Parashá 37 Shelaj
Lejá
Parashá 37
Shelaj Lejá/Envia tu/Números 13:1 –
15:41
PARA SER COMPARTIDA EN EL SHABAT DEL 23 SIVAN 5784 / 29 JUNIO
2024
Primera
aliyah, 13:1-20
Segunda
aliyah, 13:21 – 14:7
Tercera
aliyah, 14:8-25
Cuarta
aliyah, 14:26 – 15:7
Quinta
aliyah, 15:8-16
Sexta
aliyah, 15:17-26
Séptima
aliyah 15:27-41
Haftará:
Josué 2:1-24
Brith
Hadasha: Juan 7:1-8:47; (Hebreos
3:7-19)
1ª, Aliyah 7:13
2ª. Aliya 7:14-39
3ª. Aliyah 7:40-8:6
4ª. Aliyah 8:7-28
5ª. Aliyah 8:29-47
Shelaj
lejá significa “envía tú”(envía por tu cuenta o sigue por tu cuenta).
Primera aliyah, 13:1-20
13:3 “Tú mismo envía hombres a fin de
que reconozcan la tierra de Kenáan, que voy a dar a los hijos de Israel;
enviarás un hombre de cada una de las tribus de sus padres, cada uno de ellos
jefe entre ellos.” – Las primeras
palabras hebreas de esta oración “shelaj lejá” significan literalmente “envía
para ti” o “envía por ti”. La idea de enviar espías no venía de El Eterno o de
Moshé, sino del pueblo, como está escrito en Deuteronomio 1:22-23:
“Entonces todos
vosotros os acercasteis a mí, y dijisteis: "Enviemos hombres delante de
nosotros, que nos exploren la tierra, y nos traigan noticia del camino por el
cual hemos de subir y de las ciudades a las cuales entraremos." Y me
agradó el plan, y tomé a doce hombres de entre vosotros, un hombre por cada
tribu.”
13:4 “Y estos eran sus nombres: de
la tribu de Reuvén, Shamúa, hijo de Zajur” – En esta lista otra vez Reuvén está mencionado como el primogénito.
13:6 “de la tribu de
Yehudá, Calev, hijo de Yefuné” – Calev fue hijo de Jezrón, hijo de Perets, hijo de Yehudá, cf. 1
Crónicas 2:3-5, 18. Calev representaba la tribu de Yehudá. Pero ¿por qué fue
llamado cenezeo (heb “kenizí”), como está escrito en Números 32:12; Josué 14:6, 14: Calev, hijo de
Yefuné cenezeo”?
En Génesis 36:11
se habla de un tal Kenaz (Cenaz) que era hijo de Elifaz, hijo de Esav, pero la
pregunta es si Calev tenía algo que ver con él. Rashí cita el Midrash que dice que Calev era hijo
adoptivo de Kenaz y que la madre de Caleb dio a luz a Otniel para Kenaz. Según
Radak después de haber muerto Yefuné, su viuda se casó con Kenaz, de quien dio
a luz Otniel. Por esto Otniel y Kalev eran medio hermanos por parte materna.
Según Aryeh Coffman, Calev se crió en casa de Kenaz, y por esto es llamado
“kenizí” (cenezeo) que es un sobrenombre derivado del Kenaz.
En Josué 15:17 está escrito:
“Y Otniel, hijo de Kenaz,
hermano de Calev, la tomó, y él le dio a su hija Ajsá por mujer.”
Esto nos enseña que la
Torá habla de dos hombres diferentes con el nombre Kenaz, un edomita y un
israelita. La herencia tribal y la herencia de la tierra de Israel vienen por
la vía paterna. Así que si Calev hubiera sido descendiente directo de Kenaz,
nieto de Esav, no podría tener ninguna identidad tribal y por lo tanto no
podría representar la tribu de Yehudá. Calev tenía un espíritu muy hermoso. Su
nombre significa “como el corazón” (LEV).
Hacía las cosas de
corazón y entrega al Eterno. Junto con Yehoshúa fue el único de todos los que
fueron contados de los que salieron de Mitsrayim, que entró en la tierra
prometida. Esto nos habla de la entrega del corazón de este hombre. Calev tenía
40 años en el momento de ser enviado como explorador.
Según Josué 14:10-11, donde
está escrito: “Y ahora, he aquí, El Eterno me ha permitido vivir, tal como
prometió, estos cuarenta y cinco años, desde el día en que Adonay habló estas
palabras a Moshé, cuando Israel caminaba en el desierto; y he aquí, ahora tengo
ochenta y cinco años. Todavía estoy tan fuerte como el día en que Elohim me envió; como
era entonces mi fuerza, así es ahora mi fuerza para la guerra, y para salir y
para entrar.”
Calev es un ejemplo de un
hombre que sirvió a El Eterno de corazón y habló desde un corazón entregado
aunque todos los demás fueron infieles. ¡Seamos como él!
“a Hoshéa, hijo de Nun, Moshé lo llamó Yehoshúa” – Moshé tuvo la revelación del
Mesías Yeshúa, como está escrito en Juan 5:46:
“Porque si creyerais a Moshé, me creeríais a mí, porque de mí escribió él.”
El Eterno reveló a Moshé
el nombre del Mesías que iba a venir, en su forma antigua y amplia. De esa
manera este explorador Yehoshúa hijo de Nun constituye una figura profética del
Mesías.
- Su nombre es el mismo
que el del Mesías.
- Fue
un siervo fiel a Moshé en todo momento, al igual que el Mesías.
- Tomó
el lugar de Moshé, el Mesías iba a ser como Moshé.
- Fue
el que introdujo al pueblo en la Tierra prometida, como el Mesías va a
introducir a los
Fieles en el reino venidero.
- Él cruzó el río Yardén
ileso, simbolizando la muerte y la resurrección. Amen.
Yehoshúa vino de la tribu de
Efrayim, hijo de Yosef. Por esto hay otra señal de que el Mesías tenía que ser
hijo de Yosef de manera profética y cumplir el papel del Mesías sufriente para
luego ser levantado en alto, al igual que Yosef en Mitsrayim. Al mismo tiempo
vemos aquí una conexión interesante entre el Mesías y la tribu de Efrayim que
representa a las tribus dispersas y perdidas de Israel. El Mesías tiene el
papel de representar y restaurar esas tribus perdidas. Además vemos que el
nombre Yehoshúa significa que El Eterno es el que salva, como está escrito
en Isaías 43:11: “Yo, yo soy
Elohim, y fuera de mí no hay salvador.”
En Isaías 45:21 está escrito: “Declarad y presentad
vuestro caso; sí, que deliberen juntos: ¿Quién ha anunciado esto desde la
antigüedad y lo ha declarado desde entonces? ¿No soy yo, Adonay? No hay más
Eloah que yo, un Eloah justo y salvador; no hay ninguno fuera de mí.”
En Oseas 13:4 está escrito: “Más yo he sido El Eterno
tu Eloah desde la tierra de Mitsrayim; no reconocerás a otro eloah fuera de mí,
pues no hay más salvador que yo.”
En 1 Timoteo 1:1 está escrito: “Pablo, shaliaj
del Mesías Yeshúa por mandato de Eloah nuestro Salvador, y del Mesías Yeshúa
nuestra esperanza”
En 1 Timoteo 2:3 está escrito: “Porque esto es bueno y
agradable delante de Eloah nuestro Salvador”
Si Elohim, el
Padre Eterno, es el único Salvador, ¿cómo es que ahora un hombre, Yeshúa recibe
el título de salvador, como está escrito en Lucas 2:11: “porque os ha nacido hoy, en la ciudad
de David, un Salvador, que es el Adón Mesías.”?
En Juan 4:42 está escrito: “decían a la mujer: Ya no
creemos por lo que tú has dicho, porque nosotros mismos le hemos oído, y
sabemos que éste es en verdad el Salvador del mundo.”
La respuesta es
que El Eterno es el que salva por medio de sus agentes. Noaj fue un salvador
del mundo en su tiempo. Moshé fue un salvador en su tiempo. La reina Ester fue
una salvadora en su tiempo, cf. Abdías 21. Pero ninguno de ellos podía liberar
al hombre del pecado y de la muerte.
Por lo tanto
Yeshúa HaMashiaj es el salvador de Israel y el mundo por excelencia, enviado
por el Padre precisamente con el fin de salvarnos de nuestros pecados y todas
sus consecuencias desastrosas.
En Hechos 5:31 está escrito: “A éste Eloah exaltó a su
diestra como Príncipe y Salvador, para dar arrepentimiento a Israel, y perdón
de pecados.”
En Hechos 13:23 está escrito: “De la descendencia de
éste, conforme a la promesa, Dios ha dado a Israel un Salvador, Yeshúa.”
En 1 Juan 4:14 está escrito: “Y nosotros hemos visto y
damos testimonio de que el Padre envió al Hijo para ser el Salvador del mundo.”
Yehoshúa entró
en la tierra dos veces durante su vida. La primera vez solamente fue una visita
de 40 días para explorar la tierra. La segunda vez fue con la fuerza para
conquistarla y sujetarla al Reino de los cielos. De la misma manera, cuando
estuvo el Mesías en la tierra de Israel la primera vez, su visita duraba sólo
unos años y no usó la fuerza bélica para implantar el Reino. Pero cuando vuelva
por segunda vez, vendrá como líder de todos los ejércitos celestiales para
establecer definitivamente el Reino de Eloah en la tierra de Israel y el mundo
entero.
Segunda aliyah, 13:21 – 14:7
13:25 “Y
volvieron de reconocer la tierra al cabo de cuarenta días” – Según el Midrash, la noche
en que volvieron fue el día 9 del mes de Av, el quinto mes, el mismo día cuando
los hijos de Israel habían empezado el culto al becerro de oro. Esa noche El
Eterno juró que los hijos de Israel iban a ser dispersados entre las naciones,
como está escrito en el Salmo 106:24-27:“Aborrecieron la tierra deseable, no creyeron en su
palabra, sino que murmuraron en sus tiendas, y no escucharon la voz de Adonay.
Por tanto, les juró abatirlos en el desierto, y esparcir su simiente entre las
naciones, y dispersarlos por las tierras.”
Por esta razón
este día fue transformado en un día de calamidad para la historia judía. En ese
día fueron destruidos los dos templos. En ese día fue derrotada la última
revuelta de los judíos contra Roma en el año 135. En ese día fueron expulsados
los judíos de España en el año 1492. En ese día empezó la primera guerra
mundial. En ese día ocurrió la noche de cristal durante la segunda guerra
mundial. El 9 de Av, en hebreo “tishá be-av”, es un día de ayuno y luto
nacional para el pueblo judío. Pero el profeta promete que se convertirá en un
día de alegría, como está escrito en Zacarías 8:19:
“Así dice El
Eterno de los ejércitos: "El ayuno del cuarto mes, el ayuno del quinto, el
ayuno del séptimo y el ayuno del décimo se convertirán para la casa de Yehudá
en gozo, alegría y fiestas alegres. Amad, pues, la verdad y la paz."”
13:30 “Entonces Calev hizo callar al
pueblo delante de Moshé, y dijo: Debemos ciertamente subir y tomar posesión de
ella, porque sin duda la conquistaremos.” – Calev era un hombre de fe y hablaba fe con su boca.
Lo que hay en el corazón habla la boca. Su nombre significa “según el corazón”
y así dio un informe según su corazón. El iba en contra de la corriente y
confiaba en las promesas de Adonay. Lo que él creyó en ese momento lo recibió
más tarde.
13:31 “Pero los hombres que habían subido con él
dijeron: No podemos subir contra ese pueblo, porque es más fuerte que
nosotros.” – Los diez
exploradores hablaban palabras negativas que iban en contra de las promesas de
El Eterno. Humanamente hablando tenían razón, pero el pueblo del Eterno no ha
sido llamado a caminar de manera natural, sino sobrenatural. Por lo tanto, la
única manera de poder conquistar la tierra, era por medio de la ayuda del
Eterno. Pero estos hombres no quisieron confiar en Elohim. Solamente evaluaban
las cosas de manera natural. Ellos no tenían fe y por lo tanto no recibieron lo
que Elhim había prometido.
Miremos en Hebreos 4:1-2: “Por tanto, temamos, no sea que permaneciendo aún la
promesa de entrar en su reposo, alguno de vosotros parezca no haberlo
alcanzado. Porque en verdad, a nosotros se nos ha anunciado la buena nueva,
como también a ellos; pero la palabra que ellos oyeron no les aprovechó por no
ir acompañada por la fe en los que la oyeron.”
Las promesas de
Adonay tienen que ir acompañadas por la fe en los que las oyen para que puedan
tener su cumplimiento. La confianza en las promesas de Elohim es un requisito
para poder beneficiarse de ellas.
Si estás en
problemas, ante gigantes y ante una tarea que humanamente es imposible
realizar, la única manera de poder pasar por en medio en victoria es confiar en
las promesas del Eterno.
Por lo tanto,
memoriza las promesas, medita en ellas día y noche, escríbelas en papeles y
pégalas en las paredes de tu casa, cántalas, repítelas a tus hijos, ponlas en
tu corazón y háblalas con tu boca y verás cómo tu corazón será fortalecido para
poder recibir lo que dicen las palabras poderosas del Todopoderoso y Fiel.
Amen? Y en estos días sí que hemos visto y recibido respuestas de las promesas
del Eterno. Aleluyah.
13:32 “Y dieron un mal informe a los hijos de Israel de la tierra que
habían reconocido, diciendo: La tierra por la que hemos ido para reconocerla es
una tierra que devora a sus habitantes, y toda la gente que vimos en ella son
hombres de gran estatura.” – Hablaron mal de la tierra, del regalo que el Eterno les estaba dando.
El Midrash cuenta que delante de los espías Adonay envió una plaga, de manera
que ellos vieron muertos por todas partes. En lugar de ver la mano poderosa de
Elohim dedujeron que la tierra estaba haciendo daño a sus habitantes. La tierra
de Israel es algo especial para El Eterno. Sus ojos están sobre ella durante
todo el año, como está escrito en Deuteronomio 11:12:
“Es una tierra
que Adonay tu Eloah cuida; los ojos de Adonay tu Eloah están
siempre sobre ella, desde el principio hasta el fin del año.”
Por esto
constituye un delito muy grave hablar mal de la tierra de Israel. Por causa de
su actitud negativa hacia la tierra de Israel estos exploradores sufrieron la
muerte.
- Alguno se acuerda
de El presidente Chavez de Venezuela, que le paso; o al Diputado turco que
hablo contra Israel y se infarto delante de todo su parlamento; y recientemente
el presidente de Iran Ebrahim Raisi; se cayo su helicóptero; como???... Israel Vive!
14:1
“Entonces toda la congregación levantó la voz y clamó, y el pueblo lloró
aquella noche.” – Según Rashí,
aquí la palabra congregación, en hebreo “edá”, no se refiere a todo el pueblo
sino al sanedrín, los 70 líderes principales. Ellos hicieron más caso al
informe negativo que del informe positivo. A la carne le gusta más las noticias
malas que las buenas.
Las
malas noticias venden mejor que las buenas. En lugar de escuchar la Palabra del
Eterno que había dado tantas promesas, y además con señales y prodigios,
hicieron caso a palabras llenas de incredulidad y no pudieron esperar en un
futuro positivo. Es muy importante que cuidemos nuestro corazón para que no
entren dudas de las palabras de Adonay. ¿Qué informe escuchas? ¿El del cielo o
el de los hombres?
Según las
palabras de cada uno, así le sucedió. Calev y Yehoshúa entraron en la tierra,
conforme a sus propias palabras, y el pueblo murió en el desierto, conforme a
sus propias palabras. ¿Cómo quieres que sea tu futuro? El futuro depende de tus
palabras. ¡Úsalas correctamente!
14:4 “Y se decían unos a otros: Nombremos un jefe y volvamos a
Mitsrayim” – La democracia
no es la mejor forma de dirigir un pueblo. Si el pueblo de Israel hubiera sido
sujeto a las normas democráticas de la sociedad moderna, hubieran vuelto a
Mitsrayim. Hubieran votado con la mayoría para tener un gobierno nuevo, sin
Moshé. Pero El Eterno tenía otro plan porque Él no se somete a la mayoría. El
poder principal no viene del pueblo, sino del Cielo.
Tercera aliyah, 14:8-25
14:11 “Y El Eterno dijo a Moshé: ¿Hasta
cuándo me desdeñará este pueblo? ¿Y hasta cuándo no creerán en mí a pesar de
todas las señales que he hecho en medio de ellos?” – Todo este conflicto tenía una causa, la
incredulidad. La incredulidad es la falta de confianza y la falta de fidelidad.
El pueblo eligió no creer al Eterno. Escogieron palabras de derrota en lugar de
las promesas de victoria, y así les alcanzó la derrota. La fe se basa en la
Palabra, como está escrito en Romanos 4:18; 10:17:
“El creyó en esperanza contra
esperanza, a fin de llegar a ser padre de muchas naciones, conforme a lo que
se le había dicho: ASÍ SERÁ TU DESCENDENCIA… Así que la fe viene del oír, y el oír, por la palabra del Elohim.”
Tenían
suficientes palabras del cielo para poder creer, pero tomaron la decisión de no
hacerlo. Por eso el Eterno se cansó de ellos.
14:12
“Los heriré con pestilencia y los desalojaré, y a ti te haré una nación más
grande y poderosa que ellos.” – Moshé tuvo la oportunidad de ser el padre de una gran nación.
Sin embargo rechazó esa
oportunidad por amor al pueblo. De la misma manera Yeshúa no vino para rechazar
a Israel y buscarse un nuevo Israel, sino para restaurar las 12 tribus de
Israel y además injertar a los gentiles en el pueblo santo. Él no creó una nueva
entidad, aparte de Israel, llamada Iglesia, sino restauró y amplió la antigua
nación de Israel.
14:13 “Pero Moshé respondió a El Eterno: Entonces lo oirán los mitsríes,
pues tú sacaste a este pueblo de en medio de ellos con tu poder”
– ¿Qué argumentos usaba Moshé en la intercesión?
1. Los mitsríes oirán que tú no pudiste
cumplir tu promesa. Está en juego el honor de Elohim, si Su Palabra es cumplida
o no. El testimonio ante las naciones es muy importante.
2. Las naciones de la tierra de Kenáan
dirán: “Adonay no pudo…”. El honor de Elohim está en juego, y por eso Moshé
está más interesado en él que de la supervivencia del pueblo. El pueblo merece
morir. Pasaron las diez pruebas y fallaron todas. Por eso el argumento que usa
Moshé no es que el pueblo sea salvo, sino de que el honor de E Eterno sea
salvo.
3. Basándose en la revelación de los 13 atributos de misericordia, Moshé
reclama que el Eterno actúe según quien es, misericordioso, que perdona…
“Muestra quien eres, conforme a lo que dijiste.” Vemos, por lo tanto, que
también en este caso el Nombre de Adonay es el motivo de la intercesión de
Moshé. El deseo de Moshé es que el Eterno sea conocido en el mundo, y por eso
se interpone a la propuesta del exterminio del pueblo y un plan nuevo, aunque
él mismo fuera el protagonista.
¡Qué corazón
tenía Moshé! Tuvo la oportunidad de ser el padre de un nuevo Israel, pero no
buscó su propia fama, ni que su propio nombre fuera engrandecido.
Tenía más
interés por el Nombre de Elohim que por su propio nombre. ¡Qué ejemplo para
nosotros!
Ahora bien, la promesa de que
los descendientes de Moshé fueran multiplicados se cumplió, según está escrito
en 1 Crónicas 23:17b: “los hijos
de Rejavyá fueron muchos.”
14:20 “Entonces Adonay dijo: Los he perdonado según tu palabra” – Las palabras de Moshé
estaban de acuerdo con las palabras y el honor del Eterno y por eso su oración
tuvo éxito. Ora las palabras del Eterno y tu oración tendrá éxito. Es más,
nunca se debe orar o hablar de cosas que no estén de acuerdo con la Torá, como
está escrito en 1 Pedro 4:11a:
“El que habla,
que hable conforme a las palabras de Eloah”
14:21 “pero ciertamente, vivo yo, que toda la tierra será llena de la
gloria de Elohim” – Esto sucederá
durante el reinado mesiánico.
14:22 “ciertamente todos los que han visto mi gloria y las señales que
hice en Mitsrayim y en el desierto, y que me han puesto a prueba estas diez
veces y no han oído mi voz” – Los hijos de Israel fueron probados diez veces, como nuestro padre
Avraham, y fallaron en todas las pruebas. Lo más importante no es lo que uno
hace cuando es probado sino cómo uno reacciona. Todas las veces que el pueblo
fue puesto a prueba murmuraron. Por eso no eran dignos de entrar en la tierra.
El
Talmud nombra las diez veces que el pueblo probo a Elohim: Dos en el mar
de Suf, cf. Éxodo 14:11;
Salmo 106:7; dos a causa
del agua, cf. Éxodo 15:23-24;
17:1-3; dos a causa
del maná, cf. Éxodo 16:19-20, 27; dos a causa del alimento,
cf. Éxodo 16:3; Números 11:4; una vez con el becerro de
oro, cf. Éxodo 32:4; y una vez con el pecado de los
exploradores, cf. Números 14:1.
Cuarta aliyah, 14:26 – 15:7
14:27 “¿Hasta cuando a esta malévola asamblea, que ellos provocan
que se quejen contra mí? Las quejas de los Hijos de Israel que ellos provocan
contra Mi Yo he escuchado.” – Dos grupos de personas son mencionados en este versículo; la
“asamblea” y los hijos de Israel. Según Rashí, esta “asamblea”, en hebreo
“edá”, son los diez espías que provocaron que los hijos de Israel se quejaran y
se revelaran contra el Eterno. De allí se aprende que una asamblea
constitucional, legalmente compuesta, tiene que tener como mínimo diez varones,
en hebreo “minyán”.
Según Mizrají,
la palabra “edá” literalmente significa “asamblea” o “congregación”. Se deriva
de la raíz yud, ayin, dalet, que implica reunirse para un fin determinado, y es
por eso que la Torá la utiliza para referirse a un grupo homogéneo de
individuos que comparten un propósito único.
14:28 “Diles: "Vivo yo"—declara
Adonay-- "que tal como habéis hablado a mis oídos, así haré yo con
vosotros.” – Como el hombre
ha sido creado a la imagen de Elohim le ha sido dado mucho poder en su lengua.
¿Quieres que sucedan cosas buenas en tu vida? Habla bien y obedece los
mandamientos, como está escrito en el Salmo 34:11-14:
“Venid, hijos,
escuchadme; os enseñaré el temor de Adonay. ¿Quién es el hombre que desea vida
y quiere muchos días para ver el bien? Guarda tu lengua del mal, y tus labios
de hablar engaño. Apártate del mal y haz el bien, busca la paz y síguela.”
14:29 “En este desierto caerán vuestros cadáveres, todos vuestros
enumerados de todos los contados de veinte años arriba, que han murmurado
contra mí.” – Según los
Midrashes, las mujeres, los hombres mayores de 60 años y la tribu de Leví
estaban excluidos de esta sentencia, porque sólo los que fueron contados, no
tenían el derecho de entrar.
“de veinte años
arriba” – De aquí aprendemos que el juicio divino llega sobre una persona a
partir de los 20 años. A partir de los 13 tiene la responsabilidad de caminar
con Elohim. Y si no decide caminar correctamente durante sus primeros años de
vida adulta, el juicio caerá sobre él a partir de los 20 años, no antes.
14:34 “Según el número de los días que reconocisteis la tierra, cuarenta
días, por cada día llevaréis vuestra culpa un año, hasta cuarenta años, y
conoceréis mi enemistad.” – De esto aprendemos que proféticamente se puede comparar un día con un
año y viceversa. Un año puede representar un día y un día puede representar un
año, cf. 2 Pedro 3:8.
14:35 “Yo, Adonay, he hablado; ciertamente esto haré a toda esta
perversa congregación que se han juntado contra mí. En este desierto serán
destruidos, y aquí morirán.” – El texto dice que ellos tenían que ser destruidos en el desierto y
morir allí. Según el Talmud esta oración está hablando de dos momentos de
muerte, en este mundo y en el mundo venidero “allí”.
14:36-37 “En cuanto a los hombres a quienes Moshé envió a reconocer la
tierra, y que volvieron e hicieron a toda la congregación murmurar contra él
dando un mal informe acerca de la tierra, aquellos hombres que dieron el mal
informe acerca de la tierra, murieron debido a una plaga delante de Elohim.”
– En este texto la Torá
no destaca la rebeldía de los exploradores, ni los culpa por su incredulidad,
sino los causa de hablar mal de la tierra. ¡Qué importante es la Tierra de
Israel en el plan divino! Fueron condenados a muerte por hablar mal de la
tierra. ¿Cómo hablamos de la tierra donde vivimos? La tierra es un regalo del
cielo al hombre. Hablemos bien de ella.
14:44 “Pero ellos se obstinaron en subir a la cumbre del monte; mas ni
el arca del pacto de Elohim ni Moshé se apartaron del campamento.” – Hay un límite para la gracia
del Eterno. Ya no hubo lugar para el arrepentimiento. Después de las diez
provocaciones, hubo una sentencia final, y ya no podían hacer teshuvá. ¡No se
puede jugar con el Eterno! Aquí aprendemos que hay una diferencia entre fe y
obstinación. El pueblo obstinado estaba aparentemente basándose en la Palabra
del Eterno. Pero no tomó en cuenta la sentencia que había sido dada. No se
puede tomar una palabra de las Escrituras y aplicarlas sobre su vida sin el
respaldo del Eterno. Necesitamos colaborar con el Eterno en el cumplimiento de
sus promesas, no tomar promesas sin una relación de obediencia. Aunque se
puedan utilizar mal las palabras de la Torá para sus propios caprichos o para
obtener poder, las Escrituras no fueron dadas para ser usadas así. Los que usan
las Escrituras de esa manera serán juzgados, porque no están sometidos al Eterno,
sino quieren dominar sus propias vidas y las vidas de otros. Las promesas son
dadas para los que andan con El Eterno en obediencia y en una relación íntima.
En
Mateo 4:6-7 está escrito:
“y le dice: Si eres Hijo de
Eloah, lánzate abajo, pues escrito está: "A SUS ANGELES TE
ENCOMENDARÁ", y: "EN LAS MANOS TE LLEVARÁN, NO SEA QUE TU PIE
TROPIECE EN PIEDRA." Yeshúa le dijo: También está escrito: "NO
TENTARÁS AL SEÑOR TU ELOAH."”
Hasatán, que es
un personaje real, no sólo una fuerza del mal, intentó engañar al Maestro para
que usara un texto de la Escritura para llevar a cabo una obra maravillosa sin
el permiso del cielo, sin la obediencia al Espíritu, sin caminar con la
Shejiná. En el desierto cayeron nuestros padres ante la misma tentación, pero
Yeshúa HaMashiaj hizo tikún, rectificación de ese pecado. ¡Aprendamos de Su
ejemplo!
Séptima aliyah 15:27-41
15:30-31 “Pero aquél que obre con desafío, ya sea nativo o extranjero,
ése blasfema contra El Eterno, y esa persona será cortada de entre su pueblo.
Porque ha menospreciado la palabra de Adonay, y ha quebrantado su mandamiento,
esa persona será enteramente cortada; su culpa caerá sobre ella.” – Según Rashí, cuando un
pecado de idolatría es cometido, no por error, sino con premeditación, entonces
hay pena de muerte, en el caso de no haber arrepentimiento. Mientras no haya
arrepentimiento, el pecado permanece en él.
15:32 “Cuando los hijos de
Israel estaban en el desierto, encontraron a un hombre que apilaba leña en
shabat.” – La Torá no
dice que el hombre tuvo arrepentimiento. Según Rashí, los que lo hallaron le
advirtieron de que eso estaba prohibido en shabat bajo pena de muerte, pero él
no hizo caso. Según la ley judía, una persona no puede ser sentenciada a muerte
si no hay dos o tres testigos que le hayan advertido antes de cometer el
crimen. Como el hombre no había hecho caso a la advertencia, Elohim dictó la
sentencia de lapidación. Moshé consultó con Adonay sólo para saber qué tipo de
pena de muerte le tenía que dar, puesto que ya se había dado el mandamiento del
shabat con la pena capital en el caso de que se quebrantara, cf. Éxodo 31:14-15. En la Torá hay cuatro formas
de ejecutar una persona, y Moshé no sabía cuál de ellas aplicar en este caso, y
por eso consultó. De esto aprendemos que Moshé no recibió toda la halajá en
Sinái. También se puede pensar que Moshé no estaba seguro si el hecho de apilar
leña debe ser considerada una “melachah” y por eso debería consultar a Elohim.
Este texto nos enseña cuán importante es el Shabat para nuestro Padre
celestial.
Los Tsitsit:
La costumbre
actual entre la gran mayoría de judíos observantes de la Torá es que sólo el
varón usa tsitsits en su ropa. Por esta razón una prenda con tsitsit es
considerado como una ropa de varón y por lo tanto le es prohibido a la mujer
usar tsitsit, para no quebrantar el mandamiento de no llevar ropa de hombre,
como está escrito en Deuteronomio
22:5:
“La mujer no
vestirá ropa de hombre, ni el hombre se pondrá ropa de mujer; porque cualquiera
que hace esto es abominación a Elohim tu Eloah.”
Los flecos son
hechos de una manera especial. Hay varias tradiciones y prácticas que se han
desarrollado durante la historia. Las más comunes hoy en día tienen cinco nudos
y ocho hilos. Entre los nudos el hilo azul da una cantidad de vueltas para así
producir un código numérico. Según la tradición asquenazí, que es la más
extendida hoy en día, hay siete, ocho, once y trece vueltas entre los cinco
nudos. Estos números corresponden al valor de las letras hebreas que forman las
palabras “Adonay Ejad”, cf. Deuteronomio 6:4b. La tradición sefardí usa diez,
cinco, seis y cinco vueltas entre los nudos, formando así el número de cada
letra del Nombre Sagrado.
Como las letras
de la palabra “tsitstit”, escrita con escritura completa, suman 600, y el fleco
está hecho por 8 hebras y 5 nudos, podemos sumar estos números y llegar a 613,
en recuerdo de los 613 mandamientos de la Torá. Los cinco nudos hablan de los cinco
libros de Moshé y los cinco sentidos del hombre que están involucrados en la
obediencia a los mandamientos.
Las ocho hebras
hablan de lo sobrenatural que se introduce en lo natural, mediante la entrega
de la Torá dada a Moshé y del Mesías que también vino del cielo, como está
escrito en Juan 3:13:
“Nadie ha subido
al cielo, sino el que bajó del cielo, es decir, el Hijo del Hombre que está en
el cielo.”
Una prenda
rectangular con cuatro tsitsits en las puntas es llamada talit. Antiguamente,
todos los israelitas se cubrían con mantos que tenían cuatro esquinas, pero con
el tiempo las vestimentas han ido cambiando y normalmente ya no tienen cuatro
esquinas. Por lo tanto, con ropas modernas que no tienen cuatro esquinas no se
puede cumplir este mandamiento, como está escrito en Deuteronomio 22:12: “Te harás borlas en las cuatro
puntas del manto con que te cubras.”
Por este motivo,
los rabinos inventaron el talit que, en primer lugar, sirve para el tiempo de
la oración de la mañana. También existe un talit más pequeño con un agujero en
medio para meter la cabeza, llamado “talit katán”, “un pequeño talit”.
Cuando los
judíos sefardíes fueron perseguidos en España durante la edad media inventaron
un talit que se podía llevar debajo de la ropa con el propósito de poder
cumplir, por lo menos, una parte del mandamiento sin tener que sufrir la
muerte. Por lo tanto, hay judíos que llevan el tsitsit de forma invisible,
debajo de su ropa. Otros usan el talit katán debajo de la ropa sacando las
tsitsits para fuera par que se cumpla el mandamiento.
Como el texto
dice que el manto en el cual hay que poner borlas, sirve para cubrirse, no es
bueno poner el talit katán directamente sobre el cuerpo, para que no sea una
ropa interior. Es conveniente vestirse con una camiseta y luego poner el
tsitsit por encima, y luego una camisa encima del tsitstit. (El talit katán
también es llamado tsitsit.) Como la Torá dice que el talit debe cubrirnos no
se considera correcto usar talits que tienen una tela que tiene más agujeros
que tela, como una malla. Rashí enseña que los cuatro flecos que están en las
cuatro direcciones nos recuerdan que tenemos la obligación de cumplir los
mandamientos dondequiera que nos volvemos. Las tsitsits representan dos
testigos en frente de una persona y dos testigos detrás de ella, para
advertirle contra el pecado.
La Torá nos
enseña que el recuerdo de todos los mandamientos protege nuestros corazones y
nuestros ojos del pecado. También nos enseña que si cumplimos los mandamientos
somos santificados. Los mandamientos nos santifican, nos apartan del pecado y
nos acercan al Eterno. Así que las tsitsits nos ayudan a acercarnos al Eterno.
¡Qué bonito regalo!
En Zacarías 8:23 está escrito: “Así dice HaShem
Tsevaot: "En aquellos días diez hombres de todas las lenguas de las
naciones asirán la esquina del vestido de un judío, diciendo: 'Iremos con
vosotros, porque hemos oído que Eloah está con vosotros.'"”
En la esquina
del vestido de un judío está la tsitsit. Los diez hombres son los descendientes
de las diez tribus perdidas que ahora están volviendo a casa y desean aprender
de los judíos cómo cumplir los mandamientos de la Torá dada a Moshé como el
Mesías Yeshúa lo hizo. Ahora estamos viviendo en esos tiempos.
En Mateo 9:20-22 está escrito: “Y he aquí, una mujer
que había estado sufriendo de flujo de sangre por doce años, se le acercó por
detrás y tocó el fleco de su manto; pues decía para sí: Si tan sólo toco su
manto, sanaré.Pero Yeshúa, volviéndose y viéndola, dijo: Hija, ten ánimo, tu fe
te ha sanado. Y al instante la mujer quedó sana.”
En Mateo 14:34-36 está escrito: “Terminada la
travesía, bajaron a tierra en Genesaret. Y cuando los hombres de aquel lugar
reconocieron a Yeshúa, enviaron a decirlo por toda aquella comarca de alrededor
y le trajeron todos los que tenían algún mal. Y le rogaban que les dejara tocar
siquiera el fleco de su manto; y todos los que lo tocaban quedaban curados.”
Todos los que
tocaron el fleco del manto del Mesías quedaron sanados de sus enfermedades. Los
que se aferraban a los mandamientos de la Torá transmitidas por el Mesías
recibieron sanidad. Había tres pasos para poder obtener el poder sanador que
vino del cielo y que fue enviado mediante Yeshúa HaMashiaj.
1.Reconocer a Yeshúa. 2.Acercarse a
Yeshúa. 3.Tocar uno de los flecos del manto de
Yeshúa.
Agarrar el fleco
no tiene que ver con magia, sino es algo simbólico, mostrando así el deseo
profundo de ser fiel al Eterno, y es un reconocimiento de la revelación divina
de la Torá dada por medio de Moshé a Israel.
Hay sanidad de
todas las enfermedades cuando obedecemos todos los mandamientos, como está
escrito en Éxodo 15:26:
“Y dijo: Si
escuchas atentamente la voz de Adonay tu Eloah, y haces lo que es recto ante
sus ojos, y escuchas sus mandamientos, y guardas todos sus estatutos, no te
enviaré ninguna de las enfermedades que envié sobre los mitsries; porque yo,
Adonay, soy tu sanador.”
El color azul
que tiene uno de los hilos de la tsitsit simboliza el cielo. El hilo azul debe
ser hecho de lana, que nos recuerda al Cordero. Cuando vino Yeshúa, el Cordero
de Eloah estaba entre el pueblo y cuando se aferraban a Moshé y al Cordero
fueron sanados. ¿Quieres ser sanado y restaurado en todo tu ser? Aférrate a
Moshé y al Cordero y sé parte de los que cantan la canción de Moshé y del
Cordero, como está escrito en Revelación 15:3-4:“Y cantan el cántico de Moshé, siervo de Eloah, y el
cántico del Cordero, diciendo: ¡Grandes y maravillosas son tus obras, oh
Señor Eloah, Todopoderoso! ¡Justos y verdaderos son tus caminos, oh Rey de las
naciones! ¡Oh Señor! ¿Quién no temerá y glorificará tu nombre? Pues sólo tú
eres santo; porque TODAS LAS NACIONES VENDRÁN Y ADORARÁN EN TU PRESENCIA, pues
tus justos juicios han sido revelados.”
Repitamos: 13
1 YHVH dijo a Moshé: 2 "Envía de parte tuya hombres a reconocer la
tierra de Kenaán, la cual Yo estoy dando al Pueblo de Israel. De cada tribu
ancestral manda a alguien que sea dirigente en su tribu."
A quien le creemos?
Aqui nos encontramos con el episodio
de los espías. Mucho es lo que podemos aprender de un relato como este.
Pero miremos el contexto en el cual se da. El Eterno nos saca de Egipto, nos da
la Toráh en el Monte Sinai, y quiere que entremos a poseer la tierra prometida.
Y Cuando estamos próximos a entrar, pareciera que nos olvidamos de las promesas
que El Eterno nos había dado:
Shemót / Éxodo 3:17 y Yo he dicho que Yo te
guiaré fuera de la miseria de Egipto a la tierra de los Kenaani, Hitti,
Emori, Perizi, Hivi y Yevusi, a una tierra que fluye con leche y
miel."'
Entonces decidimos desconfiar del Eterno. Entonces decidimos que un hombre por
cada tribu vaya e inspeccione la tierra que El Eterno nos dijo que nos iba a
dar. Ahí resultan los famosísimos doce espías.
Todos conocemos el triste final.
Solo dos, dieron concepto favorable.
Bemidbar / Números 13:30 Kalev escuchó a la gente
alrededor de Moshe, y dijo: "Debemos subir inmediatamente y tomar posesión
de ella; no hay duda de que podemos conquistarla."
Diez espías dieron concepto desfavorable acerca de la tierra prometida.
31 Pero los hombres que habían ido con él dijeron:
"Nosotros no podemos atacar esos pueblos, porque son más fuertes que
nosotros"; 32 y ellos difundieron un reporte negativo acerca de La
Tierra que ellos habían reconocido para el pueblo de Israel por decir:
"La tierra que pasamos por ella para espiarla es una tierra que devora sus
habitantes, ¡toda la gente que vimos son gigantes! 33 Vimos los Nefilim, los
descendientes de Anak, que era de los Nefilim; ¡para nosotros, por comparación,
lucíamos como langostas, y lucíamos así para ellos también!
Ya sabemos a quién le creyó el pueblo.
14 1 A
esto el pueblo de Israel gritó en desaliento y lloró toda la noche. 2 Además,
el pueblo de Israel comenzó a murmurar contra Moshe y Aharon; toda la comunidad
les dijo: "¡Nosotros deseamos haber muerto en la tierra de Egipto! ¡O que
hubiéramos muerto aquí en el desierto! 3 ¿Por qué YHVH nos está llevando a esta
tierra donde vamos a morir por la espada? ¡Nuestras esposas y nuestros pequeños
serán llevados como botín! ¿No sería mejor para nosotros regresar a
Egipto?" 4 Y ellos se dijeron uno al otro: "¡Vamos a nombrar un jefe
que nos devuelva a Egipto!"
La ira del Eterno no se hizo esperar.
11 YHVH
dijo a Moshe: "¿Hasta cuándo me tratará con desprecio este pueblo?
¿Por cuánto tiempo más no confiarán en mí, especialmente considerando
todas las señales que Yo he hecho entre ellos?
A Moshé le tocó interceder una vez más por el pueblo. Por la intercesión de
Moshé, el pueblo se salvó de ser aniquilado completamente. Pero de todas
maneras habría un castigo.
El Eterno dictaminó que toda esa generación moriría en el desierto.
28 Diles esto: 'Tan seguro como que Yo vivo, YHVH
jura, tan seguro como que ustedes han hablado en mi oído, Yo haré esto a
ustedes: 29 ¡sus cadáveres caerán en el desierto! Cada uno de ustedes
que fueron incluidos en el censo de más de veinte años, ustedes que han
murmurado contra mí, 30 de cierto no entrarán en La Tierra acerca de la
cual Yo levanté mi mano para jurar que Yo los haría habitar en ella –
excepto por Kalev el hijo de Yefuneh y Yahoshúa el hijo de Nun.
Todo porque esa generación le creyó más a los hombres que al Eterno.
Cuando leemos esa historia, nos parece inverosímil que eso hubiera ocurrido
así.
Como no creerle al Eterno? - Habían sido
muchos los prodigios y milagros que Él había hecho delante de ellos.
Como no creer en Él? Como no creerle
a Él?
Como tuvo más convencimiento la palabra de diez hombres que la palabra que El
Eterno les había dicho acerca de la tierra prometida?
Si a todos los que vivimos en esta
época se nos preguntara que hubiéramos hecho en esa circunstancia, seguramente
responderíamos que obedeceríamos al Eterno sobre todas las cosas.
Cierto
que sería muy fácil responder así? - Pero
creo que la realidad seria otra.
Así que no nos hagamos falsas
ilusiones.
Creo que hubiéramos reaccionado de la misma manera que nuestros antepasados.
Porqué digo esto?
Porque hoy en día ocurre lo mismo que hace 3.500 años.
Le seguimos creyendo más a los hombres que al Eterno.
Y para muestra les traigo varios “botones”.
Hay que colocar varias pruebas fehacientes, porque lo más seguro es que no
seamos conscientes de que estamos siguiendo al hombre en vez de seguir al
Eterno.
Uno de los trabajos de ha-satán (el enemigo), es hacernos creer que estamos
siendo obedientes al Eterno en todo.
Pero si somos confrontados con lo que la Toráh dice, entonces nos daremos
cuenta que somos desobedientes al Eterno en muchas áreas en las cuales creemos
ser obedientes.
Como no nos parte un rayo cuando
salimos de nuestras casas, entonces creemos que todo lo estamos haciendo bien.
Lo que no sabemos, es que El Eterno no trabaja así.
Cuando nosotros nos salimos de su camino en cualquier área de nuestra vida, Él
deja que sigamos en nuestro andar.
Ahí nos dice : “SHELAJ LEJÁ.......sigue por tu cuenta.”
“Después no me eches a Mi la culpa por las consecuencias”
“Yo no te he mandado que hagas eso.....tú lo decidiste........Yo lo
permito....... para que aprendas que por ahí no es..........y regreses a Mis
caminos.........y te dejes guiar por Mi”
Ejemplos : Oímos una enseñanza acerca de que el día de reposo es el domingo, y
decimos : Amén.
No tenemos en cuenta que en la Toráh y en el resto de las Sagradas Escrituras,
El Eterno manda que el día de reposo es el Shabat.
Oímos una enseñanza acerca de que podemos comer de todo, que no hay alimentos
prohibidos para nosotros.
No tenemos en cuenta que en la Toráh y
en el resto de las Sagradas Escrituras, El Eterno nos dice que no comamos
cierto tipo de alimentos.
No nos congregamos en ninguna parte, porque alguien nos enseñó que lo
importante es tener una relación con El Eterno.
No tenemos en cuenta que en la Toráh y en el resto de las Sagradas Escrituras,
El Eterno nos invita a congregarnos, sobre todo en Shabat, el cual es santa
convocación.
No diezmamos, ni ofrendamos, porque alguien nos enseñó que como no hay templo
en Yerushalaim (Jerusalém), entonces no hay a quien darle.
No tenemos en cuenta que en la Toráh y en el resto de las Sagradas Escrituras,
El Eterno nos dice que el que siembra en nosotros lo espiritual debe recibir a
cambio lo material de parte nuestra.
Celebramos la fiesta de Yom HaBikurím/ Día de las Primicias el 16 de Aviv, y
Shavuot/ Pentecostés el 6 de Siván, porque el Judaísmo tradicional nos dice que
esas son las fechas fijas para todos los años.
No tenemos en cuenta que en la
Toráh y en el resto de las Sagradas Escrituras, El Eterno nos dice que
cada año las fechas varían de acuerdo al día de la semana que cae Pesaj.
Pudiéramos seguir poniendo ejemplos al
respecto, pero bueno es que cada uno de nosotros se revise, y Palabra en mano,
nos demos cuenta a quien le estamos creyendo.
Con toda seguridad vamos a encontrar que el Mesías tiene mucha razón cuando
dice:
Yojanán
Mordejai / Mar. 7:13 ¡Por lo tanto, con sus tradiciones, las cuales han
sido pasadas a ustedes, anulan la Palabra de YHVH¡ Y hacen muchas
otras cosas como ésta."
Hacemos lo que creemos que es correcto, sin tener en cuenta la opinión del
Eterno.
Mishlé /
Prov. 16:25Hay caminos que parecen justos para una persona,pero al final son
caminos de muerte.
Que piensa El Eterno cuando actuamos así?
Shmuél
Alef / 1 Sam. 8:7 YHVH dijo a Shmuél: "Escucha al pueblo, a todo lo que te
diga; porque no es a ti que ellos están rechazando, ellos me están
rechazando a mí; ellos no quieren que Yo sea Rey sobre ellos.
A través de Shlomo HaMelej (Rey Salomón), El Eterno nos dejó enseñanza
al respecto:
Mishlé /
Prov.1:29 Porque odiaron el conocimiento y no escogieron temer a YHVH, 30
rehusaron mi consejo
y despreciaron mi reprensión. 31 Así que soportarán las consecuencias de su
propio camino y se hartarán de sus propias maquinaciones. 32 Porque el
vagar extraviado de los incautos los matará, y la cómoda indolencia de los
necios los destruirá; 33 pero aquellos que me prestan atención vivirán
seguros, sin aflicción por temor a la desgracia.
A través del Shelíaj (Apóstol) Shaul (Pablo), también recibimos amonestación de
parte del Eterno:
Efesiìm /
Efe. 4:25 Por tanto, despojándose de toda falsedad (la que muchos
enseñan sin tener en cuenta lo que El Eterno dice en Su
Palabra), que todos hablen la verdad (la Toráh) con su
prójimo, porque estamos íntimamente relacionados cada uno con el otro, como
miembros de un cuerpo.
Y para terminar, concluyamos con la enseñanza que nos dejó Yeshúa HaMashíaj:
Yojanán /
Jn. 5:43 Yo he venido en Nombre de mi Padre, y ustedes no me aceptan; si
otro viniera en su propio nombre, a ese sí le aceptarían. 44 ¿Cómo pueden
confiar? Están ocupados buscando alabanza uno del otro, en lugar de buscar
alabanza solamente de Yhvh. 45 "Pero no crean que voy a ser Yo el acusador
de ustedes delante del Padre. ¿Saben quién los acusará? ¡Moshe,(la Toráh, la
que nos dio El Eterno por medio de Moshé) ese mismo, con el mismo que
ustedes han contado! 46 Porque si ustedes en realidad le creyeran a Moshe,
a mí me creerían; porque fue acerca de mí que él escribió. 47 Pero si no
creen lo que él escribió, ¿cómo van a creer lo que Yo digo?"
Shabat Shalom.!!!
Adaptado por. Orlando Unda R.
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