Parasha Noaj (Bereshit 6:8 – 11:32)

Parasha Noaj (Bereshit 6:8 – 11:32)

Para ser estudiada el 1° de Jeshvan de 5.774

Octubre 5 de 2.013

Aliyas de la Parasha:

1. Gen 6:9-22
2. Gen 7:1-16
3. Gen 7:17-8;14
4. Gen 8:15-9;7
5. Gen 9:8-17
6. Gen 9:18-10;32
7. Gen 11:1-32

Haftará: Sefardi (Yeshayahu 54:1-10) Ashkenazi (Yeshayahu 54:1 – 55:5)

Codigo Real: Marcos 2:1-28

Noaj Significa: Descanso/Alivio.

Parasha NOAJ

Son muchas las enseñanzas que podemos sacar de la parashá / porción semanal.

Si nos ponemos a hablar del diluvio, saldrían muchos temas. La historia la conocemos todos.

Pero bueno sería revisar esa historia para darnos cuenta de algunos aspectos que no se tienen en cuenta.

El Eterno le dice a Noáj que haga un Arca. Porque Él va a hacer que llueva sobre la tierra hasta que todo sea tapado por las aguas. Noáj obedece diligentemente. Dentro de 120 años será el diluvio.

Durante todo ese tiempo, a la par de construir el arca, Noáj predica para que la gente se arrepienta.

Llega el momento del diluvio y los resultados de la predicación de Noáj son terribles. Nadie se arrepiente. Noáj no ayudó a salvar a nadie. Los únicos que se salvan son su familia.

Ellos no se salvaron porque se arrepintieron. Ellos se salvaron Por ser familia de Noáj.

Porqué tan pobres resultados de la predicación de Noáj?  Parece ser que aunque Noáj era un hombre justo. Aunque Noáj era una persona obediente al Eterno. Noáj no le creyó al Eterno el cuento del diluvio. Noáj construyó el arca en obediencia al Eterno. No quería meterse en problemas con Él. Noáj predica acerca del arrepentimiento. Noáj predica acerca del diluvio. Pero en el fondo de su corazón, Noáj no cree que algo como el diluvio pudiera ocurrir. Él nunca ha visto llover sobre la tierra. Hasta ahora la tierra se humedecía con vapores que salían de ella misma. En su cabeza no cabía la idea de un diluvio. Él fabrica el arca y habla del diluvio. Pero no cree que eso pueda suceder. Se convierte en un predicador obediente pero sin convicción. Y el resultado no debe sorprender a nadie. A nadie convence. A nadie salva. Noáj se dará cuenta muy tarde que las palabras del Eterno en cuanto al diluvio eran en serio. Cuando sale del arca y se da cuenta que los únicos seres humanos sobre la tierra son él y su familia.

Entonces Noáj se da cuenta de su negligencia como predicador. Entra en una depresión profunda.

Lo primero que se le ocurre es hacer un altar para El Eterno. Era un reconocimiento de que El Eterno es un Elohim cumplidor de lo que promete. Lo segundo que se le ocurre hacer es plantar una viña.

Quería emborracharse. Quería embriagarse. Quería a través del vino, olvidar que por su culpa la raza humana había sido borrada de la tierra.

Ahhhh……..ya no mas.  Ya criticamos a Noáj hasta mas no poder.

Pero viene la pregunta del millón. Y nosotros qué?  No estaremos actuando igual que Noáj?

Nos catalogamos como creyentes en El Eterno. Tratamos de obedecer Sus mandamientos.

Guardamos shabat. Guardamos las fiestas del Eterno. Utilizamos Talít. Comemos kosher.

No mentimos. No robamos.

Pero nuestra vida refleja que no le creemos algunas de las cosas que Él dice en las Sagradas Escrituras. En lo profundo de nuestro corazón no creemos que la mayoría de las personas se puedan perder. En lo profundo de nuestro corazón, abrigamos la esperanza de que El Eterno saque a la luz otro Plan de Salvación donde todos sean salvos.

Esa era la idea de Noáj. Esa es la idea de la mayoría de nosotros. No tenemos amor por los perdidos. Predicamos teshuva/arrepentimiento, pero no tenemos convicción de lo que pasará con una persona que no se arrepienta. No tenemos convicción de lo que pasará con millones y millones de personas que hacen parte de las mas de 4.500 religiones que hay en el mundo actual.

Por eso creemos que de alguna manera El Eterno las salvará. Lo mismo pensaba Noáj.

Y se equivocó rotundamente. Mas o menos mil millones de personas poblaban la tierra en ese momento. Solo se salvaron ocho personas.

Hoy somos casi siete mil millones de personas. Cuantos se salvarían si El Mesías viniera hoy?

Creo que muy, pero muy pocas. Ni siquiera somos conscientes de la inminencia de la venida del Mesías. Pero el mismo Yeshúa HaMashíaj nos dejó señales al respecto.

Mat. 24:36 "Pero cuándo vendrá ese día y hora, nadie sabe, ni los malajim del cielo, ni el Hijo, sólo el Padre. 37 Porque la venida del Ben Ha Adam será como en los días de Noaj.

Por qué compara los días de Su venida con los días de Noáj?

Porque serán iguales en cuanto a que nadie creía en el diluvio. Igual ya casi nadie cree sinceramente en la segunda venida de Yeshúa.

Muchos Pueden confesarlo con su boca. Pero en lo profundo de su corazón no están convencidos que estamos en los últimos tiempos.

La forma en que vivimos lo refleja. Si supiéramos con certeza que estamos en los últimos tiempos, nuestras vidas serían distintas. Nuestra forma de predicar cambiaría. Nuestras prioridades cambiarían.

Mat. 24:38 En aquellos tiempos antes del Diluvio la gente seguía comiendo y bebiendo, tomando esposas y dándose como esposas, hasta el día que Noaj entró en el arca; Igual que hoy en día, la gente sigue viviendo igual. Nadie se preocupa por lo que pueda pasar.

No vamos a creer firmemente en la segunda venida del Mesías hasta que veamos a Yeshúa delante de nosotros. Y eso será muy tarde para muchos.

Mat 24;39 y ellos no sabían lo que estaba pasando hasta que vino el Diluvio y fueron arrasados. Asimismo será cuando venga el Ben Ha Adam.

Cuando estemos allá arriba vamos a lamentar el tiempo que perdimos.

Vamos a lamentar las oportunidades que perdimos de hablarle a nuestro prójimo del Eterno.

Mientras estamos en esta tierra tratamos de calmar conciencia con doctrinas como las de las Leyes Noajicas / Noedicas.

Según esa doctrina, las demás naciones del mundo no tienen por qué obedecer la Toráh.

Según los inventores de esa doctrina, las naciones del mundo se salvarán cumpliendo solamente siete mandamientos, de los 613 que contiene la Toráh.

Esos siete mandamientos son conocidos como Las Leyes de Noáj, porque según ellos El Eterno se las dio a Noáj en Bereshít / Génesis 9.

Según ellos esas siete leyes son:

1. No blasfemar contra El Eterno.

2. No matar.

3. No incurrir en idolatría.

4. No tener relaciones sexuales prohibidas.

5. No comer carne de animal vivo.

6. Instituir tribunales para impartir justicia.

7. No robar.

Al revisar Bereshít 9 al derecho y al revés y no encontramos que El Eterno haya dicho en alguna parte acerca de lo que los defensores de estás doctrinas dicen. Estas doctrinas son utilizadas para evadir nuestras responsabilidades.

Estamos llamados como pueblo del Eterno a ejercer como REAL SACERDOCIO Y NACIÓN SANTA.

Pero nos hemos olvidado de eso. Mas bien nos hemos dedicado a vivir como en los tiempos de Noáj.

Mat 24:38 En aquellos tiempos antes del Diluvio la gente seguía comiendo y bebiendo, tomando esposas y dándose como esposas,

Vivimos igual que todo el mundo vive. Mientras, el mundo se pierde.

Y para que la conciencia no nos remuerda, entonces resultamos con doctrinas como las de las 7 Leyes de Noáj.

Yehezkél / Eze. 14:12 La palabra de YHVH vino a mí: 13 "Ser humano, cuando una tierra peca contra mí por tratar traicioneramente conmigo, así que Yo extienda mi brazo sobre ella y quiebre su sustento de comida, mandando hambruna y eliminando ambos humanos y sus animales; 14aun si estos tres hombres estuvieran en ella – Noaj, Daniel y Iyov – ellos por su justicia se salvarían sólo a sí," dice Adonay Elohim. 15 "Si suelto bestias salvajes en La Tierra, y ellas matan a sus hijos y la convierten en desolación, para que así nadie pueda pasar a causa de los animales; 16 si aún estos tres hombres estuvieran en ella," como Yo vivo, dice Adonay Elohim; ellos no salvarían a hijos ni hijas, sólo ellos mismos serían salvados, y la tierra permanecería despoblada. 17 "O si Yo traigo la espada sobre La Tierra, diciendo:' Que la espada pase por La Tierra, y así Yo elimine ambos sus humanos y sus animales; 18 si aun estos tres estuvieran en ella,' como que vivo Yo, dice YHVH Elohim, "ellos no salvarían ni hijos ni hijas; sólo ellos mismos serían salvados." 19 "O si Yo traigo una pestilencia sobre La Tierra y derramo mi furia sobre ella en derramamiento de sangre, y así Yo elimino ambos sus humanos y sus animales; 20 aun si Noaj, Daniel y Iyov estuvieran en ella," como vivo Yo, dice Adonay Elohim, "ellos no salvarían ni un hijo ni una hija; sólo ellos se salvarían a ellos mismos por su justicia."

Galatiyím / Gal. 6: 7 No se engañen a ustedes mismos; ¡nadie se burla de YHVH! Una persona cosecha lo que siembra. 8 Los que continúan sembrando en el campo de la vieja naturaleza, de modo de satisfacer sus demandas, eventualmente cosecharán la ruina; pero los que continúan sembrando en el campo del Espíritu, vida eterna cosecharán del Espíritu. 9 Por tanto, no nos cansemos de hacer lo que es bueno; pues si no nos damos por vencidos, en su tiempo, recogeremos la cosecha. 10 Entonces, cuando venga la oportunidad, hagamos lo que es bueno a todos, y especialmente a la familia de aquellos que están confiando con llenura de fe.

Hermanos nunca nos olvidamos lo que nos dicen las Sagradas Escrituras. La primera parasha de nuestro ciclo, vista el shabat pasado Bereshit, termina declarando que Noaj halló gracia ante El Eterno. Y aunque esta generación era en extremo corrupta, Noaj caminó como un justo. En su momento fue el justo que “sostuvo” el mundo (Hermanos: “el justo es el fundamento del mundo/ o mas bien el justo permanece por siempre”) (nosotros eramos llamados pecadores e impíos. Pero el Eterno nos cambio el nombre; y nos llamo JUSTOS. Amen.).

Aquí Noaj. Por su gracia y la justicia del Eterno, de hecho fue quien sobrevivió a la mayor catástrofe conocida hasta hoy.

Entonces aquellos que dicen que somos salvos por gracia tienen razón; porque para que Noaj hallara gracia delante del Eterno; el tuvo que respetar las instrucciones dadas por el creador.

Génesis 6:8- 9 “Estas son las generaciones de Noaj: Noaj, varón justo, era perfecto en

sus generaciones; con YHVH caminó Noaj/Noé.”

Uno de los conceptos más importantes que aprendemos en esta porción de la Torah es el concepto de lo que significa “caminar con Dios” en palabras correctas “caminar con YHVH”.

La palabra caminar en hebreo es “Halak” (Hey –Lamed-kaf-sofit).  Esta palabra puede significar caminar física o espiritualmente. En muchas partes de las Escrituras se usa la palabra para hacer referencia a alguien que guarda la Torah de YHVH.  Torah o Ley significa enseñanzas, direcciones, o instrucciones que el Eterno ha dado para que sus hijos y el mundo entero conozcan su voluntad.

Salmo 119: 1-3 “Bienaventurados los perfectos de camino, Los que andan en la ley de YHVH. Bienaventurados los que guardan sus testimonios, Y con todo el corazón le buscan; Pues no hacen iniquidad Los que andan en sus caminos.”

A pesar de estar rodeado de personas inicuas que habían llenado de violencia el mundo, Noaj determinó seguir la voluntad de YHVH. La Torah es Eterna. Contrario a lo que normalmente se piensa que la Torah o Ley comenzó con Moshe/Moisés, vemos en la misma historia de Adán y Java/Eva pruebas contundentes de que ellos conocían la Torah del Eterno. Un ejemplo es saber que Caín Y Abel conocían el sistema de sacrificios de sangre.

Noaj  tomó una decisión en su vida. La decisión de no contaminarse con el mundo y apartó para vivir conforme a las enseñanzas e instrucciones del Eterno. Este estilo apartado y diferente de vivir la vida, es lo que define las palabras “caminar con YHVH”. Y fue esta decisión precisamente la que hizo que Noé hallara gracia delante del Eterno y fuera salvado del juicio para toda la humanidad.

Hebreos 11: “Por la fe Noé, cuando fue advertido por Dios acerca de cosas que aún no se veían, con temor preparó el arca en que su casa se salvase; y por esa fe condenó al mundo, y fue hecho heredero de la justicia que viene por la fe.”

Hermanos fue entonces por fe o por obras (obediencia a la Torah) que Noé/Noaj  hallo gracia delante de YHVH? Por FE Noaj/Noé decidió obedecer y seguir la voz del Eterno y apartarse del mundo. Y fue el conocimiento de los mandamientos lo que le permitió caminar en la voluntad del Padre.

Nada ha cambiado desde entonces en el plan del Padre. Cuando escuchamos la voz o el llamado de YESHUA para seguirle, por FE creemos en El, en su obra redentora, por  GRACIA recibimos salvación, pues fue por su inmenso amor que El Padre envió a su hijo a dar su vida por nosotros, (no por méritos del hombre), y porque queremos agradar al Padre y caminar con El, aprendemos sus instrucciones y su camino y obedecemos su palabra.

NO OBEDECEMOS LA TORAH PARA SALVARNOS…. OBEDECEMOS LA TORAH

PORQUE SOMOS SALVOS !   (quien lo crea diga amen.)

Ahora hagamos un paralelo comparativo sobre La Torah y la Gracia

El tema de la Gracia es otro de los tantos  mal entendidos muy común en las comunidades hoy día. Este  es el concepto de que la Torah y la gracia son ideas mutuamente excluyentes; o que no van de la mano. Por ejemplo un autor escribe: «Un creyente no puede estar bajo la ley y bajo la gracia al mismo tiempo.» (El Plan de Dios de los Siglos; Louis T. Tallbot; 1970; p. 83)

Ahora para ver si esto es cierto. Preguntémonos: ¿cómo se salvaba la gente en tiempos del «Antiguo Pacto mal llamado Antiguo Testamento»? ¿ se salvaban por obras o por gracia? El hecho es que cuando Shaul habla de cómo somos salvos por gracia mediante la fe a menudo cita la Torah para probar su punto. Dos de sus textos de prueba favoritos para este concepto son de la Torah: «Y él le creyó a YHWH; y se lo contó por justicia.» (Gn. 15:6 = Rm. 4:3, 22; Gal. 3:6) y «...el justo vivirá por la fe.» (Hab. 2:4 = Rm. 1:17; Gal. 3:11)

Así que está argumentando con base en la Torah que uno se salva por fe solamente aparte de las obras. De hecho, la pura verdad es que los hombres de los tiempos del «Antiguo Pacto» estaban bajo la gracia tanto como nosotros hoy día:

* «Pero Nóaj halló gracia a los ojos de YHWH.» (Gn. 6:8)

* «tú también has hallado gracia a mi vista… pues has ganado gracia a mi vista» (Ex. 33:12,17)

* «...y ahora he hallado gracia a tu vista...» (Jue. 6:17)

* «El pueblo hallo gracia en el desierto...» (Jer. 31:2)

Así como hemos aprendido de la Torah que la gente en tiempos del «Antiguo Pacto» se salvaban por gracia mediante la fe. No habrían podido hallar su salvación de manera diferente a la que hallamos hoy día, como escribe Shaul:

«Sabiendo que el hombre no se justifica por obras de la ley, sino por la fe de Yeshúa el Mesías, y aun nosotros hemos creído en Yeshúa el Mesías, para que seamos justificados por la fe/emuna del Mesías, y no por obras de la ley; pues por las obras de la ley ninguna carne será salva.» (Gal. 2:16)

Pensémoslo bien. Si lo que hemos demostrado ser cierto es cierto, entonces la gente en el desierto en los días de Moshé se salvaban por gracia mediante la fe. Ahora vemos el pleno impacto de esa afirmación. ¡Eso significa que la gente estaba bajo la gracia, y se salvaban por la fe solamente y no por las obras, cuando Moshé estaba apedreando personas hasta morir por violar la Torah! Obviamente, entonces ser salvo por gracia mediante la fe de ninguna manera afecta la observancia de la Torah.

Así que si la gracia y la fe no niegan la observancia de la Torah, entonces ¿cuál es la verdadera naturaleza de la fe y la gracia? ¿Qué es fe? ¿Qué es gracia? Tornémonos nuevamente a las Escrituras para la respuesta.

Pero primero miremos ¿que es Pecado?   1 Juan 3;4:  “pecado es Infraccion de la Torah”

Hay dos palabras para «gracia» en el hebreo. La primera palabra es «Jen» (Strong 2580/2581) que significa «gracia o encanto». La otra palabra es «Jésed» (Strong 2616/2617) que conlleva el significado de «gracia, misericordia o favor inmerecido». Estas dos palabras son estrechos paralelos en significado de las dos palabras griegas en la Biblia Griega. Estas son «Járis» (Strong 5485/5463) que significa «gracia o encanto» y «Éleos» (Strong 1651/1653) que significa «gracia, misericordia o favor no-debido». Obviamente el hebreo «Jen» = griego «Járis» y el hebreo «Jésed» = griego «Éleos».

Ahora, note que  la version RV tiende a traducir «Jen»/«Jaris» como «gracia» pero tiende a traducir «Jésed»/«Éleos» como «misericordia». Ahora bien, cuando pensamos en «gracia» en términos bíblicos usualmente pensamos en el concepto de «Jésed»/«Éleos» «favor no-debido».

Ahora, si seguimos el esquema de traducción de la RV entonces parece que hay mucha más gracia en los Escritos del nuevo pacto que en el Tanakh, ya que «Jen» aparece sólo 70 veces en el Tanakh mientras que «Járis» aparece 233 veces en el Brit hadasha. Pero recuerde, el concepto de «favor no-debido» es, en realidad, «Jésed» o «Éleos». «Jésed» aparece 251 veces en el Tanakh, mientras que «Éleos» aparece sólo 50 veces en el pacto Renovado. En todo caso hay mucha más «gracia» en el Tanakh que en el Brit hadasha.

Ahora, volvámonos al Tanakh para obtener un mejor entendimiento de lo que es en realidad la gracia. Según las Escrituras hay una estrecha conexión entre «la gracia» y «el temor de YHWH»:

* «Porque tan alto como están los cielos sobre la tierra, así de grande es su gracia («Jésed») sobre los que le temen.» (Sal. 103:11)

* «Que los que temen a YHWH digan: «Su gracia («Jésed») es eterna.»» (Sal. 118:4)

* «Por gracia («Jésed») y verdad se expía la iniquidad, y por el temor de YHWH uno se mantiene alejado del mal.» (Pr. 16:6)

Y el temor de YHWH, según el Tanakh, incluye la observancia de la Torah:

* «...para que aprenda el temor de YHWH su Poderoso, a guardar todas las palabras de esta Torah y estos estatutos, para ponerlos por obra.» (Dt. 17:19)

* «...para que oigan, y que aprendan, y teman a YHWH tu Poderoso, y observen para practicar todas las palabras de esta Torah.» (Dt. 31:12)

Por lo tanto, claramente no hay conflicto entre la gracia y la Torah. De hecho, la Torah está estrechamente relacionada con la gracia.

Ahora quiero hacer claro que no estamos diciendo que gana su propia salvación observar la Torah. A veces me han preguntado: «¿Tengo que guardar la Torah para ser salvo?» Yo respondo: «Por supuesto que no... ¿Tiene usted que estar limpio para tomar un baño?»

Usted pudiera preguntar: «Bueno, si no guardo la Torah para salvación, entonces ¿por qué observamos la Torah?» Primero que todo, observar la Torah muestra nuestra fe (Tit. 3:5-8; 1 Jn. 2:3-7; Stg. 2:14-26). En Segundo lugar, hay recompensas por guardar la Torah (Tit. 3:8). El Salmista nos dice que ella «restaura el alma» (Sal. 19:7).

Yeshúa promete que los que guardan la Torah y enseñan a otros a hacerlo serán llamados primeros en el Reino del cielo (Mt. 5:19). Adicionalmente, a los judíos que guardan la Torah Mosaica se les da una larga lista de otras promesas (Dt. 28). Ahora bien, si la Torah es Buena y Eterna, entonces es solo razonable que debe ser observada. Shaul/Pablo nos dice que no debemos usar la gracia como excusa para pecar (Ro. 6:1-2, 15) y que la única manera de saber lo que es pecado es mediante la Torah (Ro. 7:7).

Yeshúa nos dice que si lo amamos guardaremos su mandamientos (Jn. 14:15, 21, 23-25; 15:10). El hecho de que somos salvos por fe es precisamente la razón por la que debemos observar la Torah, como nos dice la Escritura: «...no por obras de justicia que hayamos hecho, sino según su misericordia Él nos salvó, por el lavamiento de la regeneración y la renovación del Espíritu de Santidad, que él derramó sobre nosotros abundantemente mediante Yeshúa el Mesías nuestro Salvador, La torah viva, para que habiendo sido justificados por su gracia llegáramos a ser herederos según la esperanza de vida eterna. Este es dicho fiel, y quiero que ustedes afirmen constantemente que los que han creído en Elohim deben ser cuidadosos de mantener buenas obras. Estas cosas son buenas y provechosas para los hombres.» (Tit. 3:5-8)

Ese personaje que fue escogido por El Eterno para hacer un borrón y cuenta nueva con la humanidad

Cuando nos ponemos a pensar el por qué El Eterno escogió a Noáj y no a otra persona cualquiera, tendríamos que buscar en la Toráh las razones que El Eterno tuvo para esa escogencia.

Y en esta Parasha/porción semanal nos damos cuenta de las razones del Eterno.

Porque llama mucho nuestra atención la manera como la Toráh comienza hablando de Noáj :

9 Y éstas son las generaciones de Noáj. Noáj era un hombre recto y siendo perfecto en su generación, Noáj era bien placentero a Elohim.

Cuantos quisiéramos que se hablara así de nosotros hoy en día ?

Noáj era un hombre tzadík /recto y siendo perfecto en su generación, Noáj era bien placentero a Elohim.

Si nos damos cuenta, ahí no dice que como Noáj alcanzó la GRACIA del Eterno, entonces Noáj hacía lo que le daba la gana.

La GRACIA del Eterno fue necesaria para que nosotros pudiéramos ser obedientes a Él.

En la historia de Noáj está claro lo que decimos. Toda la humanidad fue desobediente al Eterno.

Por eso fue eliminada en el diluvio. En cambio Noáj era obediente. Había alcanzado GRACIA delante del Eterno. Agradaba al Eterno en todo lo que hacía.

Si la salvación por GRACIA en aquella época se entendiera como la mayoría de los “creyentes” la entienden hoy, entonces nos tendríamos que preguntar:

¿Por qué esa salvación por GRACIA, gratis, que nada tenemos que hacer para conseguirla, no fue extendida para toda la humanidad?

Por qué solo fue para Noáj? Aquí tenemos que reconocer que habría que replantear el concepto de GRACIA.

Según aprendimos la semana pasada, venimos a esta tierra a aprender obediencia.

Para eso El Eterno nos dejó 613 mandamientos.Para probar que tan obedientes estamos siendo.
Pero la desobediencia en nosotros es grande. Seguimos siendo rebeldes al Eterno.

Nos hemos inventado una doctrina que dice que El Eterno se aburrió de tratar de enseñarnos obediencia

Ahora Él nos dice: Tranquilos, el nuevo plan de salvación es por GRACIA.

Ya no tienen que obedecer mis mandamientos. Vénganse para el cielo nuevamente como desobedientes.

Eso no es lo que dicen las Sagradas Escrituras acerca de la GRACIA.

Si estudiamos la Palabra del Eterno desde la perspectiva hebrea nos vamos a dar cuenta fácilmente que la cosa no es tan fácil.

Que la GRACIA del Eterno, lógicamente que si existe, pero es muy distinta a la GRACIA que nos han enseñado.

La GRACIA del Eterno se manifiesta en nuestra vida, ayudándonos para que podamos cumplir Sus mandamientos.

Eso está claro en las Sagradas Escrituras de desde Bereshit hasta Revelaciones de tapa a tapa.

Vamos a tratar de explicarlo.

Muchos creen que con recibir a Yeshúa ya no tienen que hacer nada mas para ser salvos.

Que con solo decir una “oración de fe”, ya todo está listo.

Tenemos que entender que ese solo es el primer paso.

Cuando recibimos a Yeshúa como nuestro salvador, lo que El Eterno está haciendo es limpiándonos de nuestros pecados para que Su Ruaj Hakodèsh /Espíritu del Santo pueda morar en nosotros.

Y eso para qué?   Para que seamos salvos y ya?           No.

Hace falta lo principal.  Que seamos obedientes a Sus mandamientos.

Yejetzkel / Ezequiel 36;27Yo pondré Mi Espíritu dentro de ti y causaré que vivas por mis leyes, que respetes mis estatutos y los obedezcas.

aquí podríamos decir que mas claro no canta un gallo.

De donde acá nos hemos dejado engañar tan fácilmente?    

Está claro que guardando mandamientos nadie se salva.

Pero el guardar los mandamientos es una evidencia de que somos salvos.

Si no guardamos los mandamientos del Eterno, no estamos dando señales de salvación.

Yakobo / Santiago 2: 14 ¿De qué sirve, mis hermanos, si alguno asegura que tiene fe, pero no tiene obras? ¿Podrá esta "tal fe" salvarle? 17Así que, la fe sola, si no está acompañada con obras, está muerta.

De que obras estará hablando el shelíaj / apóstol acá?

Para entender de que obras se habla, miremos otros pasajes que son utilizados por los defensores de la GRACIA mal interpretada.

Efes. 2 : 8 Pues han sido salvos por gracia, por medio de la fe, de modo que esto no lo hicieron ustedes, pues fue don de YHVH. 9 No fueron salvos por sus propias obras; por tanto, nadie debe jactarse.

Hasta ahí todos lo entendemos. Atrás lo habíamos dicho. Nadie se salva guardando mandamientos.

La salvación es por GRACIA.

Pero tenemos que entender que el pasaje no se acaba en el pasúk 9 de efesios 2.

Efes 2;10 porque somos hechura de YHVH, creados en unión con el Mashíaj Yeshúa, para una vida de buenas obras de antemano preparada por YHVH, para que así hiciéramos.

Acá dice La Palabra que la razón por la cual El Eterno nos dio la vida en Yeshúa es para que andemos en esas buenas obras.

Cuales buenas obras?    El mismo pasaje lo dice:  de antemano preparada por YHVH, para que así hiciéramos.

Como así que esas buenas obras han sido preparadas por YHVH para que así hiciéramos?

Cuando las preparó?            Fácil.        En la Toráh.

Los 613 mandamientos que hacen parte del Manual de Vida para nosotros que es la Toráh.

Así que si queremos ser como Noáj. Agrademos al Eterno en todo lo que hacemos.

Obedeciendo los mandamientos que Él nos ordena para cada área de nuestra vida.

Así estaremos demostrando que la GRACIA del Eterno está sobre nosotros.

Y hablarles de esa GRACIA verdadera a todos los que podamos.

Saquemos del engaño a aquellos que han creído en la GRACIA falsa que hoy en día se predica.

La Vida Eterna de ellos está en juego.

Tú te preguntarás: O sea que la mayoría de las personas “creyentes” están engañadas?

Y para consolarte dirás: El Eterno tendrá misericordia de ellos, y le tocará salvarlos como sea, porque: ¿Como Él va a permitir que todos ellos se condenen?

Quiero contestarte con el ejemplo de Noáj.

Dicen los estudiosos del tema demográfico, que en la época de Noáj habían mil millones de personas en la tierra.

Solamente se salvaron 8 personas.

Hermanos El Eterno es el mismo, ayer, hoy y por los siglos.

Su GRACIA es para todo aquel que quiera acceder a ella.

El que no quiera, no será obligado.

Revelación / Apo. 3:15 "Yo sé lo que estás haciendo: No eres caliente ni frío. ¡Cuánto quisiera que fueras uno o el otro! 16 Así que, porque eres tibio, ni frío ni caliente, ¡Yo te vomitaré de mi boca! 17 Te mantienes diciendo: 'Yo soy rico, me he hecho rico,16 ¡no necesito nada! ¡No sabes que eres un desgraciado, das lástima, pobre, ciego y desnudo! 18 Mi consejo a ti es que compres de mí oro refinado por fuego, para que puedas ser rico; y ropas blancas (símbolo de santidad, de obediencia), para que puedas vestirte, y no te tengas que avergonzar de tu desnudez; y colirio para ungir tus ojos, para que puedas ver. 19 ¡En cuanto a mí, Yo reprendo y disciplino a todos los que amo; así que esfuércense y vuélvanse de sus pecados! 20 He aquí, Yo estoy en pie a la puerta llamando. Si alguno oye mi voz y abre la puerta, Yo entraré en él, y cenaré con él, y él cenará conmigo. 21 Yo permitiré al que gane la victoria, se siente conmigo en mi trono, así como Yo he ganado la victoria, y me he sentado con mi Padre en su trono. 22 Los que tienen oídos, oigan lo que el Espíritu le está diciendo a las comunidades Mesiánicas."'

«Y en esto sabemos que lo conocemos, si guardamos sus mandamientos. El que dice: «Yo lo conozco», y no guarda sus mandamientos, el tal es mentiroso, y la verdad no está en él. Pero el que guarda su palabra, verdaderamente el amor de Elohim se perfecciona en él. En esto sabemos que estamos en él. El que dice que permanece en él debe andar como él anduvo. Hermanos, no les escribo un mandamiento Nuevo, sino el antiguo mandamiento que ustedes han tenido desde el principio. El antiguo mandamiento es la palabra que ustedes oyeron desde el principio.» (1 Jn. 2:3-7)

hermanos, Nosotros los Judios Mesianicos. Mejor los Israelitas del pacto renovado: podemos decir que somos simplemente israelitas completos ... No tenemos ideas diferentes, sino que confesamos todo exactamente como lo proclama la Torah y en el estilo judío. Amen?

Shabat shalom. 

ORLANDO UNDA R