nos la otorga desde arriba.
Transformándonos en un recipiente
Si la meta del estudio de la Torá es conectarnos con su Autor, y dicha conexión nunca puede ser concebida por nosotros mismos sino que se nos otorga desde arriba, entonces ¿por qué debemos estudiar Torá? Dejemos que Di-s nos la conceda desde arriba!. En otras palabras,¿ qué logran los cuarenta y nueve pasos que nosotros damos si todo cae bajo la llegada del cincuenta?
Si la meta del estudio de la Torá es conectarnos con su Autor, y dicha conexión nunca puede ser concebida por nosotros mismos sino que se nos otorga desde arriba, entonces ¿por qué debemos estudiar Torá? Dejemos que Di-s nos la conceda desde arriba!. En otras palabras,¿ qué logran los cuarenta y nueve pasos que nosotros damos si todo cae bajo la llegada del cincuenta?
Nos convierte en recipientes. Di-s no quiere académicos, quiere estudiantes. Él no quiere grandes maestros, sino almas elevadas, tampoco nuestra profunda comprensión, sino nuestro trasformado carácter.
El propósito de Di-s es que nos convirtamos en recipientes y conductos para su santidad, y que hagamos las cosas que se aplican a nosotros. El esfuerzo, el anhelo, la desesperación y el deseo sincero hacia Di-s es lo que hace que el ego se transforme en un recipiente. Esto se logra durante el día cuarenta y nueve. Cuando debemos estar listos para recibir la luz Divina (dabar – Verbo)
LA ELEGANCIA DE LA SINGULARIDADA
.Los cuarenta y nueve adornos
del candelabro eran hermosos y significativos. Sus formas, simetría, profundo
significado y valor metafórico, inspiraron a Moshe a una gran pasión. Cada uno
era significativo, cada uno contribuía y merecía su propio lugar.
“¿Por qué todos tenían que ser martillados en una sola barra de oro?”
se lamentó su alma. “¿Por qué manchar su distintiva belleza a través de la
uniformidad rígida de una sola barra de oro?”. Los adornos eran excepcionales y
Moshé estaba afligido por un pluralismo que sentía que debería ser demostrado.
Pluralismo y singularidad son dos polos opuestos que sólo Di-s puede unir. Moshé entendió los cuarenta y nueve adornos, pero la única pieza de oro era el secreto del cincuenta, un secreto que únicamente Di-s puede entender.
Ninguna explicación pudo hacer que Moshé lo entendiera, sin embargo Di-s se lo explicó y él quiso comprenderlo una y otra vez. Esta diligencia fue el sello verdadero de Moshe y en su mérito se transformó en el conducto de Di-s para transmitir la luz del candelabro y la Torá.
Es por esto que le debemos pedir a la gente que junte a sus amigos para el Minian. Puede ser que no junten muchos, pero sé que sus esfuerzos los ayudarán a apreciar y/o identificarse con el significado de la plegaria y el Minian. ¿Quién sabe? Hasta pueden llegar a responder con entusiasmo la próxima vez que sean ellos los llamados.
Por Lazer Gurkow
ANALOGIAS POR: YIRMIYAHU BEN YISRAEL Shemot 25:2 “Di a los hijos de
Israel que tomen una ofrenda para mí; de todo aquel cuyo corazón le mueva a
hacerlo, tomaréis mi ofrenda.” – Esta ofrenda es llamada “terumá”,[1] que no es fácil traducir, significa
“donación”, “don”, “dádiva”, “presente”, “regalo”, “contribución”, “aporte”,
“tributo”, “ofrenda”. Viene de la raíz “rum”[2] que significa “alzar”, “elevar”.
Tiene que ver con algo que se levante para separar del resto. La misma palabra
se usa para la ofrenda que se da al sacerdote de los productos agrícolas antes
de dar el diezmo. Pero ese no es su sentido en este texto. Se puede entender
como una porción separada que se “eleva” como ofrenda para un uso sagrado.
Los diezmos son una obligación pero las ofrendas son voluntarias,
(excepto las prescritas para las fiestas del Eterno). Por esto sólo los que tienen
un corazón alegre pueden dar a esta obra de la construcción del tabernáculo. De
esta manera el tabernáculo es una extensión de los corazones del pueblo, donde
el Eterno desea morar, como está escrito en 2 Corintios 9:7:
“Que cada uno dé como propuso en su corazón, no de mala gana ni
por obligación, porque Eloha ama al dador alegre.”
En 2 Corintios 6:16-18 está escrito:
“¿O qué acuerdo tiene el templo de Eloha con los ídolos? Porque
nosotros somos el templo del Eloha vivo, como Eloha dijo: HABITARE EN ELLOS, Y
ANDARÉ ENTRE ELLOS; Y SERÉ SU DIOS, Y ELLOS SERÁN MI PUEBLO. Por tanto, SALID
DE EN MEDIO DE ELLOS Y APARTAOS, dice el Señor; Y NO TOQUÉIS LO INMUNDO, y yo
os recibiré. Y yo seré para vosotros padre, y vosotros seréis para mí hijos e
hijas, dice el Señor Todopoderoso.”
25:3 “Y esta es la ofrenda que tomaréis de ellos: oro, plata y
bronce” – Lo primero que pide el Eterno es oro, lo más precioso. Según Génesis
2:12 el oro es bueno. La Torá del Eterno está diciendo que el oro es bueno. Así
que el oro tiene valor porque la Torá le da valor. Ahora los corazones
voluntarios tienen la oportunidad de entregar lo más precioso al Eterno. Esta
es la razón por la que los hijos de Israel tuvieron que pedir los tesoros de
Mitsrayim antes de salir, porque sus riquezas eran necesarias para poder
construir esta obra del Eterno.
La ofrenda para la obra del
Eterno no se da en secreto. ¿Cómo entonces se va a entender la palabra del
Mesías en Mateo 6:1-4? Allí está escrito:
“Cuidad de no practicar
vuestra justicia delante de los hombres para ser vistos por ellos; de otra
manera no tendréis recompensa de vuestro Padre que está en los cielos. Por eso,
cuando des limosna, no toques trompeta delante de ti, como hacen los hipócritas
en las sinagogas y en las calles, para ser alabados por los hombres. En verdad
os digo que ya han recibido su recompensa. Pero tú, cuando des limosna, que no
sepa tu mano izquierda lo que hace tu derecha, para que tu limosna sea en
secreto; y tu Padre, que ve en lo secreto, te recompensará.”
“EL SACRIFICIO DE UN HOMBRE PARA LA REDENCION DE UN PUEBLO, AUN MAS
PARA LA REDENCION DE TODOS LOS PUEBLOS”.
“EL MISHKAN MOSTRADO A MOSHE SOMBRA DE LO QUE HA DE VENIR
Y SE POSARA EN LA TIERRA EN EL MILENIO”
“MASHIAJ PRIMICIA DE LA RESURECCION, QUIEN FUE ELEVADO Y APARTADO”
LEER JUAN :20: 16-17, LEER JUAN:20:19-23, LEER:JUAN: 26-28,LEER
HECHOS:1:1-11,
“MASHIAJ , EL CAMINO, LA VERDAD, Y LA VIDA” LEER JUAN:14:1-14,
“MASHIAJ EL DEVAR LA PALABRA Y LA VID VERDADERA” LEER JUAN:15:1-15,
LEER COLOSENSES 1:15-23,LEER APOCALIPSIS 1:9-15,
LEER APOCALIPSIS 20:11-15,
LEER APOCALIPSIS 21:1-12.
“EL MASHIAJ VINO COMO TERUMAH. Y LA MENORA ENCENDIDA, QUE FUE
MARTILLADA Y ADORNADA PARA RESPLANDECER Y QUE SE VERA BRILLAR
CON TODO SU EXPLENDOR Y EL PODER DEL ETERNO EN LA NUEVA JERUSALEM.”
“ QUERIDA KEILAH, ENTENDAMOS Y COMO MASHIAJ SEAMOS TERUMAH.”
¡SHABAT SHALOM.!
Preparado por: YIRMIYAHU BEN YISRAEL
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